Sofía se quedó pensativa.
Que soso ha sido, seguro que no le habrá gustado la cita...
-¡Sofía! - Gritó una chica. - Que de tiempo sin verte fea.
Era Natalia, otra del grupo, era muy buena amiga de ella, Daiana y Nuria ( otra amiga). Era morena de pelo negro y ojos marrones. Muy extrovertida, segura de sí misma y ligona, cada dos por tres estaba tonteando con uno, casi nunca llegaba a nada con sus ligues pero eso le divertía.
El grupo estaba compuesto por, Sofía, Daiana, José, Gonzalo, Niccolò, Natalia y Nuria.
Gonzalo es el más bajito de los niños estaba fuertecito, le encantaba el deporte. Su pelo era castaño de ojos color miel, era un poco blanco de piel. Era muy tímido y le gustaba Natalia, y ella a penas le echaba cuenta, solo como amigos. Y Nuria, alta, rubia, ojos marrones, también blanquita de piel, muy alegre y fanática de los animales.
-Hola nati, ya ves que si, mucho tiempo ya. ¿ Entramos?
- Sí, ellos están deseosos de verte.
Entraron en la pizzeria, y en una mesa al lado de la ventana, se encontraban todos. Sofía sonrió.
-¡Hola Sofía! - Gritaron todos a coro.
- Tía estás perdida.- Dijo Nuria.
-Ya ves que sí, entre que te vas por ahí y que quedas con alguien... - Dijo Niccolò con chulería.
-Lo primero... ¡Hola a todos! os he echado mucho de menos, lo segundo, ja,ja,ja...¿Como te has enterado de eso Niccolò?
-Tengo mis contactos
-O sea, Daiana.
- Ehhh, yo no he dicho nada, Niccolò y Gonzalo te vieron esta tarde con Daniel.
-Ya, ya...- Se puso roja.
Sofía y Natalia se sentaron. Estuvieron hablando todos, poniéndose al día, contándose novedades. Sofía contó el problema que le había surgido con Daniel, la despedida sosa, ellos le dijeron que no se preocupara, que tendría prisa.
Los siete eran muy buenos amigos y se contaban todo, es cierto que las chicas tenían sus secretos al igual que los chicos.
-Bueno chicos es hora de irse. - Dijo José.
- Sí... Que bien me lo he pasado, echaba de menos estos momentos juntos.- Dijo Niccolò
-Y digo yo... ¿No pega un heladito antes de irnos?- Dijo Daiana.
-Que buena idea, venga vamos, que se me ha antojado, eso sí, no puedo estar mucho tiempo.- Comentó Natalia.
-Yo tampoco puedo estar mucho tiempo... Ya sabéis como es mi madre..
-No te preocupes Sofía, todos tenemos que recogernos pronto.- Le contestó Gonzalo.
Después de tomarse el helado, cada uno se fue a su casa, como siempre a Sofía y a Daiana le acompañaron José y Niccolò, a Natalia y a Nuria, Gonzalo, ya que vivían muy cerca.
Sofía al llegar a casa no pudo aguantarse, y miro corriendo el ordenador.
Nada, ni un mensaje. Estaba decepcionada, no sabía que había pasado, ella pensaba que todo había salido muy bien, pero por lo visto, para Daniel no.
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Esto no me puede estar pasando.
Любовные романыCon tan solo 14 años, Sofía empieza a experimentar sentimientos que nunca había sentido, cuando conoce a Daniel. A partir de entonces vivirá cosas que jamás pensó que le iban a pasar al igual que Daiana, su mejor amiga, pasa por un momento que le ha...