Parte 35

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De cómo Calox perdió su poder y como perdió su vida.

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PoV Negro

Estaba tirado en la cama descansando un poco mi cabeza. Ser el Rey de los demonios no es sólo ir por ahí haciéndote el fuerte y dejarte ganar por un pendejo que no llegó hasta lvl 30 porque estaba ocupado en la noche disfrutando de sus esclavas, también hay mucho papeleo y burocracias interminables. Al ser todos demonios la corrupción es moneda corriente e incluso algunos nobles se han intentado sublevar.

La puerta se abrió de golpe y Estela apareció a medio vestir.

Mi cabeza voló por lo extremadamente seductora que se veía.

No,no,no. Soy un princeso, contrólate y actúa como estúpido.

"Ponte algo de ropa antes de entrar, por favor" Dije mientras me tapaba los ojos.

¿Por qué me haces esto Dios? Pagaría lo que sea por poder decir lo opuesto.

¡Déjame agarrar esos pechos y comer esos labios carnosos!

"Es una emergencia mi señor, el Jefe ha mandado una solicitud de ayuda inmediata"

Que me llame 'mi señor' significan temas serios. Y que el Jefe precise ayuda lo es incluso más.

"Alista el Ejército, mañana a primera hora partiremos"

"Imposible. Las bajas serían enormes. Toda la capital de los elfos se destruiría"

"¿Entonces qué podemos hacer? No hay forma de defenderlo si no podemos movilizar al ejército"

Ante mi negativa, Estela paró en seco. Soltó sus pantalones a medio poner y me miró con ojos lagrimosos.

"Es cierto, no hay nada que hacer. No podemos ayudar a nuestros amigos"

Estela salió de la habitación cabizbaja y casi llorando. Se me armó un nudo en el corazón y la garganta.

Estúpido corazón justiciero que solo puede intentar hacer el bien a toda costa sin importar que resultado logre.

"Estela -me voy a arrepentir de esto-, ¿Si volaras, podrías con migo también?"

Se le iluminó la cara.

"Podría con migo, contigo y yo volando a la vez"

Preparamos a migo con su armadura y volamos tomados por Estela, completamente vestida.

Llegamos a la capital luego de unas horas de vuelo, pero parecía demasiado tarde.

Cuando Estela nos dejó en el suelo, se precipitó hacia el cadáver de un hombre tirado en el suelo.

Saco su cuchillo de su espalda y lo alzó al aire.

De la nada un hombre cayó sobre ella y las chispas hicieron que todo el lugar se iluminara.

El chico en el suelo se incorporó y golpeó al hombre en el aire.

"Veo que gente nueva e igual de poderosa se une a cada segundo a nuestra pequeña fiesta. Mi nombre es Calox Rex, sean bienvenidos a su muerte"

El hombre, presentado como Calox Rex, se inclinó ligeramente pero su cabeza se mantenía al frente.

Ja, sólo conozco a una persona que saludaba así, pero era un compañero de la Tierra, por lo que no es posible que sea él.

"Nuestro nombre es Imira, manifestación creada por Dios todopoderoso Aaron. El único muerto aquí eres tú"

Lo que parecían varias voces superpuestas salieron del chico.

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