Capítulo 21.

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Narra Lali:

He tenido que salir del centro de operaciones porque no soportaba ese sentimiento de impotencia, creo que a la persona que era le frustraba eso de no poder intervenir en operativos. Lo creo porque no puedo estarme quieta en un lugar. Los chicos se limitan a observarme mientras que las chicas tratan de acercarse a mi pero yo no les doy bola a ninguno.

Hasta que sale Peter, por su mirada inyectada en sangre intuyo que lo que pasó no puede ser nada bueno. Me acerco a él al mismo tiempo que Nico lo hace, le dice algo al oído y el rapado se va furioso dando un portazo. Yo miro a Peter que me hace un gesto y sale a la terraza, así que lo sigo.

Va hasta la barra de bebidas que hay y sirve un vaso con Whisky, que ganas tengo de tomarme uno, seguro que me aclararia un poco las ideas. Después de sienta en el sillón que está en frente al que estoy ocupando yo. Me mira muy serio pero a la vez con cierta ternura.

Peter: tenías razón, Eugenia estaba donde dijiste. Pero no pudo salir ilesa, Kaila la torturó y tiene alguna quemadura de primer grado... La están estabilizando.

Lali: esa mina va a pagar las consecuencias de sus actos.

Peter: en eso estamos de acuerdo Lali, ahora lo importante es Euge...

Lali: ¿que podemos hacer por ella?

Peter: por ahora solo esperar, voy a seguir investigando los archivos de Kaila, tal vez encuentre algo que nos sirva para acabar con ella.

Lali: quiero ayudar, me siento una inútil.

Peter: ya ayudaste demasiado... ¿Porque no descansas?

Lali: no tengo ganas. - me levanto y lo dejo solo. - Voy a salir. - digo en alto - ¿alguien viene?

Nico: yo. - Dice saliendo de su habitación - Me siento ahogado acá adentro.

Agarro las llaves del auto y otras llaves que no sé de que son pero tienen una dirección anotada. Con Nico bajamos hasta el garaje y subimos en el auto, salimos al denso trafico de las calles Madrileñas hasta llegar a un edificio que está al lado de la clínica donde me acordé de Eugenia y de Gaston. Subimos hasta el piso donde decía en las llaves y abro la puerta indicada.

Es un pequeño departamento tipo loft, tiene una habitación con una cama enorme, un sofácama en frente de la televisión y una cocina con lo justo y necesario. Todas las paredes son blancas y los muebles negros, hay alguna que otra foto mía con Gas y con Euge.

Nico: ¿que es este lugar?

Lali: imagino que mi refugio cuando me siento ahogada... La verdad es que no lo sé. ¿Como estás?

Nico: muy confundido... No sé quién soy y la única que me da certezas... Esta internada en una clínica.

Lali: nadie mejor que yo te entiende... Me caes bien vos.

Nico: si, siento que puedo confiar en vos... Gracias por sacarme de ahí, pero ¿como te sabes las claves?

Lali: es algo que no puedo explicar... Como tantas cosas que pasan ¿no te parece? - en ese momento, siento una punzada tremenda.

Nico: ¿estás bien Lali? - me ayuda a sentarme en el sofá.

Lali: si, si... Fue un pinchazo nada más. Solo necesito relajarme.

Nico: si necesitas cualquier cosa, avísame. - Se levanta - ¿tenes hambre?

Lali: ¿hay comida?

Nico: hay fideos y manteca... ¿Algo podremos hacer con las especias no?

Lali: sorprendeme... - Le sonrio.

Vuelve a mi (2° parte de Soy tu asesina) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora