Los Últimos Guardianes Fénix

Por Mi Familia

Tome mis espadas al tiempo que Mika se posaba en mi hombro izquierdo mire a mi gemelo y le pregunte

--¿Listo para darle su merecido a Kuran? –dije emocionada

--Si, Aneki después de que lo ponga en su lugar no le van a quedar ganas de querer acercarse a mí –dijo firme

--Así se habla –dije sonriendo mi niño me abrazo una vez más y con un suspiró más calmado inicio el regreso a la mansión.

Íbamos muy tranquilos caminado hacia la entrada cuando escuchamos ruidos provenientes del recibidor e intercambiamos una rápida mirada y asentimos al mismo tiempo y corrimos como si no hubiera un mañana mientras nuestros Fénix volaban cerca nuestro.

Al llegar subimos las escaleras y entramos como tromba y lo que vimos no hizo hervir la sangre pues el muy bastardo de Kuran estaba peleando con Zac mientras mi madre le gritaba Chris como una posesa y Apolo la amenazaba todos los demás estaban tratando de intervenir, pero el imbécil de Fernando que sabrá Zeus a qué hora llego no se los permitía y como él no dejaba que nadie interviniera todos estaban tensos.

Nadie noto cuando entramos y eso nos sirvió de ventaja pues rápidamente Ze se fue contra Kuran y yo contra mi madre, los rostros de ambos eran todo un poema pues no se esperaban esa reacción en Ze

--Aléjate de mi hermano ahora mismo si no quieres que te rompa la cara de imbécil que tienes –dijo colérico

Yo por mi parte estaba que reventaba de la risa pues la cara de todos era de asombro total pues nunca se imaginaron que mi pequeño tuviera un carácter del infierno, Zero estaba parado con firmeza frente a Zac quien veía a Ze con orgullo el resto estaba empezando a salir de su asombro inicial y fue cuando repararon en mi presencia, pues como vi que Apolo tenía la situación de mi madre bajo control decidí recargarme en una columna a disfrutar del espectáculo. Ella reacciono como era de esperarse se fue contra mi gemelo y trato de abofetearlo, pero jamás se esperó que mi niño la amenazara con una espada que saco de Ares sabrá donde o al menos es lo que creo que pensó por la cara de susto que puso.

--Ni siquiera se te ocurra tocarme bruja porque si lo haces te vas a arrepentir –dijo con sus ojitos brillando de rabia

--Como te atreves a amenazarme –dijo furiosa –a mí que soy tu madre –Ze no se contuvo y se echó a reír con ganas dejando a mi madre desconcertada

--Tú no eres mi madre, por lo tanto, te hablo como se me da la gana –dijo mi gemelo desafiante

--No voy a tolerar tu insolencia Zero –dijo sería demasiado para mi gusto sabia por experiencia que cuando hablaba seria y con el semblante tranquilo es cuando más peligrosa es y no me equivoque pues cuando mi niño se giró y reviso a Zac de forma cautelosa ella lo ataco.

Ze no pudo reaccionar a tiempo pues Zac tenía un par de costillas rotas y como mi niño lo revisaba para ayudarlo no vio venir el golpe de mi madre, por suerte para mi niño que yo siempre estoy al pendiente de él. Mi madre intento dejar inconsciente a mi pequeño ángel, pero para horror suyo yo me interpuse y la amenacé con la espada que llevaba en la mano izquierda pues de esa manera revelaba parte de la marca de protección que Mika había puesta en mi mano dejando a mi madre muda de la impresión.