Entre gatos y conversaciones.

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~¡Hola, hola! 

He aquí el siguiente capítlo que espero sea de su agrado.

Enjoy!~

Link permaneció en su mismo lugar aún después de que Rei entró, no le importó que poco después llegara un guardia a observarlo desde lejos. Tenía miedo de que Grahim le hiciera algo, aún no estaba completamente seguro del porque se había arrepentido de hacerle algo antes así que prefería permanecer alejado.

Clavó la mirada en el agua que se removía de vez en cuando con alguna corriente de aire que se colaba, le recordó a su pueblo, su vida anterior que, ahora, parecía tan lejana e inalcanzable — ¿Cómo estás, Zelda? — lanzó la pregunta al aire, ella era alguien muy importante para él, lo había apoyado desde que eran niños de 5 años, la consideraba la familia que nunca tuvo.

Permaneció sumido en sus pensamientos hasta que sintió al guardia que lo había estado observando, hincarse frente a él — ¡Oye! ¿Qué demonios estás haciendo? — El hombre había tomado sus pies y empezaba a colocar un tipo de esposas de uso médico puesto que no eran metálicas, eran como las usadas en un hospital psiquiátrico para retener a los pacientes sujetos a la cama. Link intentó apartarse pero el hombre agarraba fuertemente sus piernas, otro guardia apareció y sujetó sus hombros.

—Son órdenes de Lord Grahim — Contestó con simpleza mientras aseguraba cada una alrededor de sus tobillos con un pequeño candado, haciéndole imposible quitárselo por el mismo.

Link maldijo internamente, ese loco seguía considerándolo suyo y que debía estar ahí forzosamente. Una corta cadena fue asegurada para unir ambas esposas y quien sujetaba sus hombros lo soltó — Tenemos órdenes de llevarlo adentro — Lo tomó del brazo derecho y le dio un ligero jalón.

—Puedo caminar por mí mismo — Murmuró con enojo mientras se ponía de pie, dio un paso, tomándose el tiempo necesario para asegurar que no caería al suelo, la cadena a penas y era suficiente para dar pasos normales, impidiendo totalmente alguna posibilidad de correr. Los guardias le siguieron de cerca, listos para actuar en cualquier momento.

«Como si tuviera alguna oportunidad de hacer algo» Pensó mientras seguía su lento pero seguro paso. Cuando arribaron a la casa, Grahim estaba sentado de espaldas a la puerta con un bonche de papeles a su lado sobre una pequeña mesa.

—Lord Grahim, estamos aquí — Los tres caminaron hasta quedar a su lado, Link desvió la mirada de él y buscó por la habitación a Vaati o Rei, sin embargo, no estaban por ningún lado. Grahim estiró la mano y uno de los guardias estiró un juego de llaves y se las entregó, haciendo una leve reverencia.

—Pueden irse — Grahim hizo un leve movimiento con la mano para después volverse a hacia Link — Espero no te resulte demasiado molesto esta medida, Link — Comenzó, su voz había perdido ese toque iracundo de antes.

— ¿No molestarme? ¿A caso es burla? — Link se cruzó de brazos lo mejor que pudo.

—Por supuesto que no, Sky Child, recuerda que lo que hago es para que estés bien — Grahim sonrió.

—Claro, lo que digas.

Link no entendía como tenía siquiera el valor de hablar de esa manera a la persona que le había hecho eso, simplemente le nacía hablarle de aquella forma, entre una mezcla de confianza y coraje acumulado. Grahim sonrió al escucharlo, también encontraba la manera en que le hablaba, curiosa y entretenida.

Fueron las únicas palabras que intercambiaron, después fueron a comer y más tarde, a dormir. Grahim quitó la cadena y salió de la habitación, a Link le pareció bastante extraño pero supuso que tenía que ver con lo que había ocurrido más temprano.

Vueltas del destino [Ghiralink]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora