Señorita Blanchett

Primer dia

Emy

Me levante a las 7 de la mañana después de mucho tiempo sin hacerlo, me costo un mundo levantarme de la cama, pues hoy comenzaba mi primer día de instituto.

Era emocionante pues al fin estudiaría algo que me gusta, artes. Mi sonrisa no podía ser apagada por nada en absoluto, este año sería mío.

Me metí a la ducha y me bañe lo más rápido posible y corrí a mi habitación a ponerme ropa.
¿Como tengo que llegar a mi primer día? ¿Bonita o no demasiado? Que difícil escoger, si tan solo tuviera a alguien aquí para aconsejarme.

Aunque era un alivio vivir sola ahora, no tendría que escuchar a mis padres pelear como siempre, y menos al tonto de mi hermano que siempre se las pasaba gritando de aquí a allá parecía un idiota, bueno será porque tiene solo dos añitos jajaj.

Decidí ponerle un suéter rojo y un jeans negro algo cómodo pero desapercibido.

Luego pase a la cocina para hacerme un pan con lo que hubiera en la nevera.
Mejor hago dos, uno para ahora y otro para la tarde. Los metí en la mochila y busqué mi llave.

Cuando el teléfono sonó

-Hola?

-Hola hija ¿como estas? ¿Emocionada con tu primer día?-chillaba mi madre

-Si y no, tengo un poco de nervios ya sabes...

-tranquila hija te ira bien, te apuesto que llegarás a matar, un chico guapo caerá redondo por ti.

Suspire

-Mamá ire a estudiar no a coquetear...

-Ay, hija siempre tan correcta, mira espero que estés saliendo con un vestido y un pinta labios bien bonito.

-porsupuesto - respondí mientras veía mis jeans negros- asi mismo - mamá me tengo que ir luego te llamo...

-pero hija...- la escuche antes de colgar.

Mi madre, era una mujer muy femenina y quería que yo también lo fuera pero no me gustaba ponerle ropa que me hacía sentir incómoda. Estaba en campaña para encontrarme novio porque si no la gente "comenzaría a hablar" pfff una mierda

Llegue al instituto un poco tarde por esa charla con mi madre, corrí por los pasillos hasta llegar al salón.

Abrí la puerta de golpe y entré sin darme cuenta que ya había comenzado la clase de dibujo .

-¿señorita?- una voz suave hablo

Levante la cabeza y vi que la maestra ya estaba sentada en el escritorio y me miraba con enojo.

-¿estas son horas de llegar?- pregunto

-Lo siento, no volverá a ocurrir- respondí con nerviosismo mientras la miraba.

Al verla sentí una punzada en el estomago no sé porque, pero me enrojecí al instante.
Debe ser la situación, pues todos me miraban.

-tome asiento

Camine con rapidez a mi puesto junto a un chico moreno.