Paint my Heart ⇨ J.Jk (Completa)

Cinquante

La semana laboral había comenzado nuevamente. La situación aun no cambiaba, pues Jungkook aun no había encontrado la oportunidad de hablar con Anyca y su angustia incrementaba con el pasar de los días. Tal como la rutina exigía, las estilistas del grupo se encontraban en los camerinos, esperando a que los idols ingresaran para ser arreglados. La única que aun no llegaba era Hye, pues no era una preocupación para ella llegar en horario. Bangtan recorría por separado el edificio completo, cada uno buscando las cosas necesarias para la grabación de un nuevo video. RM caminó por los amplios pasillos que integraban el tercer piso, en busca de su bolso el cual había creído dejar en la sala de reuniones. Impulsó todo su cuerpo al sostener la perilla de la puerta con la intención de abrirla, pero rápidamente voces en el interior de aquella habitación le hicieron frenar en seco. Sabía que no era correcto escuchar conversaciones ajenas tras la puerta, pero oyó la voz de Yoongi, así que supuso que nada malo saldría de allí, seguramente era Min quejándose de su falta de descanso o peor aun, de su falta de tiempo a solas para trabajar.

"¡Cierra la boca!" Reconoció aquella chillona voz enseguida, se trataba de Hye. "¡¿No eres feliz ahora?! ¡Lo tienes todo! ¡Lo tenemos todo!"

"No comprendes Hye. Ya no quiero ser parte de esto. Deja de presionar a Jungkook. Nuestra amistad se ha ido al diablo por tus extorsiones. Ya soy feliz, eso es verdad, estoy con Anyca, pero mi amigo está sufriendo." Namjoon entre abrió los labios sorprendido.

"Eres un estúpido. ¿Porqué me detendría ahora? Finalmente Jungkook y esa zorra están separados. Él es todo mío, y gracias a esa foto lo tengo a mi merced. Tal como siempre quise. ¡Jamás acabará esto!"

"¡No hables así de ella!"

"Oh... es verdad que estás enamorado de ella." Carcajeó. "Eres un pobre ingenuo si crees que ella realmente te ama Min. De lo contrario, ¿Porqué crees que habría aceptado hacer este trato contigo? Era para que tú me ayudases a alejarlos, pero aun queriéndose."

"¿De qué hablas? Anyca lo está olvidando, está conmigo, me quiere."

"Eso es lo que todos querían que tú creyeras, estúpido. Anyca sigue enloquecida con Jungkook. Es por eso que lo hago, es por eso que disfruto tanto esto. ¿Aun no lo comprendes? Quiero verla a ella sufrir, morirse de amor y retorcerse de dolor al verme con el amor de su vida. ¡Es todo lo que necesito! ¡Ella debe pagar!"

"¡De que hablas! ¡¿Pagar por qué?!" Los gritos de Min se intensificaron y Namjoon pegó un respingo detrás de la puerta.

"¡No es de tu incumbencia Min Yoon Gi! ¡Simplemente debe pagar por los errores de su jodida familia!" El líder arrugó el entrecejo sin comprender de qué estaba hablando aquella mujer, y suponía que su amigo también lo habría hecho dentro de aquella habitación.

"¿Estás diciendo que todo fue un juego para ti? ¿Que simplemente me ultilizaste como carnada para conseguir lo que querías?"

"Eres muy inteligente." Contestó la asiática con cierto tono de sarcasmo. "Ahora, sigue mintiendo, sigue fingiendo que ella te ama y sé feliz. Todos sabemos que ella seguirá enloquecida por Jungkook. No importa cuántos besos le des, cuántas palabras le digas ni mucho menos cuánto la abraces. Ella siempre extrañará a otro, acéptalo."

Se oyó un fuerte estruendo y en ese instante Namjoon dudó si realmente quedarse allí de pie o ingresar, pues temía que su amigo se hubiese puesto agresivo. Así era Min, cuando le clavaban la espina donde más le dolía, peor era su reacción.

"¡Vete a la mier*da Hye! ¡Púdrete!" Rugió y sus pisadas se hicieron aun más imponentes y comenzaron a acercarse a la salida. Nam entonces, en un ágil movimiento, ingresó a la habitación de al lado y cerró la puerta. Respiró agitado y esperó a que el otro se alejara de los pasillos para suspirar.

Efectivamente lo que acababa de escuchar no sólo era muy grave, sino que debía ser comunicado a Jungkook, o al menos eso creía correcto. Kim tomó su celular y marcó a su compañero, quien instantáneamente contestó.

"¿Nam?"

"Jungkook, escucha, tengo algo importante que decirte, por favor, encontrémonos en el cuarto piso, allí está la habitación de limpieza."

"P-pero, hyung, ¿porqué susurras? ¿y porqué quieres ir al cuarto de limpieza?"

"¡Sólo hazlo! Nos vemos allí en diez minutos." Namjoon colgó y rápidamente se movió sigilosamente hacia el elevador.

Jungkook hizo exactamente lo mismo pero desde el sexto piso, con el objetivo de averiguar qué estaba sucediendo. Cuando las puertas del elevador se abrieron, su corazón se contrajo de golpe al ver a Hye dentro de él, con una amplia sonrisa en su rostro. "Hola corazón." Habló con cierta alegría en su rostro, acercando su cuerpo al del idol. "¿Dónde vas? Ya casi es hora de la grabación. No querrás llegar tarde, ¿o sí?" Habló en tono seductor intimidando al maknae.

Jeon se detuvo a pensar por unos segundos. Si Namjoon quería verlo en privado, efectivamente se trataría del tema que tanto lo aflige. Hye no debía saber nada de ello, pues lo amenazó con el objetivo de que no abriera la boca y ya lo había hecho con Kim.

Tragó duro. "N-no, es que olvidé mi teléfono en una de las salas. Enseguida estaré en los camarines para que terminen de arreglarme." Habló rápido e inseguro.

"Oh... está bien bebé. Te esperaré aquí entonces." Se alejó levemente dando paso al chico para que ingresara al elevador.

Sin más que decir el chico presionó el botón que lo dirigiría al cuarto piso y las puertas del elevador se cerraron. Hye instantáneamente deformó su sonrisa al no ver más a Jeon y entrecerró los ojos buscando ver dentro de los camerinos el teléfono del idol. Pues estaba allí, apoyado en una de las mesas que integraban el juego de sofás. Ella no era estúpida, sabía que si Jeon mentía era por algo. Se apresuró a llamar al otro elevador y se dirigió súbitamente al mismo piso que el idol.

"Por fin estás aquí." Namjoon suspiró aliviado al ver a su amigo aparecer tras la puerta de aquella habitación de servicio.

"¿Qué está sucediendo?"

"Esto es peor de lo que creí, Jungkook. Hye está controlando todo, incluso a Yoongi."

El más joven arrugó los ojos. "¿De qué hablas?"

"Los escuché hablar a solas. Estaban discutiendo, Yoongi es cómplice de todo esto." Namjoon se apresuró a explicar.

Jeon apretó la mandíbula y amplió los ojos. "¡Lo sabía!" Jadeó frustrado. "Ese mal*dito ba*stardo, le romperé la cara." Cerró sus manos en forma de puño.

"Espera Jungkook. Él está arrepentido, no quiso que todo esto llegara tan lejos. Necesito que actúes con calma." Sujetó el hombro de su amigo.

El maknae dejó soltar un suspiro e intentó calmar su ira. "Está bien."

"Hay algo más. Hye está ensañada con Anyca por un motivo. Aun no sé cuál es, pero parece que se trata de una venganza contra su familia."

"Dia*blos." Jeon agarró sus cabellos con nervios. "Era eso lo que no se atrevía a decir. Debemos descubrir qué es."

"Estoy de acuerdo. ¿Qué harás con Yoongi?"

El chico suspiró. "Sé que talvez no logre que Anyca me vuelva a amar." Sus labios temblaron levemente. "Pero no quiero que sea engañada, no quiero que viva en una mentira, que no sepa el motivo de mi alejamiento, que no sepa que Yoongi estaba en todo esto. Sé que él es mi amigo, compañero desde que soy pequeño, pero se equivocó, y no quiero que lo vuelva a hacer con ella. No con Anyca."

"Talvez estés haciendo lo correcto Jungkook. Independientemente de que yo pueda darte consejos, tú harás lo que crees mejor. Así que hazlo, necesitas liberar esto."

"Lo haré hyung... gracias por todo."

"Nadie hará nada aquí. ¿Queda claro?" La voz chillona de la persona que menos querían ver se hizo presente en la habitación.

Jungkook y Namjoon voltearon asustados hacia la puerta y la observaron recostada sobre el marco de ella, de brazos cruzados y con una amplia sonrisa en su rostro.

"Otra vez tú."