Capitulo 8 - Nuevamente metiendo la pata.

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Asistir con Danna al concierto, era un paso grande, un paso enorme para intentar averiguar cuál fue el motivo de que llegáramos a esta situación. Voy a asistir a mi propio concierto de espectadora?, en vez de cantante que locura estaba siendo esta, aquella chica si de verdad estaba en mi cuerpo, y apenas me escuchaba, como haría para llevar a cabo mi show. Me llevaba las manos a la cabeza nada más en pensar todo lo que podría ocurrir ese día, aunque si lo pensamos con claridad, de la misma manera que aquella chica debía de hacer mi trabajo, hoy yo debía de hacer el suyo y no tenía ni idea de que trabajaba y de que estudiaba esta chica, que desastre todo.

-Que te pasa?, Desde que te he llamado esta mañana estás muy rara tía.-Me hace salir de mis pensamientos al entrar a la habitación.

Podía confiar en aquella chica y contarle lo que realmente me estaba ocurriendo?, o me tomaría por loca, o simplemente al enterarse de quien era yo realmente, se volvería tan loca de contar esta historia tan ilógica y vendrían a encerrarnos a ambas en un puto manicomio.

-No nada.-Negue con la cabeza.-Simplemente es que no dormí bien anoche.

-Bueno mira piénsalo por el lado bueno, vamos a cobrar un poco más, y encima por fin has decidido venir a un concierto conmigo que para tu asistir a un concierto de malu es como pedirme a mi ir a una biblioteca y no romper ese silencio.

Hice un nuevo movimiento con mi cabeza negando, mientras dirigía nuevamente mi mirada al armario.

-A que hora debemos estar?.-Dije sin quitar ojo a todas las etiqueta que tenía esta chica en su ropa sin estrenar aún.

-A las seis dijo, para que organicemos todo, por que me apuesto a que no hicieron nada los vagos estos.

-Y que tenemos que hacer?.-Su mirada se clavó en mi.

-Me estás tomando el pelo?.-Abrio los ojos.- Pues que vamos a hacer, lo de siempre yo hacer de comer para ciento y la madre que vengan hoy a cenar, y tú pues ya puedes ponerte la mejor camiseta, y mostrar tus atributos a ver si así nos dejan más propinas.

-Tengo que servir a la gente?.-Dirigi mi mirada hacia ella, que cada vez me ponia cara de más asombro.

-Tia.. enserio que te pasa?.

Resople sentándome en la cama, esta vez sin mirarla, no podía aguantarle la mirada cuando debía de contarle esto, esta mierda de historia que ni yo misma me la creía, como se la iba a creer esta chica.

-Dani, enserio me estás preocupando nena, que te pasa?, has tenido algún problema en casa anoche?, esta mañana?.-Me paso su mano derecha por mis cabellos.

-Si te cuento.. me prometes que no me tomas como una puta loca recién salida del manicomio, ni nada de eso?.-Subi la mirada para encontrarme con la suya, antes de bajarla nuevamente un poco agobiada.

-No te prometo nada, sabes que para el mundo entero, ambas somos unas locas.-Se echo a reír.-Por que las cosas que nos pasan a ambas no tienen remedio, y si..

-Para..para... no me sigas contando por que yo no se que cosa os pasaron, no se nada de esas anécdotas.-Aun sin volver a mirarla.

-Por que estás hablando así, como que las cosas que os pasaron, no estas hablando en primera persona.

-Haber como te digo esto..-Resoplo.-Es un poco difícil, pero más difícil de creer -Confieso algo agobiada.

-Haber tranquila Daniela, cuéntamelo, cuéntamelo pero primero relájate por que no te estoy entendiendo nada de lo que me estás queriendo decir.

-Te estoy intentando decir que no...-Suspiro.-Que no soy Daniela, que...-Resoplo nuevamente.-Joder.. que difícil es esto.

La veo desde el cristal del espejo como me mira asombrada, sin saber el por qué.

-Hemos cambiado las cosas al parecer.-Me sorprendió que empezara ha hablar.-Ahora tu eres la que dices tacos.-Se ríe levemente.

Niego con la cabeza.-Enserio no sabes lo difícil que me esta siendo contar esto...-Suspiro.-Por que esque no me lo creo ni yo.. -La miro.- Yo no soy Daniela, yo no soy esta, no soy esta imagen en el espejo, que mi familia no es esa..la que esta en la casa en la que hoy he amanecido... que yo no tengo este cuerpo..que no tengo este pelo tan claro, ni estos ojos... que no tengo esta voz, y tampoco soy esa que dice que te regaña casa vez que dices un taco joder...-Elevo mi pecho en un suspiro.-Perdon.. pero no soy esta que estoy viendo hay..

-Entonces... quien eres si no eres esa, esa a la que estoy viendo con mis ojos, mi amiga desde la infancia, la que cada vez que suelto un taco me dice "Danna esa boca", y me rechista cada vez que le niego algo que sabe que es lo correcto, solo por molestarme.

-No soy esa...no soy esa chica.. lo único que se..esque.-Pongo mis ojos en blanco.-Esque ayer estaba sentada en uno de los sillones en la radio esperando a mi hermano, para irnos a casa, cuando un señor mayor se me apareció con un perro, que he de decir que el perro era hermoso, que me dijo unas palabras extrañisimas antes de desaparecer en la nada, y después de una noche inquieta de tormenta me he despertado en esa casa así.

-Haber... haber que dices de la radio, que dices de tu hermano, si tu no tienes hermano tienes una hermana..

-Que esa no es mi familia ya te lo dije.-resoplo aún más agobiada.

-Entonces quien se supone que eres?.-Puso sus mano a cada lado de su cintura, mirándome fijamente.

No dije nada, simplemente me levanté de la cama, y dirigi a la habitación que había entrado antes compro equivocación, entre a la suya, volviendo a encontrarme con aquellos posters en las paredes. Ella entró justo detrás mía mirándome fijamente, mientras que yo volvía a echar un vistazo a cada uno de ellos, en los que aparecía en diferentes etapas de mi vida, el último que tenía era el de oxigeno.

-Me da mucha vergüenza.. pero cada una de estas, soy yo -Dije bajando la mirada con las mejillas completamente coloradas.

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