"... I fear the fever
Deep in my bones
It runs electric
It draws me home
It knows the weakness
Deep in my soul
It keeps me hostage
I'm never alone ..."
La Fuerza es algo de lo que apenas si escuché nombrar durante el transcurso de mi vida en Jakku. Sobrevivir no te da tiempo para escuchar cuestiones complejas; tus problemáticas son muchísimo más simples. Los alimentos, vender chatarra, los alimentos, vender chatarra. El ciclo jamás termina. No mientras Jakku parece intentar absorberte entre las dunas.
Han pasado tantas cosas en cuestión de unas cuantas horas.
Pero no puedo librarme de la mirada estática del hijo de Han Solo, muerto por su propia mano. Ése monstruo.
No puedo librarme del profundo desprecio que me provoca recordar sus ojos fijos, brillantes, traspasándome una y otra vez, seduciéndome, inclinándome inevitablemente al Lado Obscuro. Tampoco puedo olvidar que, dentro, profundamente, esa sensación iba creciendo, aún cuando trataba de evitarlo y huía, ocultándome de la certeza de que caería en él.
¿Qué es esta sensación de que su odio es no sólo justificado, sino es el mismo que siento yo? Un odio puro, odio que yo no conocía aún cuando había sido toda mi corta vida sólo una especie de mercancía, una cosa; abandonada desde niña a ser parte del sistema común del universo de Jakku, que apenas si me percibía como algo y no como alguien.
"... Maybe you should go?
Baby can't control
Maybe you should go?
Baby can't control ..."
Podían ver sus ojos a través de mí misma, y mis ojos podían ver a través de su alma como si mirara un cristal completamente transparente; la comprensión de que todo fluía como el agua de una corriente demasiado agitada era evidente y ambos sentimos cómo iba moviéndose, como si se apoderara de ella una turbulencia incontrolable.
"... It wants to kill you
It wants to tear you apart
It wants to thrill you
This vengeful love that I've got
Wants to consume you
Then spit you out
I fear the fever, fear the fever
Can you feel it now?..."
No era difícil de adivinar qué pensaba. Para él, sin embargo, embargado por el miedo de que su propia expectativa no fuese consumada, lo que debía ver en mi mente era apenas borroso. La Fuerza era intensa en su familia, como bien lo había dicho, pero no había hecho mas que mermar su confianza, transformarlo en un ser confundido, enfermo de un poder desconocido. Había matado a su padre. En medio de su confusión y de su propio miedo, había acabado con la vida de su propio padre.
En medio de su rabia, quería acabar con todo. Eso me incluía.
Pero por alguna causa, la Fuerza también era intensa en mí y podía sentir que incluso para ser alguien más bien frágil, Kylo Ren me temía. Temía que yo supiera instintivamente lo que él tuvo que entrenar y aprender. Pero no se echaba atrás y no cedía. Peleó hasta el final. Hasta que el planeta comenzó a resquebrajarse. Sentí cómo se dejó herir. Sentí cómo el sable rasgó su ropa y la sensación misma me hizo sentir satisfecha. Me ofreció ser mi maestro. ¿Qué deseaba enseñarme?
No sabía que había tanto que podía mostrarme.
Era posible que el Lado Obscuro también intentara atraerme, pero no deseaba ceder. En realidad, por entonces yo no sabía bien cómo es que eso funcionaba.
Lo único que sabía es que sí sentía miedo, aunque él no pudiese verlo.
El miedo a ceder. El miedo a que me tomara y se apoderara de mí y de mi voluntad.
