Capítulo 21

26 5 0
                                    

Jurgen

— ¡Usaste mi auto sin permiso! — gritó Álex desde la cocina mientras yo bajaba por las escaleras — ¿Por qué?

Cielos, Álex no sabía que ayer saqué su auto. Le dije a Sam que usaba ese auto cada vez que yo quería pero en realidad mentía. Si se lo pedía prestado a Álex estoy seguro que no me lo habría prestado, es más quizás me hubiese dado dinero para un taxi hasta la playa antes que prestarmelo. Entré a la cocina esperando un gran regaño. Ese hombre casi nunca se enojaba, pero cuando lo hacía era insoportable. Pero aunque me merezco todos los castigos que me quiera imponer, estoy convencido que sacar su auto sin permiso ayer valió la pena. Si que lo valió.

— No tienes permiso de conducir — gruñó Álex — no tienes mi permiso para usarlo cuando te de la gana y mucho menos tienes permiso para llevártelo durante todo el día ¡Demonios Jurgen!

— Hey, no te alteres señor perfección. Te envié un mensaje avisándote que lo iba a usar.

— Y yo te respondí que no lo hicieras — contraatacó — te aprovechaste de que no estaba en mi casa ayer — Álex se acercó a mí y me dió un pequeño golpe en la cabeza con una cuchara de madera que había en la encimera.

— En la cabeza no — dije tocando mi frente — matarás mis ideas — dije riendo.

A pesar de que debía soportar los regaños de mi tutor estaba de buen humor. El dia era maravilloso después de lo que pasó ayer. En la mañana de hoy Sam se veía feliz, disfrutaba de todo y parecía no pensar en su enfermedad. Eso me animaba a seguir dándole todo de mi. Aunque aún estaba Elioth en medio.

— ¿A dónde fuiste ayer? — quiso saber Álex — No entraste a la escuela y estubiente fuera todo el día ¿En qué andas? Y no me digas que fuiste a "buscar inspiración para el libro" porque no voy a creerte.

— Fui a buscar inspiración para mi libro — dije seriamente y pude ver cómo en menos de un segundo la mirada de Álex me lanzó furia y volvió a pegarme con la cuchara — ¡Oye, mis ideas están ahí!

— No te hagas el gracioso.

— Pero es verdad, fui a la playa — repliqué riendo — y anoche antes de irme a dormir escribí algunas cosas para el libro ¿Quieres ver?

— Tienes un minuto para excusarte muchacho. Sin mentir.

— Sam dijo que no había desayunando bien, entonces la llevé a tomar café en la playa y pasamos el día entero juntos. Tuve una cita con ella en la playa. Fin — Álex quedó perplejo, no se esperaba eso, eh — escribí todo lo que pasó ayer y lo usaré para el libro.

— ¡Ese es mi mucho! — soltó dándole un golpe a la mesa — ¿ya son novios? — indagó elevando ambas cejas una y otra vez.

— No, no lo somos — me gustaría poder decir que sí, pero quizás aún no es el momento para eso. Además, Sam sigue saliendo con Elioth, aunque ayer dijo que quería dejarlo pero para eso debía esperar ¿esperar qué? No lo sé — No somos novios pero hay algo entre los dos.

— Te dije que debías intentar. Ah... y Sam ¿sabe quién es HeavenBook?

— No, para nada. Aunque me gustaría decirle.

— No lo hagas. Si quieres seguir manteniendo el anonimato debes seguir ocultandote — la advertencia de Álex me hiso pensar ¿Debía seguir oculto?

— ¿Y si ya no quiero seguir con el anonimato? — planteé dudando en seguir ocultandome.

— Solo piensa bien en tus decisiones. Lo que decidas es cosa tuya, pero después acepta las consecuencias, las preguntas y todo lo que venga. Pero sobre todo piensa en tu madre, ella inició todo esto.

Te Busco Entre PáginasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora