6. Sentimiento llamado amor.

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Después de que les dijeran que tenían que cambiar de canción, el tesoro J no se mostraba muy animado.

El bajito del grupo sacó un paquete de gomitas de su bolsillo mientras Haruto llegaba con bebidas para todos, ellos disfrutaban con pequeñas cosas como estás que les hacían sentir ánimos.

– Al parecer el tesoro A no lo está pasando nada bien, uno de los chicos abandonó y se sienten frustrados. – Comentó el líder del equipo tomando asiento en el piso.

– Creó que a ellos también les vendrían bien estas deliciosas gomitas, Mashiho. – Dijo Mahiro animándole a visitar el estudio donde se hallaba Jun Kyu.

– No es mala idea, ve ya Mashiho, entre tanto veremos que podemos elegir y lo consultamos cuando vuelvas. – Opinó Asahi, el chico asintió antes de salir del estudio, sin duda adoraba a sus amigos.

Con sigilo dio suaves toques a la puerta del estudio del equipo A.

– Pase. – Indicó la voz de aquel chico quien se había presentado como Yedam el día anterior.

Sintiéndose pequeño, el japonés ingresó dando pasos lentos y desconfiados hasta llegar al centro. Sacó la bolsita de gominolas y se las entregó al líder del equipo quien obviamente era Yedam.

– Sólo quería decirles que no pierdan los ánimos puesto que todos tienen mucho potencial para brillar siendo solo uno o dos quienes se presenten; sé que lo harán bien, ánimos. – Habló con nerviosismo antes de los aplausos de todos.

– Wa, me cae bien, es tan adorable que creó que deberíamos de secuestrarlo y no dejar que vuelva con sus compañeros. – Hyunsuk se mostró enternecido con aquel gesto, despertando las risas de sus compañeros menos la de Jun Kyu quien hacía un enorme esfuerzo por no caer por aquel japonés de nuevo.

– Yo creó que es mi tipo, sarangheo. – Doyoung hizo corazón con sus dedos despertando un leve sonrojo en el bajito y molestia por Jun Kyu.

– Te lo agradecemos de corazón Mashiho, tienes un corazón precioso y no sé como hay algunas personas que no sean capaces de verlo. – Dijo Yedam haciendo énfasis en las últimas palabras fulminando con la mirada a Jun Kyu.

Luego de una corta despedida Mashiho salió, pudiendo soltar el aire retenido en sus pulmones.

– No sé que ve ese chico en un tonto como tú. – Seunghun reprochaba a Jun Kyu quien se cubría los oídos después de tantos regaños de sus compañeros.

– Jun Kyu es del tipo que no come, ni deja comer. – Dijo Byoung Gon antes de que todos estallasen en risas menos Doyoung quien sentía cierto y mucho agrado por el japonés que respondía al nombre de Mashiho.

– Creó que si sabes que es lo correcto irás y pediras disculpas. – Sentenció Yedam con seriedad.

Jun Kyu se levantó y salió fuera rápidamente viéndolo no muy lejos desaparecer por los pasillos y corrió por él, poniéndose frente a aquel que creía era su viejo amor.

– Y-yo, lo siento mucho por lo de ayer, no me porté como la persona más agradable del mundo y después de ver tu gesto tan noble hoy puedo apreciar que sigues siendo el mismo chico sencillo y simpático de siempre; el error está en mí quien no debe de haber fingido ser alguien diferente pero, no pude ser otro después de que me dejarás así sin decir nada y... – El menor se acercó y le dio un abrazo que le proporcionó la tranquilidad necesaria para saber que estaba haciendo lo correcto tal y como dijo Yedam.

– Lo siento mucho, realmente luché por quedarme aquí pero mi madre no es alguien a quien pueda llevarle la contra. Volví porque estoy decidido a recuperarte, aunque sonará tonto porque probablemente me hayas olvidado y yo siga aquí como si todo, mientras tú estás como si nada y es... – Fue interrumpido por un beso del mayor.

– Aún no te he perdonado, sólo te estoy dando ánimos, tienes que hacerlo bien en la presentación. Pero me asegurare de ser mejor que tu, así que no pierdas el tiempo y preparate. – Dijo antes de seguir de largo a retonar al estudio, dejó escapar una sonrisa, se sentía capaz de hacer bien aquella presentación; sólo esperaba que el japonés lo hiciera de igual forma porque aunque estuviera aquella competencia no había mayor sentimiento que el amor que era capaz de abrirse paso ante todo y todos.

 – Dijo antes de seguir de largo a retonar al estudio, dejó escapar una sonrisa, se sentía capaz de hacer bien aquella presentación; sólo esperaba que el japonés lo hiciera de igual forma porque aunque estuviera aquella competencia no había mayor ...

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¡Hola!
En vista de que han habido más lectoras he hecho un pequeño maratón para recompensarlas por todo el amor y aprecio a la historia. 💕
Besos y saludos. 💞

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