Boca de Dragón

C05 - Magia

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Autor: ❝Nuevos conocimientos sobre los dragones❞

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【24】

Diez días después, libramos una gran batalla contra Lord Kaller.

Lord Kaller no sólo tenía excelentes torres de arqueros, sino que también tenía catapultas.

Mientras estaba de pie en un carro de guerra en la parte trasera del ejército, observé cómo se lanzaban enormes piedras incendiarias una tras otra contra mis tropas y Fruys. El dragón seguía siendo capaz de esquivar todas las andanadas que lanzaban las catapultas a pesar de su tamaño, pero mis soldados no tenían tanta suerte, ya que caían personas con cada andanada de cometas en miniatura. Una terrible ansiedad se apoderó de mi corazón mientras observaba.

De repente, Fruys emitió un largo rugido antes de rodar en el aire. Atravesando todas las torres de arqueros y las catapultas, se llevó la peor parte de los ataques con su propio cuerpo y siguió avanzando hasta que todas las fortificaciones enemigas quedaron pronto cubiertas de hielo.

Vi a Andy agitar su brazo en el aire, indicando a las tropas que aprovecharan esta oportunidad para lanzar un ataque a gran escala.

Cuando se enfrentó a las fuerzas dirigidas directamente por Lord Kaller, Fruys lanzó una ráfaga de aire helado, haciendo que las tropas enemigas perdieran su impulso.

Pude oír la sorpresa en la voz de Lord Kaller al gritar desde el otro lado del campo: ―¡Es un dragón que puede usar magia de alto nivel! 

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【25】

A pesar de la ayuda de Fruys, pasamos un día entero antes de someter a Lord Kallers.

Sólo a través de la pura fuerza de voluntad nuestros soldados siguieron adelante a pesar de que su agotamiento había sobrepasado hace tiempo sus límites.

Sin embargo, al final, nuestros guerreros regresaron victoriosos con Fruys liderando orgullosamente al frente, como siempre.

Me apresuré a abrazar su enorme cuello y me acerqué a su oído para decirle con una leve sonrisa: ―Fruu, realmente eres mi héroe.

Fruys no respondió y se limitó a girar su enorme cabeza hacia un lado.

Yo rocé mis mejillas contra su cuello.

Pero, de repente, levantó sus grandes garras para apartarme y luego desplegó sus alas, antes de salir volando.

Levanté la cabeza para ver su silueta cada vez más pequeña en el cielo, sintiéndome ligeramente desconcertado.

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【26】

Andy se acercó para señalar mi error: ―Adam, los dragones son criaturas de muy alto nivel. No deberías tratarlo como tratas a las mascotas o a tu caballo Anthony.

―No lo hago ―, repliqué con el ceño fruncido. ―Y nunca he tratado a Anthony como una mascota. Siempre ha sido mi compañero y amigo, incluso desde el principio.

Andy dijo con justicia propia: ―Aun así, tus acciones harán que Fruys lo malinterprete.

―¿Malinterprete? ―Me sorprendió un poco.

―Mm. Él podría pensar que no lo estás respetando. Adam, deberías tratar a Fruys como tratarías a un héroe que nos ayudara.

Agité la mano y dije: ―Eso es innecesario. Fruys y yo estamos muy unidos y, además, creo que en realidad le gusta.

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【27】

Asimilar el territorio y los recursos de Lord Kaller requería, naturalmente, aún más tiempo.

Sentí curiosidad por la reacción de Lord Kaller, como si fuera totalmente inesperado que Fruys utilizara la magia. ¿No era muy normal que los dragones supieran usar la magia?

Lo medité un momento y decidí que no era así. El bardo errante sólo dijo que los dragones tenían una larga vida y un fuerte ataque y defensa, pero nunca mencionó nada sobre que todos ellos supieran usar la magia.

Por suerte, Lord Kaller era una persona a la que le gustaba atesorar cosas. Había muchos libros raros en su castillo, en los que busqué todo lo relacionado con los dragones. Fue entonces cuando comprendí que dentro de la raza de los dragones, sólo la mitad podía usar la magia.

Los que podían usar magia avanzada de tipo hielo de área amplia como Fruys eran aún más raros, y además, los dragones eran naturalmente más poderosos que los magos humanos que practicaban el mismo grado de magia. No sólo sus cuerpos eran naturalmente impenetrables contra los ataques físicos, sino que también su resistencia mágica era más de cien veces mayor que la de un guerrero ordinario. Y lo más importante era que la magia era una de sus habilidades innatas: no necesitaban la ayuda de ningún pergamino, conjuro, bastón, hechizo u otras herramientas como un humano.

No es de extrañar que matar dragones fuera tan difícil en los cuentos de hadas.