• You Save Me • [ Kim Taehyung ]

• Capítulo 11 •

Me levante asustada por el gran golpe que había recibido en mi espalda, cuando recobré el sentido de que no había dormido sola intente cerrar los ojos para volver a dormir, pero algo me lo impidió, una respiración muy agitada, me preocupe un poco así que me senté y me acerqué a Tae para ver si estaba bien; aunque estaba a oscuro pude ver como las gotas de sudor en su rostro brillaban en la noche.

¿Estaba teniendo una pesadilla? ¿Se habrá enfermado? Me pregunté antes de hacer cualquier otra cosa, luego de unos segundos me acerqué para tocar su frente y en efecto no esta con fiebre pero si estaba bastante helado. Me di la vuelta para tomar mi celular y encender su luz para alumbrar la cara de Tae, estaba todo sudado y sus labios temblaban ligeramente, me acerqué un poco más y me percaté que no todo era sudor, también habían lágrimas.
Definitivamente estaba teniendo una pesadilla, dude entre despertarlo o no, pero se lo que se siente tener una pesadilla así que comencé a moverlo y a llamar su nombre, no funcionaba y me comenzaba a asustar porque cada vez lo hacía mas fuerte y el no despertaba.

Me levante rápido y corrí a encender la luz, seguía llamando cada vez más fuerte, cuando por fin se despertó soltó un gran grito y me dio un empujón, me asusté por su reacción pero me volví a acercar; se había puesto en posición fetal en la esquina de mi cama y murmuraba cosas en coreano que yo no entendía, debo de admitir que me dio miedo y que si no supiera por lo que había pasado pensaría que se le había metido algo.

— Tae, soy yo Kala.— tocaba sus brazos para que reaccionara y él apartaba mis manos inmediatamente. Cuando menos me di cuenta yo también estaba llorando, no sabía que hacer y no me gustaba verlo así. —¡Taehyung reacciona! Todo esta bien, todo ya paso, soy Kala, no te haré daño, aquí estás a salvo.—mis lagrimas seguían cayendo.—Mírame, soy yo, tu amiga, estas en mi casa, ambos estamos a salvo.

Me acerqué un poco más y acaricié su cabeza, esta vez no me aparto. Me quede así hasta un par de minutos, su respiración se había tranquilizado un poco; sentí como su cabeza se iba levantando de poco en poco y cuando sus ojos me vieron soltó un gran suspiro y se tiro abrazarme, casi que me iba para atrás después del gran peso con el que se me tiró, pero luego pude corresponderle al abrazo y darle pequeñas palmadas en la espalda para tranquilizarlo.

— Perdóname Kala, yo.. yo no quería.

— Shhh... está todo bien.

— Tenía mucho miedo.—lloró en mi espalda— No escuchaba nada, sentía que en cualquier momento vendrían de nuevo por mi, que me tirarían agua fría.

— Eso ya pasó, ya nunca volverá a pasar, pronto estarás muy muy lejos de aquí y de todos esos recuerdos.

Minutos después ambos pudimos volver a dormir; para cuando sonó la alarma eran las 5am, la apagué rápidamente para no despertar a Tae, me levanté, me fui a bañar y a despertar a los niños porque tenía que llevarlos a la escuela.
Luego de bañar y cambiar a los niños los puse a ver la tv mientras hacia el desayuno, tenía que admitir que me cargaba un sueñooo, después de lo qué pasó no pude dormir bien y había pasado tan sólo hace dos horas.

Para cuando llame a los niños a comer venían acompañados de la mano por Tae, cuando me vio me sonrió apenado a lo que yo le respondí con una sonrisa y le señalé para que se sentara a comer también.

En medio de la comida recibí la llamada de recepción, donde me avisaron que habían unas personas abajo y que yo tenía qué autorizarles la entrada; así que nos apresuramos a comer para bajar ya que supuse que esas personas eran las que se le asignarían a Tae para su seguridad. Y no me equivocaba, cuando bajamos habían cinco hombres en recepción, todos asiáticos y con cara de "si te me acercas, te mato"

Yo me fui directamente a hablar con el gerente del edificio mientras que mi nuevo amigo se fue con los cara de culo que me veían mal a mi y a mis sobrinos.
Todo estuvo bien, no hubo ningún problema, pero si los habrían más adelante, lo presentía. De los cinco hombres, dos se quedaron en el edificio, uno en el lobby y otro en el piso de mi apartamento; el tercer hombre sería mi nuevo "chofer temporal" pues no podían arriesgar la vida de Tae en manos de "una desconocida", ajá si, y los otros dos iban en una camioneta negra, para nada discreta, detrás de mi carro; debía de admitir que eso me estresaba, pero sólo lo iba a aguantar por un par de días más y luego volvería a mi insegura vida de siempre.

Durante todo el camino hacia la escuela, los niños fueron callados por nuestro nuevo acompañante, aunque debía de admitir, que por menos el nuevo "chofer" no era tan amargado, era joven y me iba haciendo preguntas de "rutina" en el camino, pero no lo decía de formal hostil, así que él me comenzaba a agradar.

— Luego de que el Sr. Kim Taehyung aborde el avión, le agradecería que nos acompañara para dar una declaración oficial de todo lo paso desde el primer momento hasta el último en que estuvo con el.— dijo el ahora llamado "Ji Hyung" fijo en la carretera.

— Si, esta bien, no hay problema.— respondí tranquila.

Después de dejar a los niños en la escuela, Taehyung quien iba de copiloto se pasó a los asientos de atrás junto a mi, Ji Hyung no dijo nada solo siguió conduciendo sin destino.

— ¡Mira!— me dijo Tae enseñándome en nuevo celular que le habían entregado y en el que había pasado clavado en el camino. — Es mi familia.— sonrió enseñándome una foto de ellos.

— Que bonita es tu familia.— le sonreí. — Te pareces muchos a tus padres.

— Lo sé, los extraño mucho.— dijo con voz triste.

— Pero estás a nada de volver a estar con ellos, y nunca más se volverán a separar, te lo aseguro.— di unos leves toques a su mano para confortarlo.

— Gracias Kala...ummm, sobre lo de anoche.— dijo nervioso y pude sentir la mirada del conductor por el espejo retrovisor.

— No te preocupes por eso, cuando lleguemos al apartamento lo hablamos con calma.

— Esta bien.— sonrió débilmente.

No creía correcto hablar de lo que le había pasado frente a Ji Hyung, creo que era algo muy delicado y poniéndome en el lugar de Tae, a mi no me gustaría que las personas supieran si me pasara algo así.

— ¿Y a donde quieres ir?— le pregunté.

Pero antes de que el me respondiera Ji Hyung me interrumpió.

— Lamentó interrumpirla señorita, pero necesitamos llevar al Sr.  Kim Taehyung a la embajada para que le sea dado y tramitado el pasaporte.

— Ahhh está bien, no hay problema entonces.— dije tranquila.

— Luego de salir de ahí quedan libres.

— ¿Podemos ir a comer hamburguesa después?— pregunto Taehyung.

— Si señor, solo me indican el lugar al que quieren que los lleve.— respondió amablemente.

— Yo me encargo de eso.— sonreí

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FELICES FIESTAS ❤️