Expect the unexpected (Los Mikaelson y tu)

Capitulo 21

La sonrisa burlona incrustada en la cara de Damon me da nauseas. ¿Qué no habia borrado su memoria ya? Mierda. Mierda. Y más mierda. El hechizo debió fallar.

Desde la espalda de Kol puedo visualizar que el vampiro no está solo, viene acompañado por Elena y Stefan. La castaña me mira visiblemente enrabiada, mientras que su novio se mantiene inespresivo.

Empiezo a sentirme como un corderito asustado. Se que está mal, porque tal como me enseñaron Klaus y Elijah debo mantener mi cabeza en alto y decir " Soy ______, la bruja más poderosa del mundo, y vengo a patearte el trasero". O quizas no tan así. Bah, da igual.

Un sonido gutural se escapa del pecho de Kol, haciendome sobresaltar.

- ¿Qué pasa Damon?¿Vienes buscando provocarme?- le reta.

- Ya quisieras- bufa el ojiazul- pero no. Vengo por la brujita- me señala.

- Me temo que eso no será posible- contesta Kol riendo un poco.

- ¿Qué pasa oiginal?¿El amor te ganó?- la cara de Kol cambia a total seriedad y yo comienzo a preguntarme si Damon estará en lo cierto- venga, lo hago más simple- sonríe- yo la mato por ti.

Abro los ojos, asustada. Vampiro desgraciado ¿Quién se cree?

- ¡Damon!- le riñe Stefan

- Si, sobre lo de hablar "civilizadamente", creo que me saltaré ese paso- sonrie de lado. No alcanzo a procesar sus palabras cuando lo tengo a mis espaldas.

Me toma por el cuello e intenta hacerme chocar contra la pared. Pero antes de lograrlo, Kol arremete contra él.

Los dos vampiros son rápidos. Se estampan contra el suelo dejando huellas visibles en el pavimeto, y probablemente si fueran humanos, se hubieran roto el cráneo. Pero como Kol es más viejo, es más veloz y fuerte, por lo tanto no duda y arroja al piso a Damon. Con un pie le sostiene el estómago, inmovilisándolo. Elena se alarma y da un paso en su dirección, pero Stefan la detiene. Su comportamiento se me hace extraño, muy extraño.

- Ah Salvatore mayor, siempre siendo una gran molestia- ironiza Kol. Damon se queja, pero Kol no suelta su agarre, es más, duplica su fuerza.

Cuando creo que es suficiente y que debemos irnos, una figura aparece de la nada y salta sobre Kol, rompiendole el cuello. Se es escapa un gritito. Eso lo tomó desprevenido a él, y a mí. Kol cae inerte a mi lado, mientras que Damon se levanta y camina hacia la figura. Resulta ser un chico alto, musculoso y castaño. Pero me llaman la atención sus ojos. Como cuando los vampiros tornan sus ojos negros, los suyos son amarillos. Al igual que...Klaus.

¡Oh mi Dios! Es un híbrido...

- Gracias Tyler, gran entrada- "Tyler" rie por lo bajo- ahora niña, ¿Qué hacer contigo?- se hace el pensativo.

- Damon...-susurra Stefan

- Bueno, Adios querida _______- Damon me arrincona en la pared- lástima que fueras tan bonita.

Damon acaricia mi mejilla, deleitándose con mi dolor.

Siento rabia, mas bien ira. Vampiro cinico, ¿Qué se cree? Es un arrogante. Ahora se le ocurre tocarme ¡Va a matarme! Bastardo, Uhggg, no se porque Elena se debate entre el y Stefan, Damon es un completo cobarde que solo debe matar para enfrentar sus miedos. Lo odio. Fui condecendiente con el, traté de no hacerle tanto daño. ¡Hasta le dejé una bolsa de sangre para cuando despertara! Yo realmente me sentía mal por él. No quería hacerle daño...no quería. Pero ahora sí. Quiero ver sangre correr. Quiero ver la sangre de Damon derramarse sobre mis manos.

Mientras toda esta nebulosa de malos pensamientos se forma en mi cabeza, algo más ocurre a mi alrededor. El viento ruje tan fuerte que se me enredan los cabellos. Objetos comienzan a levitar a mi alrededor. Y mi piel comienza a arder. Mi cuerpo comienza a arder. Damon retira su mano, alarmado.

- ¿Pero que demonios...?

Comienzo a levitar. Me siento liviana, me siento...enérgica. Tengo poder, puedo con todo. Muevo la mano hacia Damon. Lo hago subir a mi altura, y luego bajar. El vampiro se da un buen golpe. Se pone de pie nuevamente y me enseña sus colmillos.

- ¿ Eso es todo, brujita?- me intenta sacar de mis casillas. Y lo logra. El viento brama más fuerte, y Tyler, Stefan y Elena necesitan sujetarse de algo para no caer. Damon cae de rodillas al suelo, intentando cubrirse.

Lo admito, esto se está saliendo de control. No soy yo, es mi poder. No tengo las riendas de mi cuerpo. Me empiezo a deseperar. ¡Quiero que esto acabe! No soy yo, no soy yo. ¡No soy un mounstruo!

Mi rostro refleja la desesperación, que solo Stefan es capaz de notar.

- ________- dice, o más bien, grita- no dejes que te controle.

Miro al vampiro con los ojos lloroso. Pero luego recuerdo porqué estoy en aquella situación. Damon. Damon me trajo aquí. Debo matar a Damon. Ahora.

Piso tierra con paso firme. Con mi instinto asesino me acerco a Damon.No pienso, solo deseo actuar. Elena intenta acercarse, sin embargo, la encierro en un circulo de fuego. Maldice patalea y hace un berrinche, no la escucho. Stefan también intenta decirme algo, que tampoco oigo. Damon está en el suelo, semi conciente. Le he dado algunos golpes, que, aun para ser vampiro lo han dejado en este estado.

Parto una tabla de madera y tengo una perfecta estaca. La acomodo entre mis manos, frente al pecho de Damon. Aun puedo escuchar los gritos y las súplicas de Elena y compañía, mas mi instinto me dice que continue.

- Adios querido Damon-digo-lastima que eras tan guapo.

Mis manos suben para tomar impulso y clavar la estaca, pero esto nunca llega a succeder. En un descuido mío, el viento deja de ser tan brutal, y unas figuras se acercan a mi.

Unos brazos se enredan en mi cintura, y sinto una respiración en mi oido- Creo que no es conveniente de que mates a nadie, amor.

La voz de Klaus en mi oido suaviza un poco las cosas. Pero vuelvo a recordar que estaba en una tarea importante y me remuevo como loca entre sus brazos. Estoy hecha una bestia. Rebekah y Kol, quienes están frente a mi, me miran alarmados.

Mi pequeño huracán comienza de nuevo, pero antes de que pueda pasar a mayores, Rebekah aparece junto a mi.

- Lo siento, _______- y me clava un sedante. Me desvanesco en los brazos de Klaus, justo como la primera vez.