El regalo perfecto 2 / Árbol de Navidad

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Aldea de Konoha, Mansión Uchiha

– ¿Artificial o Natural? – Preguntó Mikoto por tercera vez a sus hijos sin recibir respuesta alguna – Vamos, ¿dónde está ese espíritu navideño, Itachi, Sasuke?

– Pues definitivamente aquí no Mikoto – comentó Fugaku con desaprobación.

Unos segundos después Itachi se apiado de su mamá y dijo – No importa qué tipo escojan, yo no podré estar aquí con ustedes, estaré en una misión importante, el que elijan estará bien para mí.

– Bien, Itachi – Dijo Mikoto mirando a su hijo mayor, pero ahora la mirada se dirigía al menor – Y tú, Sasuke no has dicho nada.

– Natural, artificial, qué más da.

– Sasuke, no le hables así a tu madre – lo reprendió su padre

– Sí, como sea – metió las manos en su bolsillo, mientras salía de la habitación.

Los Uchiha se sorprendieron de la actitud grosera de su hijo menor – ¿Alguien sabes qué tiene?

El hermano mayor contestó – Su novia lo cortó.

– ¿Qué lo cortó? ¿Por qué? – la voz preocupada de Mikoto sobresalió.

– Por infiel.

– Pero ella adora a tu hermano, Sakura no actuaría así – Dijo Fugaku

– ¿Y quién dijo que había sido Sakura? Fue el idiota de su hijo menor. Sakura descubrió a su novio besando Ten-Ten.

Sus padres se sorprendieron y no culpaban la actitud de la chica Haruno.

– Siendo así, Sasuke tendrá que arreglar el problema en que se metió.

En eso un gritó espeluznante se escuchó por toda la casa – Todo es un mal entendido, jamás lastimaría a Sakura.

Después de tan horrible grito, fue seguido de la puerta principal azotándose.

– Sí, en definitiva alguien está muy enojado – Dijo Itachi de forma despreocupada – Ahora, les parece si decidimos el color de los adornos – Sugirió con una gran sonrisa.

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Aldea de Konoha, Residencia Haruno

– ¡Oh! Sasuke-Kun, lo siento Sakura decidió ir al centro comercial, balbuceando algo como estar cansada de llorar, ¿sabes si le sucedió algo? ­ – Interrogó directamente la Sra. Mebuki al novio de su hija.

El rostro del novio de su hija palideció, no estaba listo para enfrentarse a los cargos sin pruebas de su inocencia y menos frente a la madre de Sakura.

– En realidad...

– Tranquilo, sólo fue una pregunta retórica, seguro que arreglaran sus problemas – con un tono de suavidad – No es bueno que sigan distanciados en la época navideña y que mi hija siga sufriendo, ¿verdad? – Olvidándose de su lindo rostro angelical, transformándose un demonio enfurecido.

El chico Uchiha palideció nuevamente, asintiendo de forma afirmativa lo antes dicho por ella, y tuvo que admitir que por un momento temió por su vida, y comprendió que nunca haría enojar a su futura suegra, pasara lo que pasara.

– Bien, bien, confío en que así será, antes de irte, dile a Sakura que los espero por la tarde para adornar el árbol, gracias Sasuke-Kun.

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Aldea de Konoha

Sasuke corrió y corrió por los pasillos del Centro Comercial pero sin rastro de la chica, preguntó por todos lados y en cada local que le gustaba comprar.

– "Nada" – pensó el Uchiha, trató de buscar su chakra, de sentirlo era imposible no reconocerlo cuando se había convertido en parte de su vida y la respuesta fue un completo nada.

Siguió por el parque, por la academia, por los rincones que suelen visitar, cuando un chakra conocido fue detectado, bueno, en realidad dos chakras.

– Uchiha, tardaste demasiado – el joven shinobi dijo con los brazos cruzados cerca de Ichiraku.

– No sabía que tuviéramos una cita, Hyuga – respondió en el mismo tono hostil – ¿Qué demonios quieres?

En ese momento apareció el segundo chakra – Ten-Ten – Susurró aún más molesto – Si no fueras mujer... – Dejó el comentario al aire.

– Tranquilo Uchiha, Ten-Ten está arrepentida de lo que hizo.

La chica camino hacia delante, pasando la protección de Neji – Yo puedo hablar por mí misma – El Hyuga se molestó y apretó sus labios – Sasuke, quiero disculparme, mi intención era poner celoso a Neji, lo cual resultó pero con daños colaterales.

Tanto el Uchiha como el Hyuga no hablaban, pero mantenían una pose amenazante en todo momento, al ver que no decían nada la chica prosiguió – Uno de esos daños fue Sakura, ya hablé con ella le expliqué que todo fue un gran y terrible error, que yo nunca te mirado de otra forma que no fue como un compañero más y no sé si decirlo pero también como un amigo.

– ¿Y qué esperas de mí? ¿Un agradecimiento? – Preguntó Sasuke.

– Puedes dejar el sarcasmo de lado, Uchiha.

Antes que el ambiente fuera cargado con más miradas amenazantes Ten-Ten dijo – Pido perdón – haciendo una reverencia y estirando los brazos para ofrecer una esfera de nieve.

Sasuke reconoció la esfera, esa esfera la buscó durante mucho tiempo sin encontrarla, Sakura la había visto y ella por fin le entregaba el regalo perfecto; lo tomó a regañadientes.

Ten-Ten se sintió aliviada y sonriendo le comentó – Sakura te está buscando, mencionó que iría a tu casa para poder reconciliarse.

Sin añadir más, Sasuke asintió, miró a Neji por última vez y corrió al encuentro de su novia.

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Tal y como dijo Ten-Ten, Sakura se encontraba adornando el árbol de navidad junto con sus padres, pero cuando la chica lo miró le entregó el adorno a Mikoto para correr a los brazos de Sasuke.

– Lo siento – murmuró con un beso – Lo siento – con otro beso más.

– Sakura te extrañé – Esta vez Sasuke la cargó ya la llevó lejos de sus padres.

Aprovechando un poco la privacidad, Sasuke le entregó la esfera, la pelirrosa sonrió alegrándose por recibir tan lindo regalo.

– Bien, ahora que tienes tu regalo perfecto, ¿podemos ir a tu casa? Tu mamá nos espera para adornar su árbol de navidad.

– Sí, sólo terminemos de adornar el árbol Uchiha y después el árbol Haruno.

Una vez más se abrazaron y Sakura murmuró – Por favor no volvamos a separarnos.

Sasuke tenía algo que decir al respecto, sin embargo se contuvo y sólo murmuró – Estoy de acuerdo contigo.

Fin

06122018    

El regalo perfectoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora