◇Ver el pasado y el futuro de los demas puede ser fascinante y asombroso.¿Pero que pasa cuando no recuerdas nada de tu pasado y no sabes que te espera en el futuro?.
◇Jun es un demonio
◇Minghao es un angel
◇Dos mundos diferentes
◇Y un amor prohibido...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
-Desde un principio supe que esto se iba a salir de control - hablo un ángel desde su asiento correspondiente, juntando sus manos en un gesto preocupado.
-Fue una pésima idea, ahora que estamos jugando con fuego vamos a resultar quemados - otro un poco gordo y con alas pequeñas dijo, recostándose en su silla al otro extremo de la larga mesa.
-Jamas debimos confiar en alguien sin experiencia - comentó un alto y delgado ángel, haciendo referencia del guardia.
Joshua levantó la vista al oír eso, estaba en medio de los ángeles del Consejo que se encontraban en una de sus "reuniones" para debatir sobre el bienestar del pueblo, solo que lo único que hacían era quejarse sobre las desiciones que ellos mismos habían tomado y trataban de he charle la culpa a Joshua - aunque la mayoría si fuesen su responsabilidad -.
-¿Estás seguro que lo tienen vigilado? - el más bajo y escurridizo de todos preguntó.
Y dijo lo que venía diciendo desde hace semanas; que estaba siendo vigilado las veinticuatro horas del día sin que pudiera salir, prisionero en su propia casa. Pero Joshua sabía que de cierta forma no era así, ya que Mingyu era demasiado despistado y en cualquier momento Minghao se le escaparía como la noche anterior. Solo lo decía para calmar los nervios del Consejo que desde la visita de los soldados del rey habían quedado asustados y temerosos.
-Pienso que es mejor que lo tengamos nosotros, así no ocurrirá ningún accidente - propuso otro miembro, todos estaban de acuerdo con eso, era la idea que desde un inicio tenían planeada pero tuvo que intervenir para que fuera puesta en marcha.
-No es necesario hacer eso, como ya dije está siendo protegido - contestó un poco fastidiado por el mismo tema.
-¿Y por quién está siendo protegido? Es obvio que tú no y nadie que conozcamos, espero que no sea nadie que tenga prohibido verlo - hizo una mueca ante esa pregunta, el ángel lo miraba con una ceja alzada junto con la mirada curiosa de los demás.
Mentirle al Consejo nunca fue de su agrado, pero esa mentira era un poco piadosa. No podía decir quién cuidaba de Minghao por muchas razones y si lo hacía ambos terminarían saliendo perjudicados, así que lo que hizo todo ese tiempo fue ocultar la verdad, solo decir que lo tenían vigilado y ya, con el tiempo se le iba a ocurrir alguna idea cuando la pregunta saliera a flote pero ya había llegado ese momento y nada se le venía a la cabeza.
-¡Ya es suficiente! - el presidente del Consejo elevó la voz haciendo que todos se callaran y bajaran la cabeza, este era el más viejo de todos, con espesa barba y piel arrugada, sus alas eran enormes pero la mayor parte del tiempo las tenía ocultas. Sentado en medio de todos, en el puesto más alto del salón se encontraba repartiendo órdenes y liderando ese reino lleno de mentiras y corrupción - No importa quién lo vigile o cuide, lo importante es que no debe salir por ninguna razón, ya el rey está apunto de soltar la bomba que en cualquier momento va a estallar, además, no creo que Joshua esté haciendo mal su trabajo, está con nosotros porque se gano este puesto entregando a quienes causaron el caos en los dos reinos.
