Someday. SAGA L.R 2

Prólogo

En la recepción de la firma de Olivia todo está impecable. Camino nerviosa por el pasillo para encontrarme a un hombre bastante tatuado que coquetea con la recepcionista.

Él cree que soy alguna especie de fan y la verdad no se a que se refiere, ¿será famoso? Y si lo es, no lo reconozco. Que pena por él.

- Bella - Olivia me sonríe desde su oficina y aparta su rojo cabello de su rostro. Sigue siendo igual de hermosa. Se que tiene un hijo y que está comprometida, las redes sociales me ayudan a saber algo de ella.

- Ayer y nadie puede saberlo - respondo a su pregunta de cuando llegué. Del aeropuerto vine directo hacia acá. Necesito resolver esto lo más rápido posible.

El chico tatuado me llama modelo y eso me molesta. No soy ni quiero serlo y el que él me llame de esa manera me enfurece.

- No soy modelo inconsciente - me río tratando de disimular mi enojo

- ¿inconsciente? - me pregunta

- Sí, sabes lo feo que te verás cuando estes viejo y arrugado y tengas todos esos tatuajes - muevo los dedos en el aire señalando sus brazos tatuados

- Diablos, creo que me enamoré - silva encantado

- Y yo creo que me aburrí - sonrío molestándolo. Olivia parece divertida

Dentro de la oficina le cuento a Olivia que me trae de regreso de Alemania. No por nada viajé tantas horas. Hace unas semanas papá me llamó a decirme que heredaría un porcentaje de la empresa y todo estaba bien. Hasta que mi esposo se enteró.

Soy joven y estoy a punto de cumplir 22 años. Cometí un error a los 16. Me casé con un idiota que al final termino siendo mi peor pesadilla.

No se como se enteró, pero desde que lo hizo no ha dejado de enviarme mensajes amenazándome. Quiere un porcentaje de la empresa y Hans, puede ser bastante insistente.

Olivia está sorprendida y no es para menos. Nadie sabe sobre mi matrimonio, solo mamá, que cuando lo supo pareció no importarle mucho. Cuando me fui de la casa no dijo nada y cuando regresé al separarme tampoco.

No sabía que ella y su hermana Claire habían recibido el mismo porcentaje cuando cumplieron 22, tampoco sabía que mi hermano lo había hecho y es que desde que me fui hace seis años con mamá, Liam y yo no hablamos mucho, solo pensé que papá lo había puesto a trabajar con él.

- Solo te pido algo - suspiro y muerdo mi labio inferior

- Que tu padre ni el mío se enteren - termina por mi y parece que me hubiera leído la mente

***

Cuando salgo el chico insiste en que le de mi número y me niego, así como me niego a llevarlo a dónde fuera que vaya y es así como no lo vuelvo a ver.

Olivia muy embarazada me ayuda a librarme de Hans. Desde Los Angeles me divorcia, se contacta con alguien en Alemania que la ayuda con todo lo que necesite acá ya que ella no puede viajar.

Todo parece sencillo y papá no se entera de lo sucedido ni mucho menos de mi viaje, pero a Hans eso no le gusta y los mensajes que me envían me hacen recordar el pasado que tanto me costó olvidar.

Sabes que no te puedes librar de mi tan fácil, se cosas y no me da miedo hablar.
Con cariño tu amado esposo.

Aquí estamos con un nuevo libro. Del lindo y boca sucia Becker. Bella apareció en el libro de Hunter y Liv por un breve momento y aquí podrán conocerla mucho más, espero que les guste y que se enganchen.