×#34•PT.1×

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🌩

Soy un puto idiota.
Ya es oficial.

Golpeé rápidamente con mis puños en un casillero, tratando de liberar mi ira, pero en realidad solo hizo que me calentara más.

Cuando me enfado, mi furia se hace cargo de mí y es como si no estuviera allí. Yo no soy el que habla. La rabia lo hace por mí.

Me cega y no se lo que hago hasta que me equivoco en algo.

Por el momento ya había terminado de maldecir mi vida contra los putos casilleros, mi pecho subía y bajaba violentamente hacia abajo y arriba, mis nudillos llevaban una costra roja, el sangrado se añadía a mis puños ya golpeados por mi pelea con Kim.

Negué con la cabeza, pasando mis dedos por mi cabello mientras tiraba de los extremos.

Tenía que hacer las cosas bien con JiMin porque si no lo hago, me volveré loco.

El es como una droga. Una droga de la que no puedo tener suficiente.

No importa lo mucho que me moleste, enoje o me irrite, todavía me preocupo por el.

Simplemente algo dentro de mí no va a dejarlo ir.

Tenía que encontrarlo y hacer las cosas bien de nuevo. Aunque no merezca su perdón, todavía quiero intentarlo.

Haciendo caso omiso de las miradas que recibía de los que me rodeaban, corrí por el pasillo en busca de JiMin. La campana no había sonado todavía lo que significaba que aun tenía unos minutos antes de que la clase comenzara.

Al doblar la esquina, me quedé mirando por encima de las cabezas de todos para ver si podía ver su cabello rosa en algún lugar.

No lo vi.

Suspirando, comencé a caminar en la dirección opuesta, tratando de seguir los pasos que había hecho. El tenía que estar cerca. Podía sentirlo.

Recordando cuando estaba en su casillero, tomando los libros que necesitaba para clase y uno de los primeros que agarró era de Historia.

Si solo supiera la clase que era.

- TÚ... - agarré el brazo de un tipo, girándole para que se pusiera cara a cara conmigo - sabes donde esta la clase de Historia?

Sus ojos estaban abiertos a la vez que su rostro desprendía un destello blanco. Parecía como si hubiera visto un fantasma.

Rodé los ojos - lo sabes o no... - escupí - no tengo todo el puto día.

Eso pareció hacerle reaccionar porque fervientemente asintió con la cabeza. Tragando saliva, se pasó la lengua por los labios - es,es el salón 210 en el edificio B.

Le solté el brazo, asintiendo con la cabeza - muy bien, gracias, ahora largo que me estorbas.

- No hay problema, lo siento - dijo en un chillido antes de que le diera unas palmaditas en el hombro y me alejara prácticamente corriendo hacia las clases.

Corriendo por las escaleras para bajar de la segunda planta del edificio en donde me encontraba, empecé a caminar para llegar al edificio B, caminando por el pasillo leyendo los números de las puertas y empujando a los chicos que me impedían el paso a mí alrededor.

Una vez que estaba llegando a la clase 210, desacelere ligeramente. Estaba perdiendo mi aliento y me comenzaba a cansar. Básicamente he estado persiguiendo a este chico por lo que parecieron horas cuando en realidad, solo fueron unos minutos.
Me tomó un tiempo, pero al final encontré la habitación y al chico al que estaba buscando.

×D A N G E R× [YoonMin] +16Donde viven las historias. Descúbrelo ahora