La mano de Cate bajaba por el vientre de Emy, un escalofríos recorrió el cuerpo de la jovencita
-Nunca me aburriré de cómo me haces sentir- murmuro Emy en el oído de Cate
La otra mano de Cate se posicionó en su pecho apretándolo suavemente y jugueteando con el pezon ya erguido
-Y yo nunca me aburriré de hacerte sentir así- le respondió Cate sonriendo orgullosa
La mano bajo hasta su entrepierna en donde dio pequeños golpecitos en el timbre de Emy
-Oh....-murmuro- alguien necesita cambiar su ropa interior, estas empapada
Emy se ruborizó
-es tu culpa, tu me tienes así-dijo Emy
Cate que se encontraba sobre Emy, comenzó a retroceder hasta quedar a la altura de su centro y con su lengua comenzó lamer por sobre la tela
Emy aguantó la respiración
Los dedos masajeaban los labios exteriores con delicadeza, quería estar segura de que Emy estaba lista
Emy comenzó a soltar gemidos y suspiros
La bebe comenzó a llorar
Emy frustrada miró a Cate
Ambas mujeres tenían tiempo sin disfrutar como corresponde un momento a solas
Bienvenidas a la maternidad
De igual forma se tenían que levantar ya, la audiencia con el tribunal para actualizar la situación con John era hoy y tenían que viajar un par de horas hacia la ciudad de vuelta
Ya ambas vestidas y con la bebe sentada en el asiento protegido comenzaron su viaje
Ya había pasado un mes desde lo sucedido y las cosas iban bastante bien, no habían visto a John y Óscar junto con Holland venían a verlas con frecuencia
Emy estaba cansada, esto de la maternidad compartida la agotaba, era una mujer floja que necesitaba dormir minimo 8 horas al dias a diferencia de Cate que siempre se estaba desvelando con gusto
Se acomodó en su lugar luego de cambiar la radio y comenzó a caer rendida en los brazos de morfeo
Luego de un no tan largo viaje Emy despertó con un beso de Cate en la frente
-ya llegamos querida- le sonrió
Emy observó a través de la ventana la ciudad, hacia un tiempo que no venian, basicamente porque no había nada que ella extrañara de este lugar
La bebe había despertado y pedía por comida
-¿puedes darle el biberón?-le preguntó Cate mientras mantenía su mirada en el camino.
-Claro- murmuro Emy buscándolo en el bolso
Tomó el biberón, la leche aun estaba un poco tibia y se lo entregó a la bebe que con facilidad lo agarró
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Señorita Blanchett
أدب الهواةCate una profesora del instituto de artes conoce a una de sus alumnas Emy Williams de tan solo 19 años. Comienzan a echarse unas miradas hasta que ambas se dan cuenta que sienten atracción pero la vida no es simple, tendrán que enfrentar muchos pro...