Fallin' All In You (PERDIDOS EN LA SELVA)

SEIS

Me despierta un mosquito volando sobre mi oído, poco a poco abro los ojos y me doy cuenta que Arian aún me tiene rodeado con sus brazos. Se siente muy bien, es que nunca me imaginé que esto fuera a pesar, de hecho nunca me imaginé con un chico.

Me levanto como puedo sin despertarlo y por suerte esta vez no caigo de la hamaca. La verdad es que tengo que ir al baño y no sé muy bien donde podré hacer del dos.

Bajo de la casa como puedo, aunque sinceramente me da mucho miedo. Solo camino un metro y entre las plantas decido liberar lo que puedo, la peor parte es cuando tengo que lavarme porque las plantas no son muy suaves. Pero ya me siento mejor y no tengo estomago de embarazado.

Cuando voy volviendo Arian aparece y se nota preocupado.

-¿Blake Connor? -dice al verme.

-¿Que sucede?

Junta sus labios con los míos al acercarse, es literal solo un diminuto beso y yo me quedo con los ojos muy abiertos.

-Pensé que te habías ido solo.

-No, tranquilo, solo, bajé un poco.

Sé que no hay que avergonzarse de que el mundo tiene necesidades pero esta vez no quiero decirle por el momento.

-Es bueno saber que no te fuiste.

-Es más fácil que muera aquí a irme.

Lo tomo de la mano y caminamos un momento por la selva, tomar su mano áspera y un poco sucia me hace sentir especial, no me importa el momento y la situación, solo me importa un nosotros.

-¿Oye, qué otro lugar es hermoso?

-Lugar hermoso, ven hay uno.

Caminamos, trepamos, nos agachamos, pasajes secretos pero todo es una aventura junto a Arian, la verdad es que ya ni zapatos tengo y además solo una camisa me cubre el torso para impedir deshidratarme con el calor, mis pantalones están desgarrados pero aún así seguimos. Llegamos a un lugar cubierto de plantas verdes y en donde hay una especie de ave muy exótica, la verdad es que me da mucho miedo pero continúo acompañado y tomado de su mano.

-Oye Blake Connor.

Lo miro.

-¿Tuviste novias antes de venir aquí?

-No, he estado solo toda mi vida, mi mejor amigo es el que ha tenido novia desde el kínder y no deja de reprochármelo.

-Wow, que amigo.

Hay un silencio.

-¿Entonces?

Lo miro nuevamente.

-¿Te gustan los chicos también?

No sé qué responder, antes era obvio que no me llamaban para nada la atención, pero después de conocer a Arian y tener todo lo poco que hemos vivido estos últimos días, me ha encantado.

-Ah, no me había fijado en uno hasta que apareciste de hecho.

Arian inclina la mirada sonriendo, tal parece que se ha sonrojado un poco y yo nunca había logrado eso.

-Entiendo... Vaya me gustaría que te quedaras aquí conmigo el resto de la vida.

Ahí es cuando siento un pequeño dolor en mi estomago. Jamás me adaptaría a este lugar, si se que es bello vivir entre plantas pero solo me gustaría cuando son vacaciones.

-Bueno, si nos encuentran vendrás ¿no es así?

No responde, esta vez su sonrisa se borra y mira hacia otro lado, no a mis ojos.

-¿Ni siquiera por mi?

-Estoy tan acostumbrado a vivir en este lugar que no sé si pueda cambiar.

-Pero tienes una edad corta, Arian, eres demasiado joven y yo sé que te encantará aprender y ver miles de cosas nuevas.

-¿Cómo que?

-Cine.

Arian frunce un poco ceño.

-Creo que mi madre me habló un poco de eso.

-Si es una enorme pantalla, donde se proyectan filmes, el terror es mi favorito pero seguro nos vendrá bien ver una película romántica.

Logra sonreír un poco.

-¿Pero, qué pasaría si me gusta alguien más? ¿Una chica?

Ahí si no sé qué decir exactamente, soy un estupido porque le debería decir que eso jamás pasará porque ambos somos el uno para el otro. Pero digo una tontería del tamaño de la isla.

-Si es la indicada o el indicado, no te voy a estorbar.

Hay otro silencio mientras nos miramos fijamente. Esta vez él se acerca y me da un pequeño beso donde juntamos nuestros labios un par de segundos.

-!Blake! ¿estás aquí? -escucho a lo lejos.

Abro los ojos del tamaño de la luna.

-No puede ser, están cerca.

Me bajo del árbol en el que nos encontramos y gritó con todas mis fuerzas.

-¡Estoy aquí!