Shingeki No Kyojin: Lost Frontier (Primera Temporada)

Capitulo 58: Levi

Heimdall ha capturado dos de los tres escuadrones de la humanidad, ahora solo nos restan a Ilse, Falco y Lucy quienes están en la destrucción y las llamas del Distrito asolado por la furia del guardian de Asgard.

No quedan caballos, no queda nada, lo único que resta para la supervivencia de la humanidad son ellos 3, las posibilidades están en contra, pero no deben perder lo ultimo que les queda, la esperanza.

Alejandose al sur, Ilse cargo a Falco mientras que Lucy tomaba la delantera para asegurarse de que no hubiera mas enemigos acechándoles.

Exterior de Trost...

¿Qué hacemos ahora? – Pregunto una Ilse con mucho miedo, dejando a Falco apoyado en las frías paredes del Muro que constrastaban a las llamas del interior.

Con Falco inconsciente, Ilse estaba asustada, no sabia que hacer y todos fueron capturados, aun asi Lucy mantenía la calma absoluta, en su mente solo sufría porque la habían alejado de Adel, quería ir a rescatarla a ella y a todos los demás.

Escuche que iran a Karanese, eso esta a nuestro este, donde está la manada de titanes, ire a dentro a buscar algo que nos sirva de utilidad, esperad aquí, ¿tienes bengalas? – Tomando Lucy el liderazgo

Lucy se adentro en el distrito, no tenia mucho tiempo intentaba buscar algo de utilidad, pero una presencia lejana captaba su atención, podia sentirlo, no era como los titanes...

Aquel que observaba desde la lejania, un peligro para la humanidad y un ser que no se podia definir, con la complejidad y la vaga imagen de un humano cubierto de ropas oscuras, además de que ocultaba su rostro con mascaras, en esta ocasión cubria su rostro con vendajes negros, solo dejaba exponer su ojo que brillaba con una luz dorada, propia de la armadura fragmentada.

Has hecho muy bien en ocultarte de Heimdall – Lucy sintió escalofrios con solo escuchar aquella voz, le basto oírla una vez para observar donde se hallaba.

El Distrito Trost tenia un singular y gran edificio cerca de su centro, uno utilizado anteriormente por los humanos, era un gran deposito lleno de recursos militares para los soldados, Lucy utilizando su equipo tridimensional personalizado subio hasta la cima, donde pudo ver la silueta de alguien en el otro lado del tejado de espaldas.

El sujeto que se hallaba al otro lado del tejado, solo portaba una gran tunica negra, toda su cabeza quedaba cubierta por la capucha, solo se exponía su ojo, el resto estaba cubierto con vendas negras en su rostro y su boca era tapada con la parte superior de su tunica, sus manos ocultas con guantes negros, además de portar botas totalmente teñidas de las propias tinieblas, era demasiado negro para un ojo que brillaba con tanta intensidad.

¿Quién eres? – Lucy pregunto al misterioso sujeto

Esa pregunta puede tener muchos significados... ¿mi nombre? ¿Quién soy? Nada de eso importa, la historia puede ser cambiada las veces que se quiera – La voz se sentía de un hombre, muy grave pero propia de un humano.

Tu perteneces a ellos, todo lo que siento en ti no es nada bueno – Lucy dio unos pasos adelante tras decirle lo que pensaba

¿Buenos y malos? Eso solo es relativo a lo que te educaron, cuando viajas por los distintos mundos y comprendes acerca de ellos, te das cuenta de que lo demás es infimo, la vida y la muerte... ¿Qué te consideras que eres? Tu eres Lucy Ackerman, aunque estabas atada a servir a las Facciones, ¿Por qué nos traicionaste? – Le pregunto el hombre misterioso a Lucy quien no dudaba y tenia a Adel en sus pensamientos