Capítulo 25. (Locos)

13.6K 1.1K 41
                                    


DASSIA

—¿Todo bien por ahí? —pregunto un poco afligida.

—Todo está bien, cachorrita. Dime cómo estás tú.

—Ailee duerme conmigo.

—Bueno, cuando llegue yo, la sacaré de nuestra cama. Tú solo duermes conmigo.

Me río un poco y bajo el volumen del celular al sentir como la rubia se remueve.

—Dante...

—¿Qué? Es verdad cachorrita, siento que debo estar ahí, para ti.

—¿Cómo está Wolf? —cambio de tema.

—Jodido. No sabemos dónde fue. Esto es una mierda total.

—¿Nada aún?

—No, Greta ha ido muy lejos. No sabemos por dónde empezar, al menos algunas personas la han visto y la poca información que tenemos es gracias a ellos. Tanque está revisando algunas cámaras de seguridad, a ver si nos ayudan con algo.

—Mucha suerte. Cuídate mucho.

—Lo haré. Quiero que me mandes un beso.

—Pero es un teléfono.

—Hazlo.

—Dante...

—Cachorrita.

Lo hago, apenas un pequeño sonido. Él gruñe y dice lo mucho que me extraña. Después, simplemente cierro el celular y me acomodo en la cama. Ailee balbucea algo inentendible, yo agarro el edredón y me duermo.

******

Con el tiempo me había dado cuenta que me gustaba despertar aquí. El lugar era hermoso, desde la ventana podía ver el verde prado y mi cerebro se alocaba.

Estaba sentada peinando mi cabello luego de haberme dado una ducha.

—Cerberos viene —menciona Ailee, el pequeño perro corre por el lugar y juega con mis pies. ¡Es tan bello!

—¿Quieres comer?

—Sip.

—Vamos.

Dejo el peine a un lado de la cama y salgo del lugar con Cerberos a mi lado. El parece feliz de verme, al igual que yo misma.

Ailee y yo preparamos algo para las dos, y nos sentamos con algunos pancakes de avena, fruta, café y huevos.

Empiezo a comer conversando con la rubia, todavía no hay noticias de los chicos y su viaje.

—Me agrada la sandía.

—A mí igual. Sabe bien —respondo, mascando mi fruta.

Cerberos es alimentado también. Los tres desayunamos, mientras conversamos sobre lo poco que sabemos.

Mi cuerpo se paraliza cuando escucho la voz de mi madre, hermano... y de Nilo.

Dejo de comer mientras levanto mi mirada hacia ellos.

—¡Dassia!

El grito de la pequeña Trixy suena duro, los demás me miran... abro los brazos mientras ella se lanza a mí con fuerza.

—Hola, pequeña.

—Te extrañé.

—Yo también lo hice. Estás muy bonita. —Acaricio su rostro suavemente.

CAMBIANDO POR ELLA - Saga MC -Ella#4Donde viven las historias. Descúbrelo ahora