La maldición de los Malfoy

Capitulo 5: La belleza de la vida

Draco

Me encantaba ver el día desde este punto de la casa, era como si todo el mundo desapareciera y solo quedará lo bueno, ese momento en el que veías como el sol brillaba en su punto más alto

Ver a las personas correr, los niños llendo a la escuela, esos pequeños momentos le decían que mi vida no podía estar mejor

Aunque la viera como peor

Subí a la habitación a ver como está Hermiome, m lleve una gran sorpresa al verla parada frente a la ventana admirando el día, me acerque a ella y la tomé por la cintura, se sobresalto así que deje que sintiera mi tacto, se relajó y se apoyo de mi cuerpo, lleve mis manos hasta su vientre y con mi pulgar daba pequeños masajes en el

—¿Cómo amaneces?— pregunté

—Mucho mejor— respondió y posó sus manos sobre las mias, comencé a dejar besos por su cuello hasta llegar a su mejilla

Con cuidado la voltee haciéndola quedar de frente y la bese, al principio ella se dejó llevar pero luego me siguio el beso, era delicado y en el estaba dejando en claro todo el amor que le tenía al igual que ella

Nos separamos para tomar aire y ella sonrió para que luego pegaramos nuestras frentes mientras aún seguíamos abrazados

—¿Te parece si nos damos un baño?—pregunté ella asintió

Nos separamos y la vi a los ojos, esos hermosos ojos color avellana que me transmitían paz y le hacían sentir deseo

—Ven. Te ayudo— ella estaba débil aún así que la ayude a desvertirse, yo ya estaba sin camisa y para ser sinceros no me había dado cuenta que todo lo que hice lo había hecho en aquellas condiciones, pero da igual, ella se terminó de desvertirse al igual que yo y ambos nos metimos en el agua caliente

Salí primero y me seque a la velocidad de la luz, me había sacudo de tal manera que mi cabellos húmedo había salpicado, ella río y yo la segui, termine de secarme y vestirme, cuando iba a salir de la habitación vi como ella estaba sentada en la cama se estaba colocando su brasier y luego se montó un largo camisón que le asentaba muy bien a su estado, luego se colocó unos leggins color negro y sus zapatillas que siempre llevaba

—¿Te gusta lo que ves?— pregunto ella parándose frente a mi, reaccione y la tomé de la cintura

—Tu belleza es......— no pude terminar la frase ya que ella me beso

—Muero de hambre, vamos a hacer algo para comer— dijo separándose de mi y caminando fuera de la habitación

Me vuelve loco

Pensé y la segui escaleras abajo