Mi Familiar Es... ¿¡Un Ser Humano!?

Lo que queda antes de terminar

(clank) (clank) (clank)

el sonido constante del choque de metal contra metal, resonaba fuertemente a la distancia, a través de la extensa llanura verdosa que formaba su alrededor

(clank)

Con un ultimo sonido de choque, las espadas se presionaron fuertemente una contra la otra, siendo empujada por cada lado que la sostenia, en busca de ser el exitoso vencedor que lograra hacer retroceder al oponente

Pequeñas chispas de color naranja, calientes por la fricción y la fuerza eximida, salían disparadas en pequeños intervalos de tiempo, mientras que el metal chirriaba con cada movimiento y temblor de las manos de cada lado

Una gota de sudor se formó en la frente de Hioto, mientras crujía sus dientes y afianzaba su agarre, cada segundo que pasaba, su capacidad por retener la fuerza de Leonardo, su maestro, disminuia considerablemente, si no fuera por su entrenamiento con la espada y su estado físico actual, seguramente ya habría cedido hace varios momentos atrás, no obstante, aun se mantenía de pie, luchando por contrarrestar la fuerza de su oponente, mientras esto sucedia, el se mantenía pensando

Maldición... él es demasiado fuerte... es como si quisiera parar el peso de muchos kilos con una simple espada...

El agarre de Hioto se aflojó un poco, entonces, con un chirrido de las espadas y algo de chispas disparándose por el aire, Leonardo movió su arma hacia adelante, empujando la de Hioto y consiguiendo, con éxito, el acercarse un poco mas al pecho del mismo, faltaba realmente muy poco para que la fuerza de Hioto cediera por completo y perdiera el combate

Diablos... no puedo...

Crujiendo aun mas sus dientes, Hioto terminó perdiendo completamente su agarre, retrocediendo y disminuyendo un poco su fuerza, y, por supuesto, esto fue suficiente para su oponente, quien, retiró rápidamente su espada y, aprovechando la abertura gracias a que Hioto había cedido, la movió agil y rápidamente para apuntarla directamente al cuello de él, diciendo tranquilamente

- Yo gano

Hioto suspiró, bajando su espada y sentándose en el suelo debido al cansancio, ya era tarde y habían estado entrenando todo el dia, por lo que estaba física y mentalmente agotado, Leonardo clavó su arma en el suelo y, sentándose frente a él, dijo, pasándole una botella con agua

- Debo decir que estoy impresionado Hioto, en tan solo una semana lograste dominar bastante bien la espada, aunque aun te falta aprender mucho, debo reconocer que tienes mucho potencial

- Jeh, gracias... todo se lo debo a que tuve un excelente maestro, ¿sabes? –respondió Hioto sonriendo

- Bueno, ese excelente maestro, quiere hacerte un examen para probar que tan bien entendiste la parte teorica y que tanto puedes aplicarlo en la practica ¿vale? Mañana, iré a la ciudad a buscar una misión en el gremio y la harás tu ¿vale?

- Me parece bien, asi pongo a prueba lo que aprendi ¿no?

- Por supuesto, ahora vamos, debemos tomar un baño y comenzar a preparar la cena

- Vale, vamos

Diciendo eso, ambos se pusieron de pie y regresaron a su pequeño "campamento" el sitio que habían establecido como su base cuando llegaron hace poco mas de 3 semanas, mientras caminaban, por la mente de Hioto comenzaron a pasar diversos recuerdos de lo que había hecho últimamente

Hace casi un mes que había venido con ese chico llamado Leonardo a entrenar en el bosque, este, le enseñó los fundamentos básicos de 3 cosas: el de la magia a mano desnuda, el de el combate cuerpo a cuerpo y el del arte de la espada; todos ellos demostrando una maestria, experiencia y habilidad que dejaron impresionado a Hioto en mas de una ocacion, en definitiva, ese chico llamado Leonardo debió pasar una gran parte de su vida entrenando estas diversas áreas