Twice-One Shots.

Especial 2020 parte 5

Tzuyu tenía la boca con algo de miel en ella debido a los panqueques que había ordenado.

-Acercate...-pidió Nayeon riéndose.

Tzuyu se acercó con una sonrisa, Nayeon tomó una servilleta y limpió la boca de la menor.

-¡Unnie!-se quejó.

-¡No es mi culpa que te embarres toda la cara con miel, pareces de seis años!-rió la mayor burlándose.

(...)

Ambas estaban caminando bajo el frío de la cuidad, contándose cosas sobre sus vidas, Tzuyu se reía de lo que Nayeon decía, pasaban un buen rato juntas.

(...)

Sana estaba llorando mientras Momo trataba de levantar la camiseta de la menor y ver que tenía allí.

-A-ah...duele..-lloró.

-Dejame ver, Sana por favor...-rogó.

Sana finalmente le dio pase a Momo. La mayor levantó la camiseta de la menor y logró ver una herida abierta, acompañada de varios moretones en la parte derecha de su abdomen, cicatrices de golpes mal curados, marcas en todos lados, pero había una herida más grande que las demás, herida la cual sangraba mucho y hacía doler a Sana.

-¡¿Q-que demonios?! ¡S-sana!-gritó Momo alterada mirándola con desesperación.

Sana cerró los ojos con fuerza, Momo debía detener la sangre de la herida.

-E-esto dolerá un poco Sana..., solo un poco bebé...-dijo Momo mirándola.

Sana asintió con los ojos entre cerrados y con lágrimas en estos.

Momo tragó en seco y colocó su mano encima de la herida, había oído a Nayeon hablar de que cada vez que tengas una herida abierta, lo mejor es ponerle presión hasta que pare de sangrar y de ahí limpiarla y eso fue lo que hizo Momo, tapó la herida con fuerza.

-¡A-ah...a-auch..!-lloró.

-Y-ya...ya pasará...-dijo Momo mirándola con tristeza en los ojos.

-M-momoring...-lloró nuevamente.

-Sanita, ya va pasar...pasará...-dijo Momo separando su mano de la piel de Sana y viendo una macha de sangre.

-Recuéstate, vamos Bebé, échate...-dijo Momo sujetandole el brazo y ayudándola a echarse sobre la cama.

-Vamos..., quédate allí, voy a limpiar la herida...-dijo Momo asegurándose de que Sana ya esté echada en su cama.

(...)

-Debo irme unnie, tengo tarea...-dijo Tzuyu apenada. La verdad es que no quería irse, la había estado pasando muy bien con Nayeon.

-De acuerdo pequeña, te acompaño a casa...-dijo sonriendole.

Mientras caminaban hacia allá, Nayeon tuvo el tiempo suficiente como para observar el rostro de Tzuyu detalladamente. Pudo notar ciertas marcas de los golpes que había recibido el fin de semana.

-¿Como van esos golpes cariño?-preguntó acariciando la mejilla contraria.

-B-bien unnie, realmente ya no duelen..-dijo sonriendo tiernamente.

-Perfecto, la fiebre...a ver ven aquí...

Tzuyu se acercó a Nayeon quien acto seguido colocó una de sus manos en la frente de la pequeña.

-Pues, felizmente ya no tienes fiebre...

-Nop, ya no-dijo

-Oye y...el, ¿No a vuelto a aparecer?  ¿Se te ha vuelto a acercar?-preguntó cambiando su tono de voz. De uno normal a uno serio.