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La película estaba en un momento menos tenebroso, ahora el asesino, que parecía ser un Ente, estaba en una decaída por lo que las escenas no eran tan fuertes, según el omega. JiMin creía que los colores de aquella película, al igual que su audio, era lo que más miedo le generaba, la luces de la película eran oscuras y poco brillosas.

La peor decisión que el chico pudo haber tomado esa semana fue dejar que su novio eligiera la película, ellos ahora estaban en la sala de cine rodeados de personas que, según el omega, podrían ser asesinas viendo, como un tipo raro con complejo de demonio andante mataba personas para no rejuvenecer.

JiMin no estaba en una situación muy linda, temblaba desde la primer escena con sangre y su aroma se esparcían por toda la sala gritando a olores su miedo.
El miedo no se iba en ningun momento, incluso si su alfa ,que estaba al lado suyo, apretaba su manito y liberando un poco de su olor para calmarlo. En cierto punto, lograba calmar al pequeño chico de pelos rosas, pero no por completo. Jimin sabía que era una película y que nada de lo que mostraba era real pero no podía evir que el miedo lo recorra por completo.

—¡AY! –el grito era de una alfa de las filas traseras había asustado al omega, incluso más que la misma escena.

Con curiosidad, JiMin vio de reojo como la chica rubia se apegaba a un muchacho que parecía ser un omega, el chico en cambio solo miro dudoso a la alfa esperando que se aparte. Sus pelos azules y su mirada fría parecían querer mandar lejos a esa chica sin un toque de amabilidad. En cambio la rubia no parecía querer despegar sus pechos pequeños y brazos del contrario. JiMin pudo ver que un alfa castaño la miro frío, soltando un gruñido hacia la alfa, el chico omega se estremeció al igual que él.
El alfa gruñón sostuvo al omega peliazul y lo sentó en su regazo alejandole ver a la alfa que él era su omega.

La rosada y pomposa boquita de JiMin se abrió al reconocer a aquel alfa como su tierno y lindo hermano menor. Cuando decidió que iba a decirle aquel nuevo descubrimiento a su alfa la película estaba en la escena más fuerte, el nudo. JiMin sintió que llegaba al punto de susto total, sus ojos entonces empezaron a derramar lágrimas y sus sollozos llenos de panico alarmaron a su alfa.

Sin esperar que la película termine, TaeHyung tomó a su cachorro y salió de aquella sala y luego del cine.

—Lo siento, lo siento ,amor. Nunca más veremos una película de miedo bebé –habló lo más tranquilo que pudo, ocultando su rostro en el hombro del chico que se abrazaba con fuerza de su cuello.

—Y-y si, no-os matan co-como en la pel-licula –lloraba en su cuello, TaeHyung sin poder tranquilizarlo los sentó en una banca. Acomodo con inquietud a su omega en sus piernas, iba a mimarlo lo suficiente.

—No bebé, es una película cielo. No hay ningún mitad demonio de las guerras civiles intentando matarnos –dejo un beso en las mejillas rosadas y humedas, para pasar a besar sus ojitos igual de rojitos y húmedos.
Un tren de besos viajo entonces desde sus mejillas hasta sus labios, le dedicó un suave y delicado beso en los belfos abrazando con fuerza su cuerpo.

—No va a pasar nada bebé –volvió a besarlo.

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D O L Y

159 De Altura • 𝐕𝐌𝐈𝐍Donde viven las historias. Descúbrelo ahora