Healed Heart

Hearts 17:

¡Hola a todos!

Sinceramente desearía haber logrado terminar el ginmutsu, pero no alcance de terminarlo antes de mi viaje así que pido disculpa a lo que lo esperan.

Pero quería dejar la ultima actualización del año de este fic x'3
Así que sin decir nada mas espero que lo disfruten.

Los derechos de Gintama le pertenece al gorila Sorachi que regreso de forma épica. 

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Hearts 17:

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— M-me gusta mucho Okita-senpai... Así que por favor... ¡Permíteme ser su novia!

Sougo miraba sin emoción alguna a esa chica de cabello rubio ondulado hasta el hombro. Como apretaba la falda del uniforme por el nerviosismo del momento, a tal punto como para agachar la mirada a pesar que el sonrojo se notaba en su rostro.

¿Para esto había venido antes de ir con su rival a comer? ¿Por qué creería que aceptaría tal petición solo por qué ella decía que le gustaba? Para el castaño era solo una extraña que no podía confiar y que no le interesaba. Ni ella, ni sus sentimientos por él.

— Me niego. - aquellas palabras fueron tan fáciles de decir para el castaño.

Se fue sin ver cómo la chica lo miraba con total tristeza, ni siquiera escuchar esas preguntas que hacían cuando eran rechazadas. Se sentía también extraño por volver a esas escenas de confesiones por partes de las chicas, recordando cómo antes de salir con su ex-novia era una costumbre escuchar alguna chica confesarse una vez a la semana; como también su querida hermana a veces lo regañaba al enterarse que había sido cruel o se divertía por la formar peculiar de declararse que tenían algunas.

Un nudo crecí en su garganta al recordar esos tiempos de felicidad que no volverían jamás.

— No sabías que fueras popular - aquellas palabras hicieron que detuviera sus pensamientos y su caminata. Haciendo que mirara hacia atrás, encontrándose con la bermellón que estaba de perfil apoyada en el muro; aferrándose al obento que siempre llevaba y haciendo que la punta del pie derecho pisara levemente y continuamente el piso —. Aunque fuiste bastante cruel con tu trato hacia esa chica.

— ¿Por qué estás aquí? - Sougo no esperaba encontrarla en parte de la escuela, ni que viera como rechazaba a esa chica en la azotea — ¿Acaso me extrañaba? - provocó a su rival con tal de tener en esos momentos una pelea.

Necesitaba distraerse con algo para enterrar aquellos recuerdos dolorosos en lo más profundo de su ser.

— ¿Quién te extrañaría, maldito bastardo? - ¿Acaso era un sonrojo lo que veía en la cara de esa extraña compañera? Debe ser una broma y un mal juego de su mente — S-solo que me extrañaba no verte comer en el mismo lugar de siempre, y debo cumplir con mi promesa de joderte con mi hermosa presencia. – Solo cuando vio ese malestar en sus ojos por sus palabras su mente se alivió.

— ajá, claro – Sougo por dentro debía admitir que era divertido meterse con la bermellón de ojos azulados.

— ¿Por qué no aceptaste? Es bastante bonita - si verla ahí y el supuesto sonrojo lo había sorprendido, ahora estaba atónito por el tono áspero que había usado la bermellón para hacer esa inesperada pregunta.

— ¿Por qué lo quieres saber? ¿Acaso estás celosa? - ¿Por qué había dicho tal cosa? Se quería reír a tal posibilidad, pero el ver como ella se tensaba impedía que hiciera tal cosa. ¿Acaso era cierto? No podía ser, ella no lo conocía ni confiaba en él. Era solo una compañera más que tuvo la suerte de ser su rival, nada más.

Él se iba a ser cargo que así fuera.

— ¿De qué mierdas hablas? – aquella mirada de furia por parte de la bermellón hizo que su ser se calmara, que pensará que aquellos pensamientos de hace unos minutos fuera estúpido — ¿Acaso quieres que te vuelva a golpear imbécil?

Sougo no dudó en esquivar los ataques, al mismo tiempo en que se replanteaba aquellos pensamientos y concluyera una vez más cual estúpido eran. Haciendo que sonriera en medio del combate.

Sin darse cuenta cual verdad había en sus deducciones.

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El comportamiento del sádico tiene un porque que se vera mas tarde.