Eres preciosa, ¿te lo habían dicho antes?

Historia

Era el primer día de instituto de Sarah James. Estaba un poco intranquila porque iba a un insti nuevo que eso signifca compañeros y profesores nuevos. Ella que no era de el "grupo de las populares" ya que le parecía una bobería que los adolescentes se clasificaran de mejores a peores sin tener en cuenta su personalidad. Se acababa de mudar también a un barrio por cuestiones del trabajo de su padre, el señor Frank James, un hombre cincuentón, alto, pelo negro, elegante y bastante atractivo. Sarah se le parecía un poco en su carisma, ya que los dos, tanto padre como hija, eran muy tímidos y tenían el pelo negro como la noche. Ahí terminaban todas sus similitudes. Ella tenía los ojos de su madre, que eran dos ojos azules, brillaban en medio de la noche de su cabello. Su madre, Caroline James, había fallecido en un accidente de tren, hace más de 6 años y desde entonces su padre había vivido con la única felicidad de su hija, que cada vez se hacía más mayor.