Luego de gritar así, el poder mágico que salía de mi se concentró en una pequeña esfera que se introdujo en mi boca, obligándome a tragarla.
Un sinnúmero de imágenes, sensaciones y objetos que nunca había visto u oído, ya que acabo de nacer, inundaron mi cabeza y ésta me comenzó a doler.
Unos minutos de intenso dolor después, me desmayo.
Al despertarme, estaba en una pequeña isla en medio de un no tan amplio mar, que tenía alrededor de 2km de radio, la pequeña isla abarcaba unos 500m de diámetro y no tenía muchos árboles o elevaciones, por lo que se veía la isla de un extremo a otro, el mar tranquilo llegaba a un abrupto final al chocar con unas paredes que encerraban a la basta habitación.
El hombre de traje no estaba en los alrededores, pero había una carta escrita a mano en el suelo, junto con una guadaña y una armadura de metal completa excepto por la parte de las piernas, que fue suplantado por nada ya que tenía mis escamas.
La nota decía:
"Mientras te transportábamos a tu habitación de jefe, te desmayaste, te dejo tus instrucciones a continuación y un equipo básico para los de tu raza.
La guadaña, arma de hierro más puro, no dudes en usarla bajo el agua. Los enanos la encantaron.
Tu misión: Proteger el área de humanos, hombres bestia y cualquiera que se atreva a poner un pie en ella, ninguno de mis subordinados tiene permiso de pasar, mátalos si los ves. No discrimine. No tenga misericordia. ¡Larga vida a [Dungeon Core 490 Matews]!""¡Viva!" Contesté sólo
En ese momento me equipé con la armadura de hierro, esta era pesada, pero yo tenía un físico considerable.
Tomé la guadaña y miré la puerta de mi habitación, desde mi pequeña isla.
Al principio, los primeros veinte días, estuve expectante por un avance enemigo, pero nada sucedió.
Las comidas aparecían en la tarde y en la noche. Lo sé por mi intuición, ya que no se ve el cielo ni hay un instrumento que marque la hora.
Estas eran enviadas por el [Dungeon Core 490 Matews] y yo las comía con gusto, eran una sopa de papas y pan, a veces, cada siete días, llegaba carne.
Como no había nada que proteger, intenté hablar con el Dungeon Core, -mientras no hable con él será "490" para abreviar-, este accedió a mi entrevista y una súcubo me dirigió hacia la sala del trono.
"Dime, Naga, ¿Qué problemas le traen aquí hoy? ¿Alguien ha entrado en su habitación?"
"No, mi señor. Justamente quisiera discutir la frecuencia de entrada a mi habitación" Le dije bajando mi cabeza
"¿Tantos osan desafiante, que quieres charlar conmigo?"
"Tengo el placer y el desagrado de informarle que no, es todo lo contrario. Durante estos veinte días, he vigilado la puerta, pero ni siquiera las moscas pasan. No me considero belicista, pero no puedo servir a mi amo, si no hay con quién cumplir su orden"
"Entiendo, entonces son buenas nuevas. No te preocupes, con que vigiles es suficiente por ahora. Un nuevo héroe fue invocado por los humanos y parece que está destruyendo Dungeon cores como parte de su entrenamiento, necesito seguridad extra"
"Entiendo, entonces, ¿Puede usted escuchar mi egoísta propuesta?" Le pregunté
"Adelante"
"Quisiera madera y herramientas, suficientes para construir una casa, si no es mucha molestia. Además de los materiales necesarios para construirla como clavos, por ejemplo"
"Concedido, ¿Algo más?"
"No, mi señor, muchas gracias"
Me retiré de la sala del trono mientras me arrastraba -en realidad era como caminar, pero lo hacía con mi cuerpo de serpiente, al cual ya me acostumbré- mi velocidad era media, pero podía ir muy rápido si quería, más incluso si estaba debajo del agua.
Al llegar a mi habitación, nadé hasta mi isla, en ella, una pila enorme de maderas estaba allí. Además de un set de herramientas y una carta, explicando cómo funcionaba.
Hasta ahora dormía debajo de la sombra de los pocos árboles cerca del agua. Mientras mi cuerpo de serpiente estaba en el agua, mi cuerpo de hombre estaba a la sombra sobre la arena.
Los recuerdos en mí se asentaron y organicé mis memorias.
La construcción de la casa, tomó unos dos meses, me tomé mi tiempo.
Una carta llegó al término del primer mes, esta, venía con una pequeña bola de cristal que podía transmitir sonidos, pero no video. Utilizando esto, di mi reporte sin salir del lugar.
Con una tabla hice un pequeño cofre, donde guardé la esfera y con los restos de madera, armé un calendario rústico, en el cual marqué todos los comienzos de mes, para dar mi reporte.
Al terminar la casa, me coloqué nuevamente la armadura, que me había quitado para construir, y mi guadaña. Luego de eso, entrené diligentemente hasta la hora de la cena.
En la misma utilice la bola, ahora llamada micrófono por mí, y le pedía a [490] algo de vidrio y libros, muchos libros de cualquier tipo. Al menos 3 por semana, a lo que el accedió a cambio de que no le moleste con peticiones absurdas por el próximo año.
A la hora siguiente, una montaña de libros y paneles enormes de vidrio, así como instrumentos para cortarlos y una carta explicando su funcionamiento llegó. Comencé la remodelación inmediatamente.
Los huecos que dejé en las paredes de la casa, se transformaron en ventanas y puertas. Más madera fue transformada en estanterías, y almacené los libros en todas ellas. Construí una silla plegable y la puse a la sombra de la palmera mirando hacia la puerta de mi habitación de jefe, de la que nadie ha entrado o salido excepto yo.
Las remodelaciones tomaron otro mes, me tomé mi tiempo.
Durante los meces siguientes, cada comienzo de mes informaba, cambiaba la tablilla del calendario, comía, leía los libros, entrenaba mi cuerpo y mi magia.
Ésta la descubrí al leer uno de los primeros libros: "Teorías mágicas y su uso en la vida diaria, sistema militar, economía y la sociedad", donde describían breve y pobremente lo que es la magia, su uso diario en cosas simples como baños y cosas más complejas, como la venta de cristales, la utilización en acciones militares o la aplicación de ella para la supresión de revueltas en países con baja aceptación popular.
Así, más de 100 años pasaron, leí todos los libros, nuevos y viejos: Leyendas, cuentos de hadas, teorías mágicas, historia, matemáticas, geografía, sociología, leyes, instituciones, funcionamiento de las mismas, sistemas de gobierno, clases sociales, clases de aventureros, Grimorios, libros encantados y más.
Yo vi el paso del tiempo.
"Y aprendí una cosa o dos"
Mirando el cielo, una llamada inesperada llego desde el micrófono. Era mi señor, 490, que quería tener una entrevista de cara al futuro conmigo.
Si es lo que creo que es, demoró más de lo que esperaba, pero eso solo me benefició aún más a mí.

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Wild Elves World Conquest
FantasíaLuego de ser invocado como el defensor del Piso 50 del [Dungeon Core 490 Matews], Aaron, un Naga con recuerdos de un humano del mismo nombre, debe permanecer en espera para proteger a su amo... O no. Luego de leer todos los libros del mundo y ser co...