NADIE COMO TU

CAPITULO 62 P1 T2

Narra Aleric

Entro a la habitación de mi madre, el cambio de hospital le ha venido bien a mi madre, su estado ha mejorado. Una de las enfermeras está leyendo un libro, al cual mi madre escucha atenta hasta que nota mi presencia.

-Aleric, llegas tarde- dice mamá, me acerco hacia ella, tomo la silla para poder sentarme y quedar a su lado

-Seguimos mañana, si le parece- dice la enfermera, cerrando el libro, es la primera enfermera joven que está con mi madre y parece inyectarle energía.

-Claro Any, gracias- dice mamá, esperó a que la enfermera salga de la habitación para contestar a mi madre

-He pasado a casa para ducharme- explico- ¿Cómo estas?- pregunto

-Bien cielo- responde, aunque siempre dice que lo está cuando no es así, mamá es muy fuerte o al menos trata de hacerlo- Tu padre recién se ha ido- dice sonriendo, no puedo sentir rabia, "papá" solo le brinda unas horas a mi madre y para ella es suficiente, pero mi madre merece mucho más y con tan poco se conforma.

-Que bien- respondo, mamá sabe que desde que supe la verdad, todo lo que respecte a mi padre no tiene la misma importancia. Somos su segunda opción si no es que la última y da más rabia que a mi madre no le importe eso.

-Ale, tu padre es bueno- dice mamá

-No hablemos de eso, cuéntame ¿Cómo estuvo tu día?- pregunto para cambiar de tema, mamá suspira resignada y comienza a platicarme, chequeos médicos, valoraciones, comida nada rica, son los temas que abunda mi madre.

La noche comienza a caer, mamá queda dormida apenas la enfermera le da sus medicamentos. Camino hacia el sofá para poder recostarme, ventajas de un hospital privado, en cambio en el anterior solo una silla fría y dura tenía para poder "dormir". Observo la habitación, es amplia, incluso tiene un televisor, un sillón más pequeño en la esquina de la habitación. Extraño dormir en mi cama, desde que mamá fue detectada con cáncer, han sido muchas altas y bajas en su estabilidad que la tranquilidad que antes teníamos desapareció, el cáncer no fue detectado a tiempo y le causa mucho dolor y debilidad por las quimioterapias.

Aun no encuentro las palabras para correctas para decirle a mamá que tuve que dejar la escuela, que su sueño de que fuera un profesionista se ha ido a la basura. "Mi padre" dejó de darnos dinero hace un par de años atrás así que mamá era quien sustentaba la casa, nunca permitió que trabajara pero ahora es necesidad.

No quería que mi odio creciera hacia papá, tenía demasiado coraje, ver a mi madre llorar y no poder encontrar una solución a nuestra estabilidad económica y saber que tenia otra familia la cual no sufría nada de lo que nosotros estamos pasando.

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Narra Maia

Acomodo mi cabello en una coleta alta para después enrollar el resto de cabello alrededor de la liga. Estoy emocionada por volver a las clases de ballet, es algo que amo hacer, todo es mejor cuando la música me invade y cada movimiento es una sensación inexplicable, única. Tomo mi maleta con todo lo necesario, bajo hacia el living, papá está sentado en el sofa.

-Vamo Mai- dice apenas me ve, asiento

Subimos a su coche, papá se ha ofrecido a llevarme a la clase y he aceptado ya que queda de paso a la empresa.

- Me alegro que retomes las clases- dice

-Si, me emociona mucho volver, lo extrañaba- respondo

-Ojala Emily pensara lo mismo

Por una extraña razón Emily decidió dejar las clases y es algo que tampoco me agrada, ya que estaba acostumbrada a ir juntas, era algo que nos unía más.