El pequeño Lord

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Al salir de aquel momento, se da cuenta que habían echo todo un drama público, y Kuroko no es de esos que les gusta llamar la atención.

Se pone rojito de pies a cabeza, y rápidamente oculta su rostro sobre el pecho de Nash. Quien capta rápidamente lo que molestaba a su pequeño.

~que es lo que miran idiotas, tienen algún asunto aquí?- les gruñe.

Mas que asustados, todos los espectadores siguieron su camino.

~ya paso Tetsu.- sobandolo con ternura

~y-ya se fueron?

~si bebé.

Kuroko despega su carita y levanta la mirada directamente a esos ojos que te atraían si los mirabas directamente.

~bebé, por que estabas llorando, si no te gusto lo que hice deberías solo decirlo, yo-

~no es eso Nash, todo estaba muy bello, es solo que me hizo recordar a ciertos..sucesos... muy.. dolorosos.

~como que dolorosos? *que rayos le paso en Japón?*...Tetsu perdona si te incomodo... pero, me ha estado causando intriga, desde hace un buen tiempo por favor dime que fue lo que te impulso a venir a EE.UU - la curiosidad se volvió en angustia. Tenía capacidad de averiguarlo solo, pero quería escucharlo de su bebé.

Kuroko que le había agarrado mas confianza a Nash le narra todo lo que había pasado.

Nash se percata que eso pasó justo después de que él saliera de Japón. En toda la narración Nash mantuvo la misma expresión oscura.
Si se hubiera quedado unos días más Kuroko no habría pasado por tal tormento, podría haber estado a su lado.

~*como se atreven tratar así , a Tetsu, esos bastardos h&%€#.*

~disculpame Nash - empieza a sollozar- es algo que no quisiera recordar más.

Le dolía ver asíí de triste a su pequeño. Así que se propuso alegrar a su bebé con cada oportunidad que tenía. Y si era posible haría pagar a esos bastardos de colores.

~ven bebé, te voy a llevar a la mejor cita de tu vida.- le sonríe.

~Si estoy contigo, la pasare mas que genial.- le devuelve el gesto, de la manera más tierna que Nash haya visto.
Haciendo que lo abrace sin tener intenciones de soltarlo.( Pero de todas formas tenia que soltarlo.)

Llevo a su pequeño a todos lo lugares posibles, dándole detallados y bellos recuerdos,
( lo dejo a imaginación suya)(Disculpenme estoy con falta de motivación)
.
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Al llegar la hora de queda de Kuroko (no se olviden que tiene que atender a Ogiwara)
( jejeje a cuanto que se olvidaron de él XD .)

Nash lleva a kuroko hasta su casa.

~adios bebé,...esto...*ya no aguanto* .- algo inquieto.

~ que sucede Nash?- preocupado.

~...puedo besarte?- el lado tímido de Nash no le daba el coraje de besarlo. Parece que sólo funciona cuando quiere marcar territorio.

Kuroko le sonríe dulcemente y se hacerca suavemente.

~claro que puedes - lo rodea con sus delgados brazos.

Nash lo toma por la cintura y hacerca esos dulces labios a los suyos, formando hací una bella armonía que subía la intensidad.
Lo besa hasta quedar satisfecho, y su pequeño sin aire.

~gracias bebé, ya es hora que vayas a descansar.

~gracias a ti Nash. - sincero.

~porque me agradeces?

NO TOCAR - QUE YA ES MIODonde viven las historias. Descúbrelo ahora