Capitulo 5

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El día domingo se me pasó volando y por fin llego mi primer día de instituto. Que mentir, estoy un poco asustada. No soy de tener muchos amigo y bueno, no soy muy llamativa por lo que me preocupa pasar invisible.

Me levanto de la cama de un salto. Camino semi bailando al baño y me encierro. Mientras me baño canto bajito titanium de David Guetta. Una vez termino, salgo de la ducha y, tras secarme, me dirijo de vuelta a la habitación.

Me lio un rato tratando de decidir que ponerme hasta que me decido por unos jeans ajustados, un suéter que me queda gigante pero bueno, es tan lindo, gris y con muchos lobos. Y finalmente me calzo unas botas hugg cafés. Sencilla y cómoda.

Dejo mi cabello suelto y me aplico un poco de rímel y una fina capa de delineador. Cuando creo estar lista, bajo a desayunar.

- Buenos días-saludo a Rebekah, quien toma una taza de café.

- Buenos días-me da una pequeña sonrisa. "Raro, pensé que me odiaba"

Me paseo por la cocina y me preparo unas tostadas con mermelada y un vaso de leche. Mientras estoy sentada disfrutando de mi desayuno aparecen por la puerta los tres Mikaelson faltantes. Los dos mayores se dirigen a la nevera a por unas bolsas de sangre. Mientras, Kol roba una de mis tostadas.

- ¡Oye!- espeto enojada. Kol ríe y me da la espalda.

- _______- me llama Klaus- irás con Rebekah, pero en el instituto no debes hablarle y debes fingir no conocerla.

- Entendido-asiento.

Al terminar de desayunar, subo corriendo las escaleras a lavarme los dientes. Tomo mi bolso y vuelvo a bajar.

- Suerte hoy- dice Elijah con una pequeña sonrisa que correspondo.

- Si, trata de no matar a nadie- ríe Kol. Le dedico una mirada asesina y sin perder más tiempo, subo al auto de Rebekah.

Durante el viaje ninguna articula alguna palabra. Rebekah porque no tiene el mínimo interés y yo, porque voy demasiado sumida en mis pensamientos. Rebekah aparca unas cuadras antes de llegar.

- Aquí te bajas, no podemos llegar juntas- dice con indiferencia.

Me bajo del auto sin chistar- al termino nos juntamos aquí, y si no llego llama a Elijah- asiento. Rebekah echa a andar el auto y sigue de largo.

Apuro el paso para poder llegar a tiempo. A lo lejos vislumbro un gran edificio rojo rodeado de adolecentes saludándose entre sí. Me abro camino entre ellos y entro al edificio en dirección a la secretaría. Una vez allí, hablo con la amable secretaria quien me entrega mi horario.

Reviso que me toca primero."Historia, genial" pienso sarcásticamente.

Me cuesta un poco ubicar el aula. Entro en ella esperando que el profesor no haya llegado y por suerte no es así. Me acomodo en un pupitre vacío bajo las miradas curiosas de algunos. Me incomodan, la verdad me da un poco de miedo que vayan hablando por ahí de mi. Es algo tonto, debería darme igual, pero no puedo evitarlo.

Entra el profesor, calculo que debe tener treinta y algo, aunque se ve cansado y algo descuidado.

- Bien clase, espero que estén listos para una entretenida lección sobre la cultura egipcia- todos bufan y abuchean al profesor- bien tomen apuntes.

- ¡Profesor Saltzman!- habla una vocecita chillona- usted siempre habla sobre la hospitalidad hacia los estudiantes nuevos ¿no?-todos dirigen su mirada hacia mí. Hay no. Miro a la chica que me da una sonrisa casi forzada. Per.ra.

Expect the unexpected (Los Mikaelson y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora