CAPITULO 5

755 44 0
                                    

Narra Miriam

- ¡Joder! Me e quedado dormida- me dije a mi misma.

Iba a llegar tarde a donde había quedado con Ana por haberme quedado dormida. Si es que la suerte que tengo yo no la tiene nadie. Me preparé lo más rápido posible y salí practicante corriendo de casa para no hacerla esperar mucho. Qué estaba nerviosa era poco decir, pero lo tendría que disimular un poco. Cuando llegue, como no podría ser de otra forma, ella ya estaba allí y que, por cierto, iba bastante guapa. Cuando me vio llegar se acercó a mí.

- No pierdes las costumbre ee jajajaj- me dijo nada más ponerse al lado mío.

- Hola Miriam, ¿qué tal estás? Hola Ana, pues un poco ahogada para no llegar muy tarde y no hacerte esperar mucho, ya que me e quedado dormida. No pasa anda Miriam, ahora respira que te ahogada jajaja...- dije lo más irónica posible.

- Vale vale, lo pillo. ¿Mejor?

- Si, idiota.

- Ei, no me insultes.

- Por reírte de mí te jodes.

- Dios que humitos jajaja. Oye, cambiando de tema, te quería dar las gracias por lo de anoche.

- No tienes por qué darlas. Para eso estamos las amigas.

Uf, que daño me hizo decir eso de amigas.

- Ya, bueno... También te quería pedir perdón por no escucharte en clase cuando te peleastes con Mimi. Se supone que soy tu amiga y no te hice caso, no sé porque actúe así. Me merecía que me hablases así.

- Bueno eso da igual ahora. Tranquila que el pasado, pasado esta.

La di un abrazo. Si, porque no lo podía evitar y encima que se disculpara por eso me alegro bastante. Seguimos hablando un rato más y justo apareció la persona que menos me gusta ver en esta vida, Mimi. Hice el amago de irnos para otro lado, pero ya era tarde para eso y nos cruzamos.

- ¿Ya estás contenta Miriam? Ya tienes a Ana para ti- me dijo con rabia.

- Yo no tengo a Ana para mí. Primero, Ana no es un objeto y segundo, solo somos amigas- le contesté con la misma rabia.

- La leona saca sus garras e. Parece que tengo razón.

- No te entra en la cabeza que tengo novio ¿o que?

- Ya, claro. Novio. A ver cuanto te dura.

- Miriam, vámonos. No merece la pena seguir aquí- me dijo Ana porque yo ya estaba encarando a Mimi.

Le hice caso a Ana y nos fuimos de allí. No voy a negar que no estuve pensando en lo que había dicho Mimi de a ver cuanto duraba con Roi. Normalmente con Mimi siempre pasaba lo mismo, ella intentaba provocarme y tal, y aunque esta vez hizo lo mismo, lo de mi relación lo dijo de otro modo. Parecía que me estaba advirtiendo de algo. Era como si me estuviera avisando de algo, pero no sé de qué.

- Miriam, ¡para!- me dije a mi misma.

Como te va a estelar avisando Mimi de algo si os lleváis fatal. No seas idiota y no la creas. Ella siempre está provocandote, no te va a decir nada enserio. Deja de pensar sobre ello.

Al final decidí hablarlo con Ana.

- ¿Qué habrá querido decir con eso?- le pregunté.

- ¿Con qué?

- Con lo de Roi.

- No le hagas caso. Lo habrá dicho para provocarte.

- Ya, lo sé. Pero eso no lo a dicho como siempre. Lo a dicho como cuando éramos amigas. Era como una advertencia. ¿No lo has notado?

- La verdad es que no. A mí me a parecido como siempre.

- Es que cuando Mimi y yo éramos amigas, cada vez que una veía algo que a la otra le podía hacer daño, lo decimos de esa forma. Pero no estoy segura porque de eso a pasado ya mucho tiempo.

- Deja de pensar en ello. Lo más probable es que estés equivocada y lo haya hecho para provocarte como siempre. Hay como un 99% de probabilidades de que sea mentira jajajaj.

- Ellaa que le gustan las mates jajajahaj.

- Idiota.

- Ahora eres tú la que me insulta ajjaja.

- Ya vale Miriam jajajajaja.

Seguimos la tarde con más risas y la verdad es que había ido mejor de lo que yo esperaba, pese al encontronazo con Mimi. Ya era de noche y decidí acompañar a Ana hasta su casa para que no fuera sola. Cuando llegamos nos despedimos con dos besos y un abrazo y me fui a mi casa. Hacía tiempo que no me lo pasaba tan bien con alguien y no podía seguir negando lo que me pasaba con ella.

Narra Ana

Pues al final sí había sido buena idea haber quedado con Miriam para dar una vuelta por allí.

Después del encontronazo que tuvo con Mimi, Miriam estaba un poco rara y como no sabía cómo aniamarla, intenté hacerla reír una poco y parece ser que funcionó porque estuvimos todo lo que quedaba de tarde riéndonos.

Me acompañó a casa y no se lo puedo agradecer más, era una muy buena amiga y perdona, y yo ya no podía negar más lo que sentía por ella.

Mientras estaba tirada en la cama recibí un mensaje de ella.

(WhatsApp)

- Buenas noches idiota❤️

- Buenas noches a ti también leona😘. A sido una tarde estupenda.

- Lo mismo digo. Que descanses bien.

Cerré el móvil y no podía estar más contenta por estar así con ella. Esta chica una día me va a matar de amor. Si es que es increíble.

De repente se me vino a la mente la conversación que tuve con ella sobre lo que había pasado con Mimi. Ella me decía que lo había dicho de otra forma como cuando eran amigas, pero yo no había notado nada. Se quedó la mitad de la tarde pensando en esa conversación y yo ya no sabía como hacer para que dejara de pensar en ello, pero al final lo conseguí. La verdad es que ahora me doy cuenta de la rivalidad que había entre las dos, pero no tengo ni idea de porque dejaron de ser amigas para ser prácticamente enemigas. Por lo que sabía se conocen desde pequeñas y siempre eran inseparables. Algún día se lo preguntaré.

-----------------------------------------------------------

Bueno pues aquí tenéis el segundo capítulo por haber tardado tanto en actualizar.

Espero que os esté gustando cómo va la novela y que sigáis leyendo la y votando como hasta ahora.

¿Creéis que las sospechas de Miriam sobre lo que le había dicho Mimi sean verdad? ¿Por fin algunas de las dos darán el siguiente paso después de dejar de negar lo evidente?

Seguir leyendo para saber cómo acaba. Puede acabar bien o mal, pero eso ya lo veréis ajjaaj.

Muchísimas gracias por leerme y por votar.❤️

Negación~wariamDonde viven las historias. Descúbrelo ahora