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- PARK JIMIN YA LEVÁNTATE!!! Vas a llegar tarde a la universidad!

Arrastrando los pies mi madre entró a la habitación, su voz aguda provocaba un zumbido y notaba como un tambor en mis oídos empezaba a sonar.

Gemí, pasando a mi lado - no - murmuré, clavando mi cabeza en mi almohada, con la esperanza de que se callara.

Yo no estaba de humor para hacer frente a los chicos de la universidad, las preguntas de HyoYong o los profesores aburridos. Solo quería dormir, ni siquiera tenía ganas en absoluto de mis encuentros con YoonGi, alias DANGER.

- JIMIN - gritó, tirando de la cobija por mi cuerpo, revelándome al aire frío que rodeaba mi habitación además de verme en ropa interior...

Eso no funcionó demasiado.

- Cinco minutos más, por favor - dije, tomando mi almohada y poniéndola en la parte superior de mi cabeza.

Tal vez ahora me deje en paz.

- JIMIN - tomó la almohada, golpeándome con ella.

O no...

- Por Dios, mamá!! - me levanté, molesto, y cansado como el infierno - ya, estoy arriba! Contenta? - escupí, frotándome los ojos.

- No te atrevas a usar el nombre de Dios en vano! - gritó con un tono de voz alto.

Yo simplemente rodé los ojos. Todo depende de mí para predicar el nombre de Dios y Jesús y permanecer fiel a mi religión, pero maldita sea, mi madre puede llevarlo a otro nivel. Odio ese nivel de fanatismo por parte de mis padres hacia la religión. Lo detesto.

- Deberías de estar avergonzado de ti mismo, JiMin - continuó su sermón, mientras sacudía la cabeza, murmurando palabras incoherentes en voz baja.

- Vístete y date prisa, no tenemos todo el día.

- Tengo que tomar una ducha primero, mamá - me quedé de pie, listo para ir al baño cuando ella me paró sin dejarme caminar más lejos.

- No, no lo harás. NamJoon y yo no tenemos tiempo para que tomes una ducha de una hora. Tenemos que irnos, o todos vamos a llegar tarde solo porque tu no tienes la responsabilidad de irte a la cama a tiempo y levantarte temprano - me señaló con su dedo a la cara - lava tu cara, cepíllate los dientes, vístete y bajas, es una orden.

- Pero mamá, no tomo una ducha desde la noche y...

- Te atraparon a escondidas en la casa o que - fingió una sonrisa - si, bueno, eso no es culpa mía. Nadie te dijo que te olvidaras o te descuidaras de tus responsabilidades - comenzó a caminar - ah, y no pienses que no estas castigado ya, quiero que vuelvas a casa después de la escuela, entendido?

- Si, lo que sea - murmuré, mirando a otro lado.

Ella suspiró, no quería empezar otra discusión - será mejor que estés listo y fuera en el momento en que ponga las cosas en el coche.

Me hizo un gesto con la mano detrás de mi con desden en su dirección, mientras caminaba hacia el baño. Una vez que oí el ruido suave de la puerta cerrarse detrás de mi madre, dejé escapar un grito molesto.

Quiero a mi madre pero ella puede ser tan malditamente controladora y molesta a veces. Me esta volviendo loco. Y me ha quitado tiempo con esta estúpida charla.

Abrí el grifo del lavabo, me lavé la cara, antes de cepillarme los dientes y después, secarme la cara y la boca con una toalla. Arreglé un poco mi cabello, maldije mi vida, parecía repugnante. Gracias a Dios que no era grasa. No se veía la mitad de mal como pensé que se vería. Pero en general no era demasiado atractivo. Mis mejillas eran un poco regordetas y mis ojos pequeños. Maldije mi reflejo una vez más como cada mañana.

×D A N G E R× [YoonMin] +16Donde viven las historias. Descúbrelo ahora