Beautiful Promise. 'HunHan'

Capítulo II. Luhan is only mine. Got that?

Sehun tiene cinco años de edad y Luhan tiene siete.

Sehun es más alto pero sigue hablando como un niño pequeño y Luhan sigue teniendo la voz chillona.

Sehun asiste al preescolar y Luhan asiste a la primaria.

Sehun vive con sus padres y Luhan vive con sus tíos.

Sehun sigue siendo celoso y berrinchudo, además de gritón y posesivo. Luhan sigue siendo alegre y entusiasta, además de pequeño y delicado.

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Sehun tiene cinco años, asiste al preescolar y sigue siendo un niño muy juguetón. Le gusta mucho jugar y estar al lado de Luhan, o Lutan, como el niño lo llama. A Luhan no parece molestarle, a pesar de tener ya siete años.

Sehun siente un increíble instinto de posesión por el mayor, es como si Luhan fuera un juguete muy preciado para el pequeño, aunque en realidad es más que eso, Luhan no es un juguete ni algo así, Luhan es el esposo de Sehun y eso implica que el niño de cinco años lo ame y quiera de manera especial y única. De manera dulce, de manera tierna...

Miércoles.

El pequeño Sehun está viendo televisión, están saliendo caricaturas y el pequeño imita a los personajes que le parecen más graciosos. Son las tres de la tarde y el pequeño se siente un poco solo, Kyung Soo salió con sus padres, Chanyeol debe de estar durmiendo y Luhan no ha salido. Sus padres están hablando en la cocina.

El tiempo pasa y el pequeño se molesta más y más, Luhan no ha ido a verlo. Se supone que iría y ya son casi las seis. Se levanta del sofá y da pasos pesados hacia la cocina. Sus padres aún conversan y en cuanto lo ven le sonríen pero el pequeño sólo forma un mohín y cruza sus brazos.

—Ya acabaron las caricaturas, Sehunie. —dice su padre con voz gruesa y suave.

El niño niega y patalea en el suelo, sus ojitos se ven tristes y su expresión es seria.

—Entonces, ¿ocurre algo, bebe?— interroga su madre.

—Lutan. —Acusa—  Lutan no ha venido, es malo, malo, malo. Lutan ya no me quiele, Lutan me engaña, es malo. —comienza a hacer berrinche y patalea, sus ojitos se vuelven vidriosos y está empesando a hipar.

—Eso no es cierto, Luhan está enfermo Sehunie. Amaneció un poco agripado y eso empeoro en el transcurso del día, un doctor fue a verlo y le recomendó reposo por cuatro días.

Sehun abre sus ojitos sorprendido y sale corriendo, se escuchan pasos alejarse y después regresar, el pequeño entra en  la cocina nuevamente y en sus manos trae una chamarra, se ha limpiado las lágrimas de la cara y parece decidido.

—Mami, llévame a ver Lutan, yo lo cuidaré. Es mi esposo, tengo que cuidar de él. Si estoy con él se sentirá mejor y dejará de estar enfemo. —pide.

—No lo sé, Sehunie. Dile a papá si te lleva. —responde la mujer.

Sehun dirige la mirada hacia su padre y le sonríe antes de correr a abrazarlo y rogarle que lo lleve a ver a Luhan. El hombre acepta después y sale con el pequeño niño en brazos. Camina por la acera y va a la casa de a lado, llama a la puerta y un hombre alto de rasgos delicados le abre la puerta.

—Buenas noches. —saluda el padre de Sehun.

—Buenas noches, se les ofrece algo. —responde con seriedad.

—Mi hijo quería ver a Luhan, mi esposa se enteró de que Luhan está enfermo y Sehun quiso venir a verlo.

El hombre los analiza con la mirada y después sonríe, se hace a un lado y deja espacio para que ellos entren.

—Disculpen si fui serio, no suelo hablar mucho con la gente del vecindario debido a que trabajo. —comenta el hombre detrás de Sehun y su padre.

—No Importa, el trabajo suele estresarnos mucho y hay ocasiones que ni siquiera  tenemos ganas de ser amables. —dice el padre de Sehun y sonríe restándole importancia.

—Puede bajar a Sehun, estoy seguro de que el pequeño sabe dónde es el cuarto de Luhan. —murmura el hombre.

El padre de Sehun coloca al niño en el suelo y el niño hace una pequeña inclinación al tío de Luhan antes de empezar a correr hacia las escaleras.

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Luhan está sentado en la cama con la espalda recargada en la cabecera de esta, está viendo una película de niños y está tapado hasta el regazo. Alguien llama a la puerta suavemente y el niño murmura un "pase".

Sehun entra en el cuarto tímidamente y lo mira con ojitos preocupados. Luhan le sonríe alegremente a pesar de tener un protector bocal y señala un espacio en la cama, aun lado de él.

Sehun corre a subirse a la cama y abraza a Luhan, se cuelga en su cuello y comienza a sollozar. Luhan está impactado.

— ¿Qué pasa, Hunie? —pregunta alarmado.

El pequeño no responde y se aferra aún más a Luhan. Llora por unos minutos más y después se separa para mirarlo con ojos tristes.

—Estaba asustado... tenía miedo de que algo te pasará... Eres malo, no me llamaste y no sabía que estabas enfemo. ¡Lutan es malo! ¡Lutan no me quiere! —solloza el menor y se aferra a Luhan con fuerza.

Luhan le da palmaditas suaves en la espalda para tratar de animarlo, Luhan comienza a toser suavemente y Sehun se separa alarmado.

—Lutan... —murmura suavemente— ¡Lutan es malo! —Exclama con los ojitos vidriosos— Lutan está enfemo y no quiere que yo lo cuide. —balbucea entre el llanto. —Lutan es malo y está enfemo. —murmura.

—Dejaré que me cuides, Hunie. —comenta Luhan. —Me cuidarás mientras esté enfermo, vale.

Sehun lo mira con una pequeña sonrisa y asiente de manera suave, Luhan le limpia las lágrimas del rostro y el pequeño se sonroja suavemente.

—Lutan tiene manos suaves, mi esposo es muy lindo. Así que no puedes dejarme, eres mío Lutan. —dice Sehun severamente.

—No soy de Hunie, soy de mi mamá. —responde Luhan tímidamente.

Los labios de Sehun tiemblan ligeramente y un mohín se forma, parece que está a punto de llorar pero Luhan coloca un dedo en los labios del niño y le hace ojitos.

—No llores, vale.

—Lutan no quiere ser mío, Lutan se casó conmigo y ahora no quiere no quiere ser mi esposo. —balbucea Sehun con tristeza.

—Seré tú esposo pero sólo si dejas de llorar. —responde Luhan.

— ¿E-nserio?

—Sip.

—Está bien, Lutan.

—Ahora, cuidarás de mí Hunie.

Sehun asiente animado y se acomoda en la cama.

—Lutan tiene que acostarse, yo cuidaré de Lutan y así Lutan estará mejor.

Luhan asiente y se acuesta en la cama, coloca su cabeza en la almohada y cierra los ojos. Sehun le quita el protector de la boca y acerca su rostro al de Luhan, roza sus labios suavemente y se separa colorado. Luhan abre los ojos sorprendido y mira a Sehun con los ojos como platos.

—Mi mami... cuida de esta forma a mi papi. —balbucea Sehun tímidamente.

—V-Vale, eres mi esposo y eso. —murmura Luhan y vuelve a su posición en la cama.

Sehun se mete entre las frazadas y con sus pequeñas manos se aferra a la cintura del mayor.

—Lutan es mío, no puedes ser de nadie más. —murmura entre el calor de las mantas.

Luhan se acomoda en la cama y corresponde el abrazo.

—Hunie está calientito y me cuida, no quiero nada más. —responde y cierra los ojos para quedarse dormido.