Apodos [Chaesoo]

Séptimo Apodo

La música retumbaba por toda la casa de los Park, mientras está era acompañada por gritos de felicitación por parte de todos los presentes, deseando a quien se cruzará en su camino un feliz y  próspero año nuevo.

Jisoo, quien se encontraba sentada en uno de los sofás individuales veía la escena completamente ajena a su entorno, y esto era a la ausencia de la anfitriona de la casa, que se había desaparecido hace no más de diez minutos junto a Jennie.

Bufó.

Últimamente, ese par se encontraba más unido que de costumbre y eso le llegaba a irritar de una manera tal, que ni ella misma podía entenderse.

Miró nuevamente la hora en su teléfono mientras comenzaba a mover uno de sus pies de arriba a abajo, impaciente.

11:49 p.m

¿Qué estarán haciendo esas dos? Se preguntaba mientras comenzaba a jugar con sus manos en un intento de disminuir su desesperación. Ambas menores se habían alejado un poco de la fiesta y prácticamente ya las había perdido de vista desde hacía buen rato.

Se levantó de su asiento y se dirigió a la cocina, pero Park no se encontraba ahí, ni Jennie.

Sin embargo, Lisa si. La rubia al verle le hizo un par de señas para que se acercase.

—Hey.—Saludó con su característico tono enérgico.

—Hola.—La mayor hizo un vago intento por sonreír, mas lo que había conseguido sólo era una mueca.—¿Sabes dónde está Chaeyoung?

Manoban se encogió de hombros mientras bebía del vaso que llavaba en mano.—Está con Jennie arriba.—Señaló en dirección a las escaleras mientras elevaba sus cejas de arriba hacia abajo de manera sugerente.

—¿Tú crees que...?—La chica negó con la cabeza antes de que pudiera terminar la pregunta, como si supiera lo que iba a cuestionar.

—Aunque ya llevan un buen rato allá.—Soltó con sorna la tailandesa esperando que Jisoo le siguiera el juego, sin embargo, lo único que hizo Kim fue fruncir el ceño y dirigirse inmediatamente hacia las escaleras, dejando a la más alta ahí algo confundida.

Justo cuando iba a subir las escaleras una voz le hizo quedar petrificada.

—Jisoo.—Esa voz que conocía muy bien retumbó en todo su ser mientras su corazón se aceleraba.—¿Qué haces aquí?

Sus mejillas se colorearon de un tono rosado cuando sus miradas se cruzaron, viendo como Chaeyoung le miraba curiosa. Esperando a que respondiera su pregunta.

No debía de estar ahí.

El silencio que les invadió lo confirmaba. Ni siquiera sabía que responder.

—Ejem.—Carraspeó Jennie.—Yo...Iré con Lisa.

Justo cuando la morena pasó a un lado suyo, le guiñó un ojo, haciendo que un repentino desconcierto ocupara lugar en su rostro.

Cuando volvió su vista hacia Park sus ojos se agrandaron de una manera tal que hasta Chaeyoung se ruborizó ante la acción.

Y es que no era para menos, el atuendo de la anfitriona de la fiesta era más que espectacular, y le hacían resaltar de una manera única. Opacando a los demás con aquellos pliegues que se ceñían perfectamente a su cuerpo.

Como si fuera de la realeza.

Su belleza simplemente era para quedarse sin palabras.

—Jisoo.—Le llamó nuevamente rascándose la nuca ante el su mirada tan atenta, en un vano intento de desviar un poco la atención de ella.—¿Te parece si nos vamos con los demás?

—Por supuesto, princesa.—Contestó Kim tras salir de su ensoñación haciendo que la de cabellos rojizos bajará su mirada, apenada del nuevo apodo de su amiga.

Últimamente, estos le avergonzaban mucho más que de costumbre.

La pelinegra buscó la mano ajena decidida y sonrió ladinamente.—Déjeme escoltarle, princesa Park.

El tono grave en que lo dijo causó una risita tímida en la pelirroja asintiendo con lentitud ante la sugerencia de la otra, siendo guiada sin objeción por el camino hacia la cocina. 

Al llegar con sus amigas, escucharon a los demás vociferar al unísono un 'Felicitaciones' y todos los presentes se abrazaran con esmero.

La mayor de las Kim abrazó a la pelirroja con fuerza mientras una gran sonrisa juguetona en su rostro.

—Felicidades, princesa.—Susurró en su oído para después separarse rápidamente para ver la reacción en su menor.

Sonrió con suficiencia al ver un tenue sonrojo en la otra e inmediatamente una calidez invadió su pecho, al pensar en sólo una cosa:

Ella era la única que podía hacer sonrojar de aquella manera.

Kim Jisoo era la única que causaba tales emociones en Park Chaeyoung.

Un año nuevo comenzaba por fin.

Y quizá...

Nuevos sentimientos comenzaban a surgir.

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¡Feliz 2019!❤