×D A N G E R× [YoonMin] +16

× #9 ×

🌩

YoonGi tenía los labios apretados, en parte por la diversión.

- Estoy impresionado bombón, no pensé que en realidad lo ibas a hacer... - se inclinó de lado en su coche, poniéndose cara a cara conmigo, siendo astuto, con una sonrisa burlona.

Me burlé - bueno, ahora ya lo sabes - le lancé una falsa sonrisa.

Miré hacia abajo, echándole un vistazo.

Finalmente llegué a ver lo que llevaba puesto, y no voy a mentir, se veía bien, o bueno, más que bien.

Llevaba una playera blanca, una chaqueta de cuero cubriendo su cuerpo en color negra con franjas rojas muy sutiles, una cadena de plata colgando de su cuello, de su oreja derecha colgaba un pendiente circular de plata y de su oreja izquierda otros dos iguales al derecho, unos jeans negros ajustados rasgados de las rodillas y unas botas militares negras, muy caras por cierto. Su cabello estaba un poco despeinado cayendo por su frente y sus ojos tenían un leve ahumado en sombra negra, muy sutil. Que guapo chico.

- Me estas echando un vistazo por lo que veo... - miré hacía arriba para verlo, me veía con una cara de burla.

Rodé los ojos.

- No... - miré lejos, avergonzado de que me haya descubierto.

Se lamió los labios, pasando su mirada de arriba a abajo por mí cuerpo - tu no te ves mal... Te ves bastante bien, para ser un chico.

Yo, por el contrario, llevaba un par shorts con una camisa tipo polo blanca y un suéter negro un poco largo, con unos mocasines negros. Mi cabello un poco despeinado y en mis labios mi bálsamo de sandía, sin mencionar que puse un poco de sombra café sutil en mis párpados.

No sabía si estaba hablando en serio o simplemente estaba bromeando, pero tomé el cumplido que me había dicho de todas formas, agradeciéndole algo aturdido.

El simplemente se rió, enviando un escalofrió por toda mi espalda.

- Sube, anda... - hizo un gesto con su cabeza volviéndola hacia el coche que parecía muy lujoso. Lo había cambiado y ni siquiera habían pasado un par de horas que lo había visto.

Iba a preguntarle de donde lo había sacado, pero algo dentro de mí me advirtió que no lo hiciera.

Ni siquiera me di cuenta de que ya estaba sentado dentro de su coche, hasta que tocó el claxon, haciendo que me sorprendiera y saliera de mi trance.

YoonGi sacó la cabeza, su codo colgaba del borde de la ventana.

- Vas a entrar o que?

Lo miré, a su coche y a mi casa. No era una decisión muy difícil de tomar.

Me acerque al lado del pasajero y me incliné para tirar de la palanca, me di cuenta de que no había ninguna manija para abrir la puerta.

- Que te esta tomando tanto tiempo? - dijo YoonGi a través de su ventana.

- ¡Cállate! No hables tan fuerte, mis padres te escucharán y no se como abrir esta cosa! - susurré fuertemente para que me escuchara.