Epílogo

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Epílogo

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Epílogo

Capítulo narrado bajo la perspectiva de Edward Cullen

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Capítulo narrado bajo la perspectiva de Edward Cullen.

A veces me sorprendía lo mucho que el tiempo avanzaba, incluso para nosotros. El tiempo, cosa que para mi había carecido de valor durante mucho, ahora era lo más valioso.

Observaba el pasado con atención y era increíble todo lo que habíamos atravesado yo y mi familia. Los errores que cometimos así, como los aciertos, seguían repercutiendo en nuestras vidas en la actualidad.

Recuerdo la primera vez que la ví, en esa plaza pública en Londres, rodeados de tanta gente. Acudí el día y a la hora señalada en la visión de Alice, inclusive llegué minutos antes, nervioso.

La mujer llegó con una gran mochila, depositó sus cosas en el piso y empezó a realizar calentamiento. Mi corazón congelado saltó de mi pecho al ver el extraordinario parecido con la mujer de mi pasado, mi primer y único amor hasta la fecha. Llevaba el cabello en largas trencillas, pero su mente era dulce y delicada, contrastaba muchísimo con su aspecto físico tan llamativo. Escuchar sus pensamientos de cómo tenía que conseguir dinero para sus padres ya retirados me hizo interesarme más, así como lo que ella había pasado por querer estudiar danza contemporánea, era una chica increíble y eso que apenas llevaba diez minutos viéndola y escuchando su mente.

Cuando empezó a bailar, todo el mundo dejó de tener sentido para mí. Sus brazos y piernas se movían tan delicadamente que parecía un cisne, algo irónico ya que bailaba El Lago de los Cisnes de Tchaikovsky. La gente a mi alrededor comenzó a aplaudirle y a depositar dinero en la pequeña caja que ella había colocado en el suelo, yo en cambio quería quedarme ahí parado viéndola bailar toda la vida si fuera necesario. Cuando ella terminó y todos se fueron, yo me quedé ahí, estático y con temor de acercarme, olía extraordinariamente bien, pero podía soportarlo.

Ella levantó sus hermosos ojos hacía mí y me dedicó una enorme sonrisa, como si ella también me hubiera estado esperando.

— Llevas ahí parado bastante tiempo y ni siquiera me diste un par de euros, empiezo a creer que debería golpearte porque eres un acosador— dice la morena mientras se deshacía del moño y liberaba su cabello constituido en cientos de trenzas pequeñas.

𝗣𝗜𝗘𝗦 𝗗𝗘𝗦𝗖𝗔𝗟𝗭𝗢𝗦 ━ Jacob Black ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora