Capitulo 6

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Madrid

-Pero de verdad que tu no has notado nada raro hoy en tu hija?.-Podia escuchar como ambos empezaban una conversación en la cocina, mientras hacía zapping en la televisión.

-Hombre José, la niña es normal que este así, entre lo del pie, la gira aplazada, y que empieza en nada, está nerviosa.

-Que me ha dicho antes en el hospital que ella no fumaba cuando le ofrecí un cigarrillo, cuando ella me los suele quitar a mi de las manos.- Logre oír con claridad.

Lo siento mucho, pero por mucho que fumara está mujer, yo no pienso tomarme ni un cigarro, lo que me faltaba a mi ya.

Aquellas voces empezaron a disminuir, mientras que a la vez se escuchaba con más claridad los pasos que se aproximaban al salón.

- Malú, quieres comer ya.-  Asenti con la cabeza, pronto mis tripas empezarían a contestar por mi.

La seguí hacía la cocina, donde comimos un cocido que hizo, que a parte de calmar mi hambre, hizo que este plato se pusiera en el número 2 de mis platos favoritos. Apenas le si tema de conversación a los dos, más bien escuchaba lo que decían, y para no pagarla demasiado asentía cuando creía conveniente y negaba cuando pensaba que aquello no podía ser correcto, aunque más bien casi todo lo respondía al revés.

- Se puede saber que te pasa a ti hoy Jefa?, estas empana, apollarda.. -Antes que siguiera soltando más grosería no pude evitar saltar.-Esa boca!.-Pepi y yo saltamos a la vez.

José y ella me miraron a la vez, creo que aquella escena no me pudo causar más gracia, por que inconcientemente se me escapó una carcajada.

-Y encima se ríe.-Jose me miró fijamente.

Al ver que no era conveniente seguir con aquella conversación me levanté de la mesa aún riendome y abandone la cocina, para volver al salón, justo cuando llegue a semtarme el timbre de la casa empezó a sonar

-Esperas visita?.-Salió en cuestión de segundos mi hermano.

-Que yo sepa No?.-Negué, viendo como se dirigia a la puerta de la entrada.

-Pues creo que es para ti.- Escuché segundos después de abrir la puerta.

No respondi nada, aún que fuera para mi no iba a conocer a la supuesta visita. Pocos minutos después fui asaltada por unos pequeños brazos que se rodearon a mi, una pequeña niña, medio rubita me llenaba de besos la cara.

- Ya te vale Lula, ni una llamada en estos días.

- Pues haber si con vosotras mejora el ánimo, por que no sabes tu como se a levantado Vero.-Confeso mi hermano antes de marcharse de nuevo a la cocina con Pepi.

-Y eso que te sucede.-Se sentó a mi lado.

- No se si pueda confesarte esto, sin que pienses que estoy loca, de remate, o para encerrarme en un manicomio de cabeza.

-Venga Malú tampoco debe ser tan malo... no me digas que de nuevo tiene que ver López con todo esto?.- Me miró fijamente.

-López?, Pablo López..- La mire extraña.

-Que te ha echo ahora?, Mira que te decía yo que era un buen chico, que el te quería que se veía en sus ojos, pero si no está luchando por ti por algo es Lula.. cariño.

-No..  no es nada de eso..Esque..

-Haber cuentame con tranquilidad.-Me miró, para luego dirigir los ojos a la pequeña.-Carla cariño, por que no vas con Danka que mirala está allí tumbada al sol mirándote esperando que la llenes de mimos.

La niña de un salto le hizo caso a su mamá, y se fue fuera a la terraza junto a las perritas, y al gato que de vez en cuando se dejaba ver desde la puerta, consiguiendo así que nos dejará a ambas solas y así poder hablar con tranquilidad.

-Sabes que me puedes confiar lo que sea, de aquí nunca sabrá nada de lo que me digas, a no se que sea algo para matar a alguien que así ya sabes que soy la primera que voy por ti.- No pude evitar reírme, me recordaba tanto a mi amiga Danna que aria cualquier cosa por mi aún así fuera la cosa más difícil, ella estaba allí intentándolo una y mil veces si así hiciera falta, hasta conseguir ayudarme.

-Haber como empezar, todo ocurrió ayer, al salir de clases, yo y mi amiga Danna nos regresamos a Málaga.-No conseguí seguir por que ella me paro enseguida.

- Que dices Malú, que clases?, Si tu ayer estuvistes en la radio.. A Málaga?. Si hasta dentro de unas semanas no tienes que ir, Quien es Danna?.

- Por favor.. déjame explicarme.- Intenté empezar nuevamente.- Cuando ambas nos regresabamos de Málaga al pueblo, la deje en su casa para yo irme a la mía, donde estar con mi familia, al igual que ella. -Suspire mientras sentía la mirada clavada de ella.- Cuando nos vimos nuevamente por la tarde, paseamos por allí, y luego  fuimos a cenar como habíamos quedado, pero al terminar de cenar, me llamo mi jefe, del bar donde ambas trabajamos, y me dijo que debía de estar hoy dentro de unas horas para una cena que había, destrozandome aquel día de descanso, y eso me enfado un poco y me rayo en lo que quedaba de tarde.- No me quitaba la mirada, mientras que en su gesto se podía ver que no entendía nada.- Después de cenar nos fuimos a nuestro parque favorito donde cada vez que podemos vamos y paseamos por allí, lo que aquella noche sólo nos sentamos, y me desquite un poco de el estrés que me había causado aquella llamada. Cuando el silencio Reino entre nosotras ella entró en su Instagram a mirar si había algo nuevo, y me enseñó una foto que había subido recientemente Malú, a lo que yo le respondí, "Ya me gustaría a mi tener la cuenta bancaria que tendrá esa mujer, y sin apenas hacer nada, nada más que cantar seguramente", lo dije sin pensar, estaba enfadada, pero un señor que apareció derrepente se nos acercó y me insinuó que eso no era lo que de verdad yo deseaba.

- Que ..que quieres decir con todo esto.

- Que está mañana me he despertado aquí, con el cuerpo de Malú, con la cara de Malú y con este insoportable dolor de pie que deberá ser de ella también, que está mañana no me he despertado siendo Daniela, que está mañana me he despertado en Madrid, en el cuerpo de Malú

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