Ambos adolescentes se dieron un gran abrazo que duró por lo menos dos minutos.
JiMin invitó pasar a Tae y éste aceptó. Al llegar a la sala, el castaño se quejó se la poco luz que había, la casa se sentía fría y estaba muy oscuro. Le dijo al pelinegro que abriría las cortinas de las puertas que daban al jardín, con tal acción, JiMin cerró los ojos e intento que estos se acostumbraran a la luz.
—Sientate —dijo Tae sentándose en el sofá, dando palmaditas en el asiento de JiMin.
El pelinegro fue hasta él, aún no podía creer que tenía enfrente a su mejor amigo.
—¿Porque te apareces así? Tan derrepente, Tae —dijo el pelinegro. Su amigo solo lo miró con ternura.
—Dos razones —contestó —la primera, te extrañe mucho, y en cuanto supe donde vivías, vine a buscarte. La segunda...que me tiene enfermo, es mi hermano.
La mirada de JiMin oscureció, parecía que le habían dicho sobre algo doloroso que aprendes a vivir con ello. Chasqueó la lengua y se acomodó como antes, mirando la pared y con sus piernas entrelazadas.
—Yo no vengo a defender a Jungkook, chimchim. Vengo a decirte que lo dejes.
—No sabes nada de lo que me ha pasado, así que no digas nada —soltó con molestia JiMin al escucharlo.
—Te equívocas, siempre supe lo que te pasaba...
—¿Porque a mí Tae? Tu hermano me gusta desde pequeños, tú lo sabes bien —al fin JiMin lo miró de nuevo, pero ahora era tristeza lo que reflejaba en sus ojos.
—Lo sé, y te juro que yo no sabía que eras la pareja de Jungkook, hasta hace algunas semanas —hizo un pausa y bajo la vista —pero... Le haces bien ¿Sabes? Yo sé que te está lastimando, pero contigo Jungkook cambio tanto...
El Mochi no comprendía porque Tae le decía eso.
—Desde que pasó eso de mi padre, el fue un chico triste y muy solitario, se hacía daño siempre, y luego se dio cuenta que le gustaban los hombres, y también la mujeres... Pronto conoció a un chico menor que el, pero le hacía la vida imposible. Hasta hace tres meses, o cuatro, que mi hermano desaparecía y llegaba con una sonrisa —miró a JiMin, le dedicó una sonrisa forzada y le tomó de la mano— nadie sabía a quien visitaba o veía, mi madre se preocupó pero no lo suficiente, ya no le hacía caso al tal YoonGi hasta hace dos meses... El era muy feliz, y lo sigue siendo. Nadie sabía que eras tú al que visitaba —otra pausa —yo lo supe porque escuché que un amigo suyo, Namjoon, le aconsejaba no dejarte y olvidar a YoonGi, no sabía de lo que hablaban hasta que tú nombre lo pronunciaron. Yo ya sabía tú dirección, yo iba a venir a tu casa el fin de semana pasado, pero debía hablar con Jungkook...
—¿Y cuál es el motivo de tu visita ahora? —preguntó JiMin, quitando su mano de la de Tae.
—Vengo a decirte que mi hermano no te merece, el no planea dejar a YoonGi, aunque le haga daño, no lo va a dejar.
El trascurso de la tarde se la pasaron jugando, después de la plática, el pelinegro ya no quiso hablar del tema.
Dolía, dolía mucho saber que no lo quería a él, ya estaba considerando dejarlo ir... Porque si Tae, que era su hermano, le afirmó que no dejaría a YoonGi, entonces él ya no tenía nada que hacer ahí...
Cuando volvió a clases el lunes, le comentó a Baekhyun lo que su amigo le dijo.
—Tiene razón, Mochi —dijo su amigo —deberias de déjarlo, si dices que su hermano te afirmó que Jungkook no dejará al puto ese, entonces no hay necesidad de que sigas con él.
—Yo lo amo...
—Ay amigo, medio mundo sabe que lo amas de verdad, pero no vale la pena. Además no entiendo porque es así contigo, ¡eres muy guapo! Si yo fuera homosexual, estuviera detrás de ti siempre —ambos chicos rieron.
—Agradezco tú alago pero no me considero tan apuesto— sincerizo JiMin.
—¿Bromeas? Tienes un culo enorme —con sus manos hizo la forma de su trasero —todos aquí te comen con la mirada, Jungkook es un imbécil por no ver lo jodidamente atractivo que eres.
JiMin no paraba de reír, su amigo siempre era así, decía muchas groserías pero era un gran amigo, con el era muy feliz, lástima que fuera hetero, de otra forma ya hubiera visto algo en el.
Pero la verdad era que lo valoraba más como amigo, era un gran chico, por otra parte agradecía que no le gustarán los hombres.
—Amigo —hablo de nuevo Baekhyun.
—Dime.
JiMin seguía riendo.
—Love YourSelf pendejo, Love YourSelf dijo el arem.
—¿Que demonios dices? —JiMin no paraba de reír, su amigo era muy cómico.
—Ay no lo sé, lo leí en internet. Parece que así se llama la gira de un grupo.
—Estas demente —dijo el pelinegro aún riendo, pero más calmado.
—Pues este demente te dice que LOVE YOUR SELF, empieza desde hoy ¿No?
Otras carcajadas de JiMin, con el como reía, lo hacía muy feliz. Unas chicas se le quedaron viendo con una sonrisa tierna, muchos tienen sus risas escandalosas y exageradas, pero JiMin tenia una risa muy hermosa, cualquiera se deleitaba cuando el reía, por eso algunos lo querían hacer reír. Pero vieron que el único con ese privilegio era su amigo Baekhyun.
Siguieron hablando de tonterías sin sentido, hasta que el día de escuela acabó.
Fue a casa y como siempre, estaba vacío. Subió a su habitación y tomó el teléfono, le mando un mensaje a Jungkook para que fuera a su hogar.
Todos tenían razón, debía dejarlo de una vez, que se acostara con el maldito YoonGi cuanto quisiera, que los dos se jodieran.
Porque él ya tenía en mente algo mejor para él. La era de LOVE YOUR SELF 💖 empezaría en su vida.
Me extrañaron? 7u7r
Lo lamento, pero ya lo subí. Es que me enfermé y así ....
Los quiero ❤

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Mi mas grande y bello error
De TodoSon pocos los casos de en los que uno se enamora de otro desde muy pequeño, de tal manera que pueden pasar años y esa persona todavía logra acelerar tu corazón con una mirada. Es el caso de Jungkook y JiMin, el cual tuvieron que pasar por mucho para...