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Iban caminando juntos hasta la casa del castaño, sin ninguna prisa. JungKook había ofrecido acompañar a anterior con la excusa de que quería ver a YoonGi, no era del todo una mentira.

Al llegar a la casa, ambos ingresaron a esta con un aura de paz sobre ellos. Se dirigieron hacia la sala y es ahí donde encontraron al dueño de la casa muy cómodamente sentado en el sofá familiar mirando una película.

—Si eres tú, Tae ¿Puedes por favor traerme una soda de la cocina? —pidió sin dejar de prestar a los sucesos que se presentaban en su pelicula. TaeHyung, rodo los ojos antes de girarse sobre sus talones para dirigirse hacia la cocina, sin embargo, su acción se vió interrumpida cuando su acompañante lo tomó del antebrazo, acercándolo a él antes de colocarlo en frente para luego abrazarlo por la espalda y reposando su mentón sobre su hombro.

Sus emociones estallaron sin siquiera notarlo, de repente un rubor notorio hizo presencia en su mejillas y sus manos comenzaban a picar por no saber dónde dejarlas.

—¿Por qué no vas tú a buscar la soda, Yoon? Mi novio no es tu sirviente —espetó JungKook, sonriendo como un niño cuando vió al nombrado girar su cabeza como un maniático para posar toda su atención sobre ellos, olvidando de repente su película "entretenida".

TaeHyung miró a su primo sin saber mucho que decir al respecto, pero todo se nublo en su mente cuando sintió unos labios rozar suavemente la zona de su cuello. Sus labios se abrieron levemente al sentir una corriente electrizante recorrer todo su cuerpo.

— ¡Aleja tus sucias manos de mi primo, Jeon! ¡Él es mío! —ordenó a través de un grito que llegó a destapar los tímpanos de Taehyung y junto con ello sacarlo de su ensoñación.

— ¡No soy un puto objeto! —gritó, incluso más alto de lo que anteriormente había gritado su primo. Las risas de sus dos mayores no tardaron en llegar. «Tal vez lo que los llevó a ser amigos era su interminable estupidez» pensó TaeHyung. Era consciente que estaban jugando con él y eso solo lograba hacerlo enojar aún más.

JungKook lo zarandeo juguetonamente, para luego abrazarlo aún más fuerte. Sin previo aviso, lo giró para que el chico que tenía entre sus brazos lo mirara, sus manos aún descansando sobre la cintura de este. TaeHyung miró con ojos sorprendidos al contrario y le fue inevitable no hacer puños sus manos en la remera del pelirrojo cuando este hizo presión sobre su cintura.

—Bebé no debes decir esas cosas —ronroneó con una sonrisa ladina en sus labios. Era notable el hecho de que estaba burlándose de TaeHyung, pero incluso para él mismo se le hacía agradable tener de esa forma al muchacho.

— ¿Y tú quién carajos te crees para decirme qué cosas debo decir o no? —contraataco TaeHyung con tono firme en su voz. La sonrisa que JungKook le había dedicado, provocó algo en su interior que no supo explicar, sin embargo su mente solo pudo armar una oración insultante hacia el contrario « En qué momento ese idiota empezó a comportarse aún más idiota de lo que ya era».

—Tal vez, deba callarte yo mismo ¿Te parece? —susurró el pelirrojo cerca del oído ajeno antes de alejarse levemente. El menor se tensó por completo cuando JungKook se acercó a su rostro y su respiración chocó cerca de sus labios. Sus ojos estaban a punto de cerrarse pero la suerte estuvo de su lado de ese día, o eso creía, cuando su primo había empujado con bastante fuerza para separarlos de una vez. Una parte de él se sintió decepcionado cuando los brazos del mayor ya no estaban sobre su cuerpo, pero prefirió ignorar aquella sensación.

—Ya, idiota. No puedes besar a mi primo a menos a que él te lo permita y él no quiere eso ¿Verdad, Tae? —cuestionó YoonGi, mirando expectante a la repuesta que le daría el mencionado. TaeHyung dudo, pero en ese momento sólo se limitó a asentir con la cabeza antes de dirigirse hacía el sofá. «Tal vez, haberle dicho sobre sus sentimientos a JungKook en su ataque de furia, solo le traería burlas de parte de este y ahora también de su primo» pensó.

Por su parte, JungKook y YoonGi se dirigieron a la cocina en busca de esa soda que tanto quería el segundo y también en busca de tener una conversación en privado.

—Así qué ¿Novios eh? —preguntó YoonGi a la vez que buscaba en el refrigerador su bendita soda. JungKook se sonrió antes de acercarse dónde el pelinegro para luego abrazarlo por la espalda—. Eres una zorra, JungKook —espetó riendo y siendo seguido por el nombrado ante tal "insulto".

—Claro que no, idiota, sabes que hago esto sólo con las personas de confianza —explicó, acurrucándose aún más sobre el cuerpo de su amigo.

—Así que, Tae ahora ya es de confianza —señaló e intentó abrir su soda, pero su amigo se le adelantó y la abrió por él—. Gracias.

—Es mi novio, debería ser así ¿No? —bromeó, recibiendo un golpe duro en su brazo por parte del contrario—. ¿Acaso me golpeaste? Por un momento pensé que me acariciarte con una pluma —volvío a bromear.

—Agradece que fue mi puño y no el sartén que tengo al lado —le indicó el sartén que estaba sobre la mesada. JungKook se apresuró a sacar el sartén de ese lugar y guardarlo en cualquier lugar, la intención era que no lo veo su amigo  para evitar futuros heridos y más con lo que estaba a punto de contarle.

—Bien, no es mi novio, pero el dijo algo, pero no lo quiso profundizar —expresó, rascando su nuca ante la incomodidad que le provocaba hablar de ello con el primo del jóven que podría decirse se le declaró a los cuatro vientos.

—No quiero que juegues con él ¿Entendido? —señaló con su dedo amenazante YoonGi.

—Yo no soy él que está jugando con él, él está jugando conmigo. ¿cómo puede decirme aquello y luego sólo evadir el tema? No es justo —se quejó, sentándose junto a su mejor amigo.

—Hablará contigo cuando este listo o tal vez no tenga realmente claro lo que siente. De igual forma no quiero estupideces de tu parte cuando se trata de él. Sí no quieres estar con él, rechazalo sutilmente, te mataré si viene llorando hasta aquí —sorbió de su soda, sin dejar de mirar con ojos filosos a su amigo de toda la vida.

— ¿Enserio no confías en mi? Terminé una relación jodidamente asquerosa por esas mismas razones, no le haría pasar por la mierda que pase yo —recordó, sintiendo un sabor amargo en su garganta al recordar su pasado.

—Entiendo eso, Kook, pero aveces lastimamos sin darnos cuenta. Y, claro que confió en ti, solo no quiero que empieces una relación si aún no haz sanado por completo —confesó, mirando dulcemente al chico frente a él—. Solo quiero lo mejor para ambos.

JungKook asintió entendiendo el miedo de su amigo, más tratándose de una persona super importante para este. Pero él sentía que ya estaba bien, iba a superarlo, el tiempo suele cerrar todas las heridas, solo esperaba que éso funcionará en él. Pero no estaba pensando realmente en empezar una relación con el primo de su mejor amigo ¿Verdad?.

YO ME ESTABA EMOCIONADO HORRIBLE CUANDO ESCRIBÍA LO DEL PRINCIPIO, AMO AMO EL KOOKTAE.

Ya se viene lo bueno, para mi los capítulos anteriores estaban medio sad ah, prepárense viene más de eso xD

Por fin empezaremos a hablar sobre la antigua relación de JungKook con la persona desconocida :v.

(NOTA: Posiblemente, no suba tantos capítulos como antes porque estoy en épocas de parciales, espero sepan entender 😩)

Gracias por leer :3
Nos leemos pronto ^^
No olviden dejar su voto me hace de gran ayuda 💞

"El Chico De Cabello Rojo"✨KookTae✨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora