La historia de Coroline

Empieza de nuevo.

El día de hoy estaba transcurriendo demasiado lento, me sentía muy mal, tenía dolores horribles así que fui a dormir.

Cuando desperté, baje a ver si ya había llegado mamá y si, ahí estaba.

-¿Mamá?

-¿Qué pasa?

-Nada, solo... solo quería saludarte.

-Ya lo hiciste ¿ahora que?

-¿Estas molesta?

-No, claro que no, intentaste acabar con tu vida, ¿cómo estar molesta? Estoy muy contenta por lo que hiciste.-dijo sarcásticamente.

-Lo siento mamá, juro que no sabia lo que hacía, de saber que te molestarías jamás lo hubiese hecho. Perdona.

-¡¿Cómo no voy a molestarme!? Por dios, intentaste acabar con tu vida, ¿crees qué eso no me hace sentir mal?

-Se que si mamá, pero... por qué no piensas en como debí de sentirme yo al hacer lo que hice, ¿por que en vez de ponerte a juzgarme por que no te sientas a charlar conmigo un poco he?, ¿por que no me dices que me quieres y me das un abrazo?, créeme que yo tambien me siento mal, y muy muy seguido y tu ni siquiera te das cuenta, no te lo quiero decir nunca por que se que tienes demasiadas ocupaciones como para todavía tener que estarme soportando a mi. Pero en verdad lo siento mamá, te juro que la próxima vez no volveré a fallar y dejare de darte tantas preocupaciones.

-¿La próxima vez? ¿Piensas hacerlo de nuevo?

-Eso no importa mamá, pero juro que algún día toda esta miseria terminara, te lo juro. Me di la vuelta y volví a mi habitación.

A veces, me siento, tan... tan sola. Hay muchas personas a mi al rededor pero... me siento completamente sola. Quisiera ser la misma de antes, quisiera ser la misma que sonreía todo el tiempo, quisiera ser esa niña que regalaba abrazos y reía sin parar, pero esa niña desapareció el mismo día en el que desaparecieron todas mis esperanzas, mis fuerzas y mis ganas de luchar y seguir a delante. Lo único que quedo es lo que soy ahora, quedo la miseria en la que estoy viviendo en este momento. Pero... a la larga a todo se acostumbra una, pero aún hay una esperanza dentro de mi que piensa en que todo esto puede terminar, de una manera... o otra.

Al subir a mi habitación quede dormida casi inmediatamente. A la mañana siguiente alguien toco a mi puerta, me levanté y fui a ver de quién se trataba.

-¿Qué pasa? adelante, entra.-era Emily.

-¿Sabes dónde esta mamá?

-No, ¿pasa algo?

-No, es sólo que, hoy es el día en el que me entregan el resultado de mis estudios finales, tengo que pasar por ellos en menos de 15 min., y mamá no llega. ¿Me llevarías a recogerlos?

-Por su puesto, solo me cambio y ahora bajo.

-Esta bien gracias.

Tenía que darme prisa, ya era muy tarde y mi madre no se ni donde se encuentre. Me puse unos Jeans negros, unos tenis y una sudadera blanca, algo para estar cómoda, me hice una coleta y salí.

-¿Lista Emily? Tenemos que irnos ya.-grite desde la parte de abajo.

-Si lista.-bajo corriendo.

-Vámonos.-tome su mano y salimos.

Tuvimos que correr por que ya era demasiado tarde, pero aún así llegamos justo a tiempo. Entremos y nos sentamos en la sala de espera mientras salía el doctor con los resultados.

-Estoy asustada coroline.

-¿Porqué Emily?

-No lo se, siempre que vengó a hacerme pruebas el doctor se preocupa mucho por mi. Esta es la 4 prueba que me hace, no se qué sucede que dice que tiene que volverme a hacer una nueva, espero que esta si sea la última. Me hace pruebas desde la vez que... que Ben abuso de m...

-Ya lo se Emily, no tienes que recordarlo ¿okay?, no te preocupes, te aseguro que todo estará bien, si te hacen muchas es por que sólo quieren estas seguros de que estas perfectamente bien, ya no te preocupes.-le sonreí.

Pasaron varios minutos y el doctor no salía, ya había tardado bastante, así que pensé en volver a casa, pero cuando ya nos ibas apareció el doctor.

-Espera.-nos detuvo.-perdón por la tardanza pero los estudios tardaron en dar el resultado más de lo que pensé.

-No se preocupe, ¿ya están listos?

-Si, ya... ya están listos.-dijo algo serio.-Emily, ¿podrías dejarme hablar con tu hermana un minuto por favor?

-Claro.-dijo Emily y se fue.

-¿Tu madre no ha podido venir?

-No, lo que pasa es que tuvo un pequeño imprevisto y no pudo asistir, disculpela.-conteste algo nerviosa.

-Esta bien, no hay problema.

-¿Y qué hay de los resultados de Emily?

-Mira... Te los entregare a ti, pero, prefiero que se los entregues a tu madre y ella los lea ¿de acuerdo?

-De acuerdo pero... ¿pasa algo malo?

-Emmm... prefiero que hables sobre esto con tu madre ¿okay?-dijo muy nervioso-Solo puedo decirte que... no esperen buenas noticias. Lo siento mucho...

-¿Qué? ¿Qué le pasa a Emily, esta bien verdad?-dije demasiado asustada.

-...

-¿Verdad?

-Lo siento, no puedo decir más, hasta luego Coroline, en verdad lo siento mucho.

Me quede demasiado asustada, quería abrir el sobré para ver que era lo que decía pero, al mismo tiempo me daba temor saber que era lo que contenía. Guarde el sobré, me tranquilice para no asustar a Emily y salí para volver a casa.

-¿Qué paso Coroline, que decían?

-Nada cariño, no paso nada, todo esta perfecto. Volvamos a casa.

-¿En serio?

-...En serio. Anda vámonos.

Me tomo de la mano y nos fuimos a casa. Cuando llegamos aún no había nadie, ni mamá, ni mis dos hermanos pequeños, ni la señora Betty. Quería abrir ya mismo ese sobré, pero me resistí. Me fui con Emily a mi habitación y nos pusimos a ver películas, pasaron las horas y aún no llegaba nadie, comenzaba a preocuparme, pero ya no tardarían en llegar. Llego la noche y nunca llegaron así que, lleve a Emily a su cama y le dije que durmiera, que ya llegaría mamá y mis hermanos. Trate de dormir yo también, pero no podía, seguía pensando en aquel sobré ¿qué es lo que contenía dentro? ¿Qué?

Ya era de madrugada y aún no conseguía dormir nada. No soporte mas y baje por el sobré. Estaba en la cocina, lo mire por varios minutos no sabia que hacer, pero me decidí y lo tomé. Lo abrí lentamente, mis manos temblaban y estaba muy asustada. Lo saque del sobré y lo leí... de inmediato las lágrimas escurrieron de mis ojos, no podía ser verdad lo que decía ese sobré, no, a Emily no le podía estar pasando esto.