Mi mas grande y bello error

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Tengo la mala noticia de decir que JiMin era un idiota, y el mismo se lo decía, pues había ignorado lo que vio y siguió con Jungkook.

Toda esta dramática historia se la había contado a su querido amigo Hobi. Hobi le dijo tantas veces que dejará de una vez a Jungkook lo cual nunca pasó y mucho menos hizo caso.

El mayor lo trataba como siempre, y en verdad lo quería, pero YoonGi le había dado duro en el corazón y seguía atrapado con él. Su comportamiento con JiMin siguió igual, y se dio cuenta que el menor estaba muy enamorado de él, y tal vez estaba mal, pero vería hasta donde llegaba su amor por el.

Dejaba su teléfono sin contraseña para que JiMin viera los mensajes con YoonGi, y es que aún se veía con el y tenía más intimidad con su vecino, cuándo regresaba JiMin sollozaba y al preguntarle, decía que no tenía nada.

Se había apoderado de los sentimientos de JiMin.

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Otro mes que JiMin lloraba con Hobi en su casa, había visitado a su abuela más seguido cuando supo andar en la vía pública.

—¡Es que ya déjalo! —grito Hobi desesperado porque su amigo no entendía— ni siquiera es tu novio, no son nada oficial, solo te lástima.

—Ayer —sollozo el pequeño pelinegro— vi en su teléfono fotos donde tenía intimidad con YoonGi.

—¡Eres un maldito masoquista! Todavía que hace eso no lo dejas.

—Tu mismo me lo has dicho, no somos nada oficial, no tengo el derecho de reclamar algo ...

—Perdona que te lo diga amigo, pero eres un imbécil.

JiMin seguía llorando porque esas fotos eran muy explícitas.

Hobi le aconsejaba demasiado y el nunca entendía, y es que no era de entender, si no que Jungkook era el amor de su vida, realmente lo amaba, no quería dejarlo ir tan fácil.

Al llegar a casa Jungkook lo esperaba, no tenía ganas de nada, lo iba mandar al diablo cuando el mayor fue hasta el, lo abrazo y le dijo que se veía hermoso.

Entonces una sonrisa se formó en su rostro y lo dejo entrar.

En ese momento Jungkook pensó que si seguía así, pronto se acostaría con él.

Sonaba mal ¿No? Qué Jungkook jugará así con el menor, en realidad tenía otro concepto de el, pero no quería decepcionar a la gente que "confíaba" en él, solo un amigo le dijo que mejor se quedará con JiMin y dejará a YoonGi, porque él solo lo buscaba para un buen faje y lo lastimaba horrible, mientras que JiMin le proporcionaba amor puro y cariños todo el tiempo.

Jungkook pensaba que era el ser más lindo y hermoso que pudo conocer, era muy noble y siempre se fijaba en el, siempre quería verse bien para el mayor, porque cuando lo invitaba a salir, JiMin tardaba mucho en alistarse. Si, definitivamente JiMin, su adorable Mochi era mil veces mejor que YoonGi, pero aún quería o creía que YoonGi lo trataría mejor pronto, por eso su actitud tan fría y mediocre con el menor.

Ya, ya tenía tres mese de "relación" y Jungkook seguía igual, aunque lo quería, seguía igual, JiMin lloraba casi todo el tiempo, y su madre dejo al viejito, estando sola de nuevo, pero con la gran casa.

Loren casi no estaba en casa, y JiMin tenía pensamientos suicidas...

Si, JiMin se había convertido en un suicida, se sentía inútil e insuficiente para Jungkook, pensaba que Jungkook en realidad necesitaba a alguien mejor.

Empezó a hacer cortadas en sus brazos, y luego en sus piernas, al final en el abdomen...

Y es que eso no era todo, realmente estaba mal por todo lo de su casa, se apagó y se volvió más amargado. Usaba suéteres holgados y había bajado sus calificaciones, pasaba con la más mínima calificación que le permitía su secundaria y su amigo Baekhyun se preocupaba mucho por él, se habían hecho buenos amigos y el peligris entendió porque JiMin era tan frío, pues lo trataba muy mal su "novio". Ellos solo tenían contacto en la secundaria, luego desaparecía, pero por alguna razón, JiMin sentía felicidad estando con el, felicidad que Jungkook le arrebató sin piedad alguna.

El pelinegro estaba en la sala de su casa comiendo, con las piernas cruzadas mirando una película de terror. Estaba en pijama porque era sábado por la mañana, o mejor dicho medio día.

Todo bien hasta que escuchó el timbre de su casa sonar, no quiso abrir y se quedó ahí, pero la persona del otro lado no sé daba por vencida y seguía insistiendo. Entonces JiMin se paró con pesadez y fue hasta la puerta, al abrirla...

—JiMin, ¡chimchim! Amigo mío —el chico castaño lo miro de pies a cabeza— luces terrible.

El pelinegro se quedó en shock, no podía creer lo que veía, el chico le aplaudió en la cara y el chico en transe reaccionó, se abalanzó a él y lo abrazo fuerte.

— Taehyung, me has hecho tanta falta.

He actualizado al fin...
He decidido seguir con la historia, y ahora avanzaré todo lo que me permitan esta noche.
Pero la voy a cambiar, y la historia llegará al final pronto. Estaba pensando en poner las fotos de las personas que están detrás de esta historia, ya saben... Los de la vida real...