Twice-One Shots.

37.2 Michaeng

Las jóvenes en clase de Inglés, mientras coordinaban la salida de esta noche por el regreso de Chaeyoung. Mina se mantenía sin opinar, igual sabia que no iría, sus padres no la dejarían ir a una fiesta de adolescentes jamás en la vida.

Chaeyoung hablaba entusiasmada sobre la fiesta, pero había algo sumamente extraño entre ambas, intercambiaban demasiadas miradas, a cada rato.

-Puede ser en mi casa, lleven a toda la gente que quieran, mis padres no están, se fueron a Japón durante dos semanas.-dijo Momo.

-Perfecto, entonces hoy en la casa de Momo a las 10 p.m., nos vemos chicas...-dijo Nayeon escuchando el timbre de salida y tomando su mochila. Acto que todas repitieron.

Mina bajó la cabeza, realmente quería ir, quería pasar tiempo con chaeyoung, le llamaba mucho la atención, quería divertirse, quería salir como una adolescente de su edad. Pero era obvio, que rayos le iba a dar permiso.

Chaeyoung se acercó a Mina, quien cabizbaja apostaba sus cosas para irse, miró la pantalla de su celular, en tres minutos su madre la llamaría, 2:30 en punto la llamaba para decirle que estaba en al puerta de la escuela, esperándola para ir de vuelta a casa y cumplir con la cansada y agotadora rutina.

-Hey-dijo Chaeyoung llamando la atención de Mina.

-H-hola-dijo Mina mirándola y topandose con su imponente rostro, el cual se veía totalmente decorado con piercings.

-Irás hoy¿Cierto?-preguntó Chaeyoung.

Mina no sabía cómo rayos decirle que no, de verdad quería ir, pero bajo ningún punto de vista la dejarían. No la deja pegar imágenes de cualquier cosa en ma pared de su habitación a no ser que sean estampas de Jesús y la dejarían salir un día de semana a una fiesta de "Adolescentes agrandados", ni loca.

-N-no lo creo...-dijo en voz baja.

Chaeyoung se acercó más a ella y la miró confundida.

-¿Porque lo dices?-preguntó.

-Debo cuidar a mi hermanita menor-mintió, bueno en realidad en cierta parte era verdad, odiaba dejar a Tzuyu sola con sus padres.

-Que venga contigo-rió Chaeyoung.

Mina la miró asombrada, ¿Hablaba en serio?, esta chica no le tenía miedo a nada, vivía bajo mil riesgos.

-Tiene doce años-dijo mina algo seria.

-Ja, yo a los doce años ya tenía una perforación en la lengua-rió.

Mina la observó.

-¡CHAEYOUNG!, ¡MINA! ¡AYUDA!-gritó Nayeon entrando al salón del cual Mina y Chaeyoung aún no salían.

-¿¡Que pasa?!-preguntó Chaeyoung asustada.

-¡SANA SE ACABA DE LASTIMAR! ¡VENGAN A AYUDAR!-dijo Nayeon muy exaltada.

-¡¿Lastimar?!, ¿¡Como!?-gritó Chaeyoung mientras avanzaba junto a Mina hacia afuera, donde supuestamente estaría Sana.

-Estabamos caminando, ella desde la mañana le mencionó a Momo que se sentía mal, que le dolía la cabeza y se sentía débil, momo le dijo que irían a dormir a casa en un par de horas, estábamos caminando al auto de mi hermana para que las lleve a amanas a casa y un grupo de tipos pasaron corriendo y empujaron a Sana quien cayó al suelo torciendose el tobillo, muy aparte de que ya estaba bastante débil, creo que iremos al hospital...-dijo Nayeon preocupada.

-V-vamos a ayudar...-dijo Chaeyoung algo nerviosa mientras caminaba a paso rápido junto con sus dos otras amigas.

Mina se encontraba nerviosa, en menos de cinco minutos sus padres la llamarían diciendo que ya están afuera de la escuela esperándola. La japonesa se detuvo, Chaeyoung volteó a verla.