Kuban One shots

MARATÓN 1/3 El retorno del mal

Un hombre corria a toda la velocidad que sus piernas les permitían entre sus brazos estrechaba un pequeño bulto en donde dormía un bebé, a lo lejos una figura a caballo les observaba, su jinete sonrió con burla, los humanos eran tan patéticos.

Espoleó al caballo dirigiéndose al lugar del desdichado cerrandole el paso -¡Señor, tenga piedad! Mi hija es huérfana de madre, no tiene más sustento que...
-¡Callate!-dijo el jinete bajando del caballo, se trataba de un apuesto y temible joven con traje charro color negro-No puedes romper tu promesa, Ramón... Y menos con algo tan delicado...

El mencionado se puso de rodillas frente al charro.
-¡Tenga piedad! Le pagaré lo juro, pero no le haga nada...-suplico el hombre.
-Un trato es un trato, Ramón...

Leo despertó sobresaltado y sudando frío, pasó una mano por su cabello, tratando de convencerse que era un sueño y nada más.

La lluvia golpeaba con fuerza la ventana y el cielo se iluminaba constantemente por relámpagos, habían pasado 5 años desde que le había vencido...
5 años, en donde había tenido que soportar noche con noche la misma serie de pesadillas.
5 años, con la sensación de que le vigilaba algo desde la sombras anhelante de que sucumbiera finalmente a la oscuridad...

Un picor en el antebrazo le hizo reaccionar, se sentía como si algo le quemase desde dentro, horrorizado lo observó... Una serie de figuras oscuras comenzaban a formarse en éste.
-No puedes renunciar a tu destino, Leo...-susurró una voz tras suyo.

Leo se levantó de la cama y entró en pánico viendo como poco a poco la oscuridad le consumía, era demasiada la fuerza que sentía entrar en su interior...

-No te niegues o es peor-dijo el susurro poco antes de que Leo callera sobre sus rodillas por el dolor, como si algo amenazara con salir de su cuerpo en cualquier instante.

De pronto el dolor cesó dando paso a una sensación poderosa, que le hacia sentir invencible y fuerte. Se observó en el espejo que tenía en la habitación, sus ojos ya no eran de ese típico café que les caracterizaba ahora relucían en un iris dorado y lucia ahora una fina vestimenta de charro.

Una risa cínica salió de su interior, no había vuelta atrás, la maldad se sentía y sabía tan bien...
Era la hora de tomar el lugar que le correspondía y tomar lo que era suyo.

En algún pueblo cercano...
-Señor, señor-gritaba desesperado un criado a la puerta del cura-Ha vuelto, está en la Hacienda de Santa Margarita...
-¿Como dices?-dijo un hombre viejo abriendo la puerta.
-Sí, la Hacienda de Santa Margarita, está toditita iluminada y parece que algo está pasando...
El hombre palideceo -Rápido ve a...
-No creo que sea necesario, padre.-le interrumpió una voz grave.

-Es que acaso es posible... ¿No te había vencido ya, el famoso Leonardo San Juan?
El charro rio con burla -¿San Juan venciendome, dice? Me va a hacer llorar, padre. Mejor, váyase acostumbrando a que el que va a mandar aquí soy yo sino atenganse a mi furia...-dijo cínico.
Ambos hombres lo miraron horrorizados ¿qué sería del pueblo en manos de ese demonio?

3 meses después..
El pueblo le temía por completo, y su fama de que si un desdichado tenía una hija bonita y hacia un trato con él, la chica era el precio fijado se extendía con rapidez; razón por la que muchas jóvenes simplemente no volvían.

Sin embargo, un rumor había llegado a los oídos del charro, una joven geisha se había mudado al pueblo como dama de una muchacha acomodada y su belleza era tan abrumadora que juraban que era alguna clase diosa.

El joven charro miro orgulloso sus cultivos por la ventana, se sirvió una Copa y se recargo en un sillón de cuero.
-Pues no sé que seas pero vas a ser mía, chiquita.-dijo antes de darle un sorbo al tequila.

Es el día del maratón, Chi cheñoool...
Bueno, bueno, me pidieron mucho el AU dónde Leo es el Charro Negro y Kubo, alguna entidad lunar.
Las tres partes del maratón están relacionadas.
Las canciones en las que me inspire son Emperor's New Clothes, Miss Jackson y Say Amen de Panic! At The Disco. Les sugiero las escuchen en ese orden mientras leen cada capítulo.
Nin.