☆ Cuerpo a Cuerpo ☆

Capitulo 3

Málaga

En que momento había ocurrido, tenía que ser un sueño, no era posible que aquello estuviera pasando.
Aquella niña me había llamado Daniela, debía de ser así como me llamo ahora, pero.. Si yo estoy en su cuerpo, ella estaría en el mío?.. Aquello me parecía tan absurdo, esto no podía ser real, me negaba a admitir que esto fuera real.. seguro en unas horas me despertarla y yo volvería a levantarme en mi cama rodeada de mi zoo..

-¿Que te sucede?, ¿Por qué gritaba?.-Aquella chica volvió a hablar.

-Perdona.. Pero quien eres tú?.- Le pregunté mirándola está vez mejor con más claridad, ya lograba ver todo mejor, sin aquel punto borroso de hace unos minutos.

-Estas hablando enserio?.- Se echo a reír nada más escuchar mi pregunta.

- Que?, que pasa?, que he dicho que sea tan gracioso?.- La llene de preguntas.

-Haber Daniela, enserio que te dio anoche Danna de beber por que estas hoy...

-Danna?, quien es Danna?. Quien eres tú?..

-Nada que hoy estas con gana de cachondeo o que?.- Se volvió a reír mientras me dejaba de nuevo sola en el baño.-Que quien soy yo dice.-Se escuchaba como se iba riendo de mi a lo lejos.

Tan difícil era explicarme que quien era?, volví de nuevo junto al lavabo para volver a echarme agua fría a la cara, despejarse era lo que debia de hacer ahora.
Volví a mirarme atentamente al espejo nuevamente antes de salir, tocándome la cara, como es posible que esto no fuera un sueño, me dolía los pequeños pellizcos que me daba, no era inmune al dolor, no estaba durmiendo, estaba despierta .. vivía en el cuerpo de otra persona.. ahora era una persona normal....No era famosa..
Me senté en la cama observando el cuarto de punta a punta, mientras seguía pensando en mi cabeza. No podía ser posible que lo que murmurar ayer se hubiese echo realidad, ahora era invisible, totalmente invisible para la multitud, aquella que me daba vida, pero también era invisible para aquellas personas que me seguían día tras días para observar mi vida con lupa, lo que aún no podía creerme y es lo primero que se me vino a la mente, ahora sería invisible para el...

-Dios..Malú..que coño has echo... como puedes tener esta capacidad de meterte en estos líos.. - Me tape la cara con las manos miemtras suspiraba.-Debo arreglar esto.. Pero como..

Mi mente voló rápidamente a aquel momento sentada en uno de los sillones de una de las planta del medio de cadena dial, cuando aquel señor mayor junto a su perro me tocaba el hombro miemtras susurraba "No desearias esos en realidad".

Tenía que encontrarlo, sea como sea, pero para aquello debi a encontrar mi cuerpo, y supongo que a Daniela.. para que me contará como ella llegó hasta allí.. de la misma manera que yo llegue hasta aquí..
Me levanté de la cama, debi a de vestirme, no iba a quedarme en pijama todo el día lamentándome por lo ocurrido, disfrutaría un poco de este poder de invisibilidad que me habían regalado, o que yo había pedido sin querer.
Abrí el armario, llevándose las manos a la cabeza, como podía tener tanta ropa en un espacio tan reducido.. Si yo tenía uno enorme.. busque algo con lo que yo me sintiera comida, y me empecé a vestir, no entendía cono está chica tenía ropa tan bonita aún con la etiqueta puesta, casi toda su ropa llevaba aún la etiqueta.
Unos vaqueros ajustados un poco más oscuros de lo habitual, y una camiseta no muy holgada vendrían bien. No pude evitar, buscar un zapato medianamente alto, era algo que no podía evitar usar. Como había echo con la ropa , mire la zuela comprobando que tampoco había echo uso de ellos.
Busque en su baño, algo con lo que peinarme, y encontré una plancha del pelo y un peine, con el cual ondule un poco aquella larga melena medio rubia que tenía. Para luego terminar dándome un toque de pintura.

Recogí aquel cuarto que ahora iba a ser el mío hasta que logrará como volver a mi lugar, permitiéndome cotillear entre sus cosas, algunas fotos, albunes con aún más fotos, y algunas que otra dedicatorias salieron en uno de sus cajones, decían de ser de amigos. No pude evitar cotillearlas, la verdad que era una chica lo bastante guapa, y se veía algo popular entre sus amigos.
Deje aquellos álbumes a un lado sacando varias hojas bien dobladas, abriéndose sin poder evitarlo, si debía reconocerlo a cotilla no me ganaba nadie.

-Hostias... ya quisiera yo haber tenido estas notas en el colegio.- No pude contener al ver aquellas notas de honor que tenía guardadas.

Volví a guardar todo en su lugar, como estaba colocado, antes de salir de la habitación. No pude evitar mirar cada cosa que tenía , todas y cada uno de las figuritas de porcelana que había en los huecos de la escalera, mientras bajaba por ella.
Al llegar abajo me encontré con otro espejo más grande, en el cual no puede evitar mirarme nuevamente en el.

-Dios.. como voy a hacer esto..

Escuché algunas voces, e intente buscar de son de venían hasta llegar al comedor donde estaban desayunando los otros dos integrantes de aquella familia que aún me faltaban por conocer.

-Hombre Daniela por fin te dignas a bajar, ya estás mejor de la resaca?.- aquella niña que antes me había sorprendido en el baño, no evitó reírse nuevamente.

- Yo?, yo no estoy ni resacosa, ni bebia.. que dises...Pero vamos que aun no me dijistes quien ere..y quién es esa tal Danna-No pude evitar contestarle

-Y ese acento?.-Digo la que debía de ser su madre.-Con quien te has juntado ahora para que hables así?.

El hombre que desayunaba tranquilamente sólo miraba la escena risueño.

-Anda que no dice que está resacosa mirala.

-Nuria.. deja a tú hermana ya.-Hablo de nuevo aquella mujer.

-Ay Nuria ..que cosas tienes chiquilla.. Le dije.

Aquella personas creían que yo seguía siendo Daniela, si seguía comportándome así de extraño lo único que iba a pasar que me tomarían por loca, y quien sabe donde serían capaz de mandarme está gente, asique no puede hacer otra cosa que intentar adaptarme a la vida de aquella chica mientras solucionaba todo aquello.

- Con vuestro permiso voy a hacerme un café.-Dije entrando nuevamente en la cocina.

- Ya os dije que Daniela está muy extraña..

-Estará estresada con tantos exámenes y el trabajo a la vez.-Esta vez si fue la voz de aquel hombre que había permanecido en silencio.

No abri más la boca, en lo que quedó de desayuno, no evite charla más, simplemente asentía cuando crei que debi a de hacerlo y negué cuando lo veía oportuno.
Mientras Nuria no me quitaba la mirada de encima.

-Y como es que te arreglarse tanto?, vas a salir con alguien?.- La voz de aquella niña risueña levantando sus dos cejas no pude evitar echarme a reír.

- No se puede una vestir bien de vez en cuando por que si?.

-Tu?, no.. Si sólo te viestes con ropa cómoda y te haces un moño, es más nunca has sabido usar la plancha para acerté ondas en el pelo

-Pues ya ves una que sabe usar el youtuber para algo corazón.-Dije levantándome para salir de aquel comedor dejando a la niña mirándome sorprendida.