⿻ a day without rain

D i e c i o c h o

Va casi una semana desde que Jinyoung y yo comenzamos a tener una relación amorosa y parece que todo va muy bien. No se han presentado mentiras y no hemos cambiado nuestro comportamiento con el otro, cosa que me alivia ya que era algo que temía. Con respecto a lo del beso, me dijo que me lo había dado mientras dormía una vez y que no pudo evitar las ganas de hacerlo así que así fue. Por poco me molestó pero no tenía caso, era algo de esperarse de Jinyoung y no me iba a poner a pelear con el por algo del pasado. Prefiero que haya sido el y no Kuanlin.

Jinyoung y yo salimos de la escuela después de un largo día de clases y los dos decidimos que iremos a comer a alguna parte.

—Eunsoo— me llama. No contesto pero doy a entender que le pongo atención.

El extiende su mano a modo de propuesta y no dudó en tomarla. Por lo menos he descubierto de que Jinyoung es abierto con los mimos y cariños cuando se trata de una relación, y no me desagrada.

—¿Que se te antoja?— pregunto.

—Cualquier cosa, tengo hambre— suelta indiferente.

—Quiero un wrap— propongo.

—Eso comamos entonces.

Llegamos a una plaza con varios puestos de comida, nos pedimos lo que acordamos antes y nos sentamos en una mesa de ahí mismo.

—Olvidé pedir algo de beber, ahora vuelvo— aviso para ir de nuevo al mostrador del puesto de comida.

Me encargo de pedir un té helado y camino en dirección de regreso hacia Jinyoung. A la mitad, dos chicos se cruzan en mi camino y a uno de ellos se le cae un libro que llevaba en la mano, justo enfrente de mí. No tardo mucho en darme cuenta de que todo fue estrategia para aprovechar que llevo la falda del uniforme de mi escuela y puedo ver la mirada disimulada del chico que se agachó para recoger su libro y mirar por de bajo de mi falda. Me defiendo alejándome de aquél no sin antes insultarle por lo asquerosos que son el y su amigo y después llego a sentarme de nuevo en la mesa con Jinyoung. Lo peor de todo esto no es el hecho de que dos chicos andén por ahí haciéndolo travesuras y yo haya sido una de sus víctimas, si no que Jinyoung lo vió todo y no me ha dicho nada, ni siquiera se esforzó en echarle una mala mirada a aquellos chicos. Quisiera decir que me da igual pero no es así.

Intento terminarme la comida y en el camino de regreso no vengo con muchos ánimos. Le digo a Jinyoung que el se vaya a su departamento, que yo iré a otra parte y él no reclama o hace quejas. Por alguna razón eso me hace enojar.

Me dirijo hacia la casa de Jihoon, a algún lado tengo que ir a desahogarme, además de que no he ido a visitarle, ni el a mi.

Toco la puerta de la casa de Jihoon y el mismo se encarga de abrirla. Lo primero que hago es abrazarlo y recargar mi cabeza en su pecho para relajarme un poco. El nota mi bajo humor y me corresponde el abrazo.

—¿Cómo estás princesa?.

Golpeo su pecho por el modo en que me llamó para después entrar a su casa y sentarme en el sofá.

—Pasó algo..— suelto.

—¿Con Jinyoung?, ¿llevan una semana de novios y ya se pelearon?— se sienta a un lado de mi.

—En realidad no, pero solo pasó algo y no me siento bien con ello.

Me encargo de contarle a detalle cada segundo de la escena de lo que ocurrió hace un rato.

—Oh, ya veo.

—No es que él tenga la culpa pero no puedo evitar sentirme de esta manera— bufo. —y eso que yo pensaba que yo sería la novia menos problemática de mundo.