Let Me Know ||Yoongi|| COMPLETA

Epílogo

Desperté sintiendo algunos rayos de sol en mi rostro, al abrir mis ojos, ví la espalda de Jungkook que estaba durmiendo profundamente.

Me levanté con sigilo para no despertarlo, salí de la habitación y quedé en medio del pasillo, sentía que esto ya lo había vivido o que tal vez lo soñado.

Ignoré aquello y me propuse ir a la habitación que estaba al fondo del pasillo. Entré sin más, y la ví allí. Durmiendo tranquila y sin preocupaciones.

Una sonrisa decoró mi rostro al verla, aún recuerdo cuando la cargaba en mis brazos, recuerdo la primera sonrisa, la primera palabra, la primera vez que se animó a caminar, su primer cumpleaños. La primera vez que se salió su diente, la primera vez que bajó su periodo; convirtiéndola en una señorita. Cuando se enamoró e ilusionó, pero después vinieron sufrimiento y llanto, su etapa de rebeldía y mala educación, pero ahora es toda una mujer de 19 años, tal vez algo seria y callada pero muy bien en sus estudios y conducta.

Realmente valió todo la pena.

Pero aún así, estando casada con Jungkook, teniendo a SaRa a mi lado, viviendo en un país diferente y teniendo una casa a la cual habitar. Siempre me sentía vacía.

Me faltaba él.

A veces cuando comienzo analizar a SaRa, es tan idéntica a su padre, la forma de expresarse, hablar y hasta caminar. En cierta parte siento que como si él estuviera en ella. Yo sé que la cuida desde donde esté.

Salí de la habitación de ella no si antes besar su frente, se removió un poco pero quedó durmiendo.

Entré a la sala y saqué un pequeño DVD de un rincón que tengo al lado de la televisión.

Lo puse en el reproductor de DVD's.

※※※

—Hay algo que dejó Yoongi para a ti— dijo Jungkook, sentándose en la sala de mi casa.

—Si lo sé—me acomodé un poco en el sillón.

Pasó más de 5 días después de su muerte, todos estos días fue muy difícil pero recordé sus palabras diciendo que sea fuerte, por nuestra hija. Jungkook me acompañó mucho estos días pero desde que estuve con Yoongi sentía que no amaba realmente a Jungkook, él lo sabía pero decidió aún así quedarse a mi lado.

Días enteros sin dormir, comer tenía que hacerlo por obligación, la bebé no tenía la culpa de mi pequeña depresión, ella deber estar sana.

—¿Lista? — preguntó Jungkook con el control a mano.

Asentí con atención al televisor.

Al terminar el vídeo, era un mar de lágrimas. Reconocí todas las voces, y me dió mucho asombro.

Jungkook me miraba detenidamente, con algo de tristeza en su semblante.

—¿Te gustó? —preguntó sacando el DVD.

—Si—susurré.

—Yoongi lo hizo cuando estaban separados, no sabía que él componía canciones, nos pidió a todos que le hiciéramos el favor de prestar nuestras voces. Sabíamos ya sobre su enfermedad, al principio no estaba seguro pero no podía ser tan egoísta— habló de forma calma y sincera.

—Lo ha... Lo ha hecho muy bien—hablé con más lágrimas.

—Este es el pequeño regalo para a ti— dijo queriendo formar una sonrisa, pero terminó en una mueca.

Asentí bajando la cabeza.

—SunHi—se acercó a mi—prometo volver hacerte sonreír— iba a decirle algo pero él se me adelantó—sé lo que sientes, pero eso no me impide poder volver hacerte feliz y si quieres me puedo hacer cargo de esta bebé —me miraba tan profundamente que palabras no salían de mi boca.

—Jungkook, ella no es tu hija. No puedes hacerte cargo—hablé para que lo pensara.

—Lo se, pero quiero hacerlo, déjame hacerlo SunHi—me pidió Jungkook mirándome con súplica.

Vacilé un poco, no quería que el sufriera al saber que mi corazón seguía amando a alguien.

Alguien que ya no está.

Aunque Jungkook seguiría insistiendo hasta que acepte.

—Esta bien, Jungkook—solté un suspiro.

Él formo una pequeña sonrisa y dijo:

—Prometo que tú y la bebé tendrán una vida realmente hermosa.

Asentí con una pequeña sonrisa.

※※※

Al terminar de ver el video, suspiré.

Han pasado 19 años después de aquel momento tan doloroso para a mi y aún sigue en mi memoria.

El primero amor nunca se olvida

☁

Mientras limpiaba la sala, entre un rincón ví la foto de Yoongi y yo cuando éramos más jóvenes. Sonriendo felizmente.

Una sonrisa nostálgica invadió mi rostro, pero de repente un pequeño escalofrío recorrió mi cuerpo, teniendo una sensación extraña y ansiosa a la vez, no sabía lo que me pasaba.

Hasta que el timbre sonó.

Al abrir la puerta, mis ojos se agrandaron, mi cuerpo se inmovilizó y quedé completamente en blanco.

—Hola, SunHi.

No puede ser.

Jsjsjsjs acá no termina esto :)