Complicaciones

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Scott y Malia aún estaban en camino a Beacon Hills cuando encontraron el Jeep de Stiles a un lado de la carretera y unos metros adelante estaba el chico en el suelo. Ambos bajaron del auto y fueron a ayudarlo, no era muy seguro cuanto tiempo llevaba ahí tirado, el castaño apenas podía moverse su cuerpo estaba entumecido por el frío de la madrugada, ambos lo subieron al auto y encendieron la calefacción. - No podemos dejarlo aquí - Scott comenzó a decir refiriéndose al jeep. - El lo ama - Fue así como malia terminó llevando el auto y Scott el vehículo de stiles pero no habían pensado en Lydia.

- Liam... -La expresión de Theo demostraba demasiado cansancio, el castaño sobre la camilla le miró, este soltó un suspiro y negó con la cabeza.- Tenemos que hablar. -

No importaba quien fuera. No importaba la forma o el tacto que se tuviera al decir aquellas palabras siempre lograrían que alguien se quebrara o que comenzara a preocuparse por la siguiente conversación. -¿Vas a terminar conmigo?- Liam se quedó quieto sintiendo la tension inundando su cuerpo por completo luego de hablar ante la evidente mirada desconcertada de Theo y Nolan.

-¿Que? Por supuesto que no, es de algo diferente.- El mayor volvió a acomodarse junto al beta dedicándole una mirada intensa, entonces Liam miró a Nolan quien se levantó al notar ambas miradas sobre el.

-Nos veremos luego - Fue lo único que dijo antes de salir de la pequeña habitación.

- Hay una cosa que debí decirte hace tiempo... - Hizo una pausa en un intento por pensar en alguna forma coherente de contar que sucedía.-  Unos días en realidad.- Completó la frase luego de unos segundos y finalmente acomodó uno de sus brazos alrededor de los hombros del menor y dejó un beso suave en su sien. - Hace poco desaparecieron un par de cuerpos del cementerio.-

-¿Josh y Tracy?- El beta respondió casi de inmediato pues lo mataba por dentro la curiosidad de conocer el resto de la historia.

-¿Lo sabías?- El castaño sonrió levemente y besó la mejilla del más bajo. -¿Como?- Preguntó sin disimular toda la curiosidad que sentía. En verdad cada vez amaba más a ese chico.

-Dejaste los registros en el escritorio.- Dijo un poco apenado pues la curiosidad había podido más que el. -También Corey comento algo cuando estudiabamos con Mason pero no dijo muchos detalles, solo sabemos que hay algunos otros desaparecidos -Comentó sin darle muchas vueltas a aquel asunto.- Cuatro para ser exacto - Dijo finalmente para luego soltar un suspiro, su expresión se tornó seria. -Brett y Lori sus cuerpos fueron tomados ayer en la tarde y se emitió un boletín de busqueda. Pero no estoy seguro de a quien pertenecen los demas- Su voz se quebró un poco no estaba seguro del propósito del ladrón pero quería detenerlo, podía sentir perfectamente la ira corriendo poder sus venas al pensar en alguien que no tuviera ni un poco de respeto por sus amigos fallecidos.

Theo abrió la boca para volver a hablar mientras su mano acariciaba cuidadosamente el hombro del menor, pero entonces Nolan volvió a entrar. Se veía aterrado, su respiración estaba completamente acelerada. Theo y Liam se levantaron de su lugar de golpe, sólo un salto y ya estaban frente al aterrado oji-azul quien al parecer estaba temblando.

-Es... Est... Está aq... aquí... Josh está aquí- Sólo pudo decir eso antes de escuchar algunos gritos dentro del hospital los jóvenes salieron de la habitación y corrieron en busca de Melissa. Entonces la quimera se cruzó en su camino. -Debiste quedarte muerto- Theo estaba furioso, ahora imaginaba a aquel chico causandole algun daño a Liam y sintió hervir la sangre en sus venas. -Nolan ve por la señora McCall.- Dijo firme para que luego el chico se fuera con toda la prisa que le permitian ambas piernas sin embargo eso era lo que estaban buscando. - "Divide y vencerás" Esa idea cruzó la mente del joven.- Liam ve con el, no tardaré mucho.- El menor hizo caso omiso a Raeken aunque no habría podido irse a ninguna otra parte de todas formas fue entonces que el antiguo compañero de Liam apareció con una mirada asesina, sus ojos color ámbar y sus garras afiladas.

-Brett.- Susurró Liam antes de presionar su espalda con la del mayor estaban rodeados. De cierta forma esa nueva pinta del rubio le intimidaba mucho.

Mientras tanto Stiles había recuperado la conciencia después de un par de horas después de que lo hubiesen encontrado. Se levantó de golpe al tiempo que trataba de tomar el aire suficiente pues el ambiente dentro del vehículo era sofocante debido a la calefacción. -¡¡LYDIA!!-

En algún lugar de Estados Unidos, Lydia Martín estaba siendo transportada por Tracy y Diana, la Banshee no podía hablar, la joven castaña se había adelantado clavando sus garras en el cuello de la chica para dejar que su veneno actuará dentro de la pelirroja solo lo suficiente para inmovilizar las cuerdas vocales y el resto de su cuerpo ella apenas podía escuchar con dificultad la conversación que ambas estaban llevando.

La voz de ese hiperactivo joven sonaba como un eco, devolvió la consciencia a lydia luego de un rato en el que se había rendido ante el cansancio de la pasada injusta pelea sin embargo esta seguía sin poder moverse y mucho menos gritar...

_-S... Sti-les - Apenas podía comenzar a mover sus labios, sin embargo y a pesar de que sólo se trataba de un hilo de voz Tracy y Diana se apresuraron a hacerla callar luego de detener el auto momentáneamente.

-Tendrás que dormir un rato más.- Susurró la rubia antes de golpear a la chica para que esta quedara inconsciente de nuevo. Poco después llegaron a su destino, era Beacon Hills quizás por primera vez se podría cumplir una de las fantasías de Stiles sobre el escondite de un villano, en el sótano de una casa en ruinas en medio del bosque. Quien diría que elegir como escondite la casa Hale era una gran opción algún sitio tan conocido y tan olvidado al mismo tiempo que a simple vista no llamaría la atención de nadie.

Dos hombres ya estaban esperando ahí a que las chicas dejaran a la joven Lydia y acto seguido la encadenaron a uno de los postes de madera que sostenía el suelo de la planta baja de la casa. -Nuestro invitado llegó, deberían ir a ayudarlos - La voz autoritaria de ambos las hizo marcharse de inmediato

- Y bien. ¿Que ha sucedido con Lydia? - Una escena muy familiar, Scott, Malia y Stiles estaban en la veterinaria escuchando a Deaton aún no terminaban de averiguar quién era el secuestrador, mucho menos cuál era el propósito de tener a la Banshee apartada del grupo.

Un golpe seco provocó que Liam golpeara de nuevo contra la pared de concreto, algunas de las descargas que escapaban de las manos de Josh aún alcanzaban a golpear al beta de Scott o al antiguo alfa de las quimeras. Liam y Theo llevaban las de perder, como podían ganar si su contrarios no daban ni una muestra de debilidad o agotamiento, estaban alcanzando el ascensor pero este mismo no se abría debido a que la quimera estaba cortando la corriente. Los ojos de Josh, completamente azules con matices morados, la punta de sus dedos comenzaba a mostrar pequeños reflejos de descargas Liam y Theo frente a la puerta del ascensor, y sus contrarios a una cómoda distancia el beta suspiró lentamente y cerró los ojos para luego sujetar la mano de Theo, no había forma de escapar. -Voy a devolverte el favor de haberme quitado la vida.- La voz de donovan estaba llena de rencor e hizo eco en el amplio pasillo.

- Vete al diablo - Theo escupió de manera ácida frunciendo el seño, se sentía furioso y todo por la culpa que sentía por arrastrar al beta en una venganza que iba hacia el. Finalmente sólo volteó hacia el oji-azul, si tenía que ver algo antes de morir, eso debía ser al joven beta al que temia no volver a ver en cuanto regresara al infierno.

- Lo siento Li. - Susurró lo suficientemente bajo para que solo el beta pudiera escuchar, vio un ultimo asentimiento de parte del menor y cerró los ojos finalmente aceptando lo que fuera a pasar.

¿Que es El Destino? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora