Twice-One Shots.

25.3 Jeongsa (Especial 2019)

Un mes después.

A Sana ya no le molestaba ir a la oficina, pues Jeongyeon era fría y sin sentimientos y a sana le gustaba verla sonreír ya que era muy extraño que eso suceda, se divertía molestandola a ratos, pero solo cuando la mayor No se enojaba, aveces Jeongyeon intimidaba a Sana poniéndose sumamente cerca de su rostro, la mente adolescente de sana no sabia que pensar con respecto a ello, pues sentía ganas de seguir viendo aquella peculiar penetrante mirada que se posaba en ella cuando Jeongyeon la miraba fijamente, pero a la vez estaba confundida con respecto a ese tema.

-Entonces, tu jefa no es tan mala después de todo....-preguntó Tzuyu bebiendo un sorbo de su juguito de caja.

-Hum...Es bastante peculiar...-dijo alzando los hombros.

-¿Cómo?-preguntó la menor.

Sana no respondía, solo veía su teléfono.

-Debo irme Bebé, ¿A donde irás tu?-dijo cambiando de tema.

-Saldré con Jihyo unnie- dijo sonriendo.

-Uy...¿Otra vez?, No le quito más tiempo señorita Park...-dijo burlándose de su mejor amiga.

-¡Ya!-se quejó Tzuyu fingiendo enojo.

-Me tengo ir, la señorita Yoo me Está esperando afuera.-sonrió.

Tzuyu puso una expresión burlona, sana lo notó y rodó los ojos.

La japonesa corrió hacia afuera, pues sabía que la señorita Yoo se enojaba si se demoraba, no era la primera vez que la recogía de la escuela.

-¡Buenas tardes señorita Yoo!-exclamó alegre.

-Hola Sana- dijo observándola, miraba sus delgadas piernas con descaro y luego subía la vista a sus rosados y pequeños labios, que pedían a gritos ser comidos.

Jeongyeon tragó en seco pensando aquello.

Sana se sentó finalmente y sonrió, como casi siempre jeongyeon no hablaba sólo la miraba a ratos.

Pasaron unos veinte minutos y ambas jóvenes llegaron a aquella oficina, sana había estado de mal humor desde que empezó a revisar su teléfono y ver mensajes de su padre diciéndole cosas acerca de una nota que le llegó de la escuela, la joven japonesa entró en un estado de molestia completo.

-Sana, ven aquí-dijo jeonyeon solicitando la ayuda de la más pequeña.

Sana por primera vez desde que trabaja allí, no hizo caso.

-Sana, ven-dijo en un tono frío y cortante.

Sana estaba metida en su enojo, cualquier cosa que le digan podría molestarle.

-¿¡QUE?!-contestó gritando.

Jeongyeon transformó sus ojos a unos llenos de ira, parándose de su gran silla y acercándose a la más pequeña en unos pasos duros, marcados y sumamente fuertes. Sana reaccionó, se había dado cuenta de lo que había hecho, había desobedecido a su jefa, quien lo que más admiraba de sana era su obediencia y además le había alzado la voz.

Jeongyeon se acercó muchísimo a sana, la menor recordaba haber estado muy cerca de la mayor, pues a esta le gustaba hacer eso, pero esta vez sintió algo distinto, la mirada era mas fuerte, más intimidante...

-S-señorita Yoo...-dijo sana nerviosa al tener a la mayor lo suficientemente cerca.

-Haz silencio...-dijo de manera fría, muy cerca de  los labios de la japonesa.

Sana sintió un temblor recorrer todo su cuerpo. Jeongyeon pasó uno de sus dedos por las salidas claviculas de sana, subiendo aquel dedo por su blanco y limpio cuello, causando un pequeño jadeo por parte de la menor.

-¿Quien mierda te A dado permiso para hacer ruido?-dijo Jeongyeon enojada.

Sana tragó en seco, tratando de contenerse. Jeongyeon lo notó.

-No te libraras tan fácilmente...-dijo mientras la acorralaba cada vez más.

(...)

Las horas pasaban, Jeongyeon mantenía un semblante de enojo y de deseo, sana sentía miedo de alguna manera.

-Vendrás a mi casa-dijo con autoridad.

Sana asintió. No quería negarle nada a Jeongyeon.

(...)

-Sube.-ordenó la mayor abstendrán la puerta del auto.

Sana no sabia que pasaría, no tenia idea.

La mayor prendió un cigarro, se lo colocó en la boca y empezó a aspirar el tabaco. Sana parecía estar acostumbrada, pues no se quejó del olor de aquella sustancia. Jeongyeon  la observó pensativa.

Durante el camino hacia la casa de la mayor, ninguna habló, sana era un manojo de nervios y de confusiones, por su cabeza pasaban Muchas cosas, mientras que jeongyeon seguía enfocada en el mal comportamiento de Sana hoy por la tarde.

Ambas jóvenes llegaron, jeongyeon se estacionó y le ordenó a sana que baje. La menor obedeció y siguió a la mayor.

La coreana abrió la puerta de su gran apartamento dejando ver todos los lujos que poseía, Sana amaba ese tipo de decoraciones, le gustaba el estilo que tenia la mayor para decorar su casa, se veía entre oscuro y elegante.

Jeongyeon retiro sus altos tacos y sana retiro sus zapatos negros de colegio, la menor caminó tímidamente hacia adentrándose al apartamento, jeongyeon seguía de frente sin hablarle y sin mirarla.

La mayor se acercó a la gran cocina y tomó una fina copa para ponerle un caro vino en el interior de esta. Sana la observó y por alguna extraña razón sonrió.

-Sana, pasa a mi habitación, espera allí.-dijo en un tono cortante.

(...)

Jeongyeon volvió y se sentó al lado de sana.

-¿Por qué mierda me desobedeciste?-preguntó acercándose mucho a ella.

Sana no contestó, simplemente tragó en seco.

-No me gusta que me des obedezcan, ni que me respondan mal ¿Entendido?

-S-s-si s-señorita Y-yoo...-respondió nerviosa.

-¿Cómo?, no te escuche...-dice rechiabndo los dientes mientras coloca uno de sus dedos sobre el mentón de la más joven.

-S-s-si s-señorita Y-yoo...

-Mommy...-dijo la mayor poniendo a sana contra la cama.

-¿A-ah..?-preguntó sana confundida.

-Así me llamaras cada vez que estemos tu y yo a solas...-dijo susurrando contra los labios de la menor.

-¿M-mommy?

-Así es Baby.

Dije que esto acababa a los 5 capítulos, bueno ignoren eso, creo que serán unos Tres o cuatro capítulos más, porque adivinen quien siempre termina exoalayandose más de la cuenta 🤣❤, bueno nada, gracias por leer se viene lo bueno 💓